Este salmo describe cómo Dios protege a aquellos que confían en él y buscan refugio bajo sus alas. Promete librarlos de peligros como la peste, la espada y el terror nocturno. Afirma que aunque miles caigan a un lado, el mal no los alcanzará. Finalmente, Dios promete enviar a sus ángeles para guiarlos y protegerlos de todo peligro en sus caminos.