El documento describe el arte rupestre prehistórico y los sitios arqueológicos con pinturas rupestres en Colombia. Explica que el arte rupestre incluye pinturas y petroglifos encontrados en rocas y cavernas. Luego detalla varios sitios específicos con arte rupestre que se ven afectados por factores como la expansión urbana, la minería, el turismo y la apropiación cultural por parte de nuevos grupos étnicos. Finalmente, resume las principales dinámicas y agentes que influyen en la conservación
2. ¿Qué es el arte rupestre?
Se llama arte rupestre o pintura
rupestre a los bocetos o dibujos
prehistóricos que han sido
descubiertos en piedras o cavernas,
3. Temáticamente, las pinturas rupestres son más o menos
homogéneas: las provenientes del Paleolítico muestran
por lo general animales salvajes y líneas, mientras que
en el Neolítico aparecen figuras humanas, huellas de
manos y otras representaciones del entorno
entorno
Fuente: https://concepto.de/arte-
rupestre/#ixzz6mlEOthYg
4. Materiales
También llama la atención que estos dibujos
fueron hechos con materiales muy similares, a
pesar de hallarse a miles de kilómetros los unos
de los otros: pigmentos de carbón vegetal,
heces y otros fluidos corporales, hematita,
5. ¿Qué es un petroglifo?
• Se conoce como petroglifo a una imagen
que ha sido grabada en la superficies
rocosas (del griego petros: piedra
y griphein: grabar).
6. Técnicas artisticas
• Algunos petroglifos fueron hechos al picar la superficie con una roca más dura, mediante el golpeteo
constante con otro instrumento auxiliar, a la manera del cincel y el martillo (percusión). Otros fueron
grabados al rayar con el filo de una roca tallada (rayado). La superficie también pudo ser frotada con un
instrumento de piedra y finalmente pulida con la ayuda de arenay agua (abrasión).
7. ¿Qué es una pictografía?
Las pictografías (del latín pictum: relativo a pintar, y del
griego grapho: trazar) son grafismos realizados sobre las
rocas mediante la aplicación de pigmentos.
Mejor conocida como pintura rupestre,
esta modalidad de arte rupestre se
caracteriza por utilizar en su preparación
sustancias minerales (óxidos de hierro,
manganeso, cinabrio, carbón, arcillas),
animales (sangre, huevos, grasas) o
vegetales (grasas, colorantes). Diversas
mezclas se llevaron a cabo para obtener
pigmentos que van desde el negro hasta
el blanco, pasando por una amplia gama
de rojos ocre, naranjas y amarillos.
8. Pigmentos.
• Estos pigmentos se aplicaron con los dedos (pintura dactilar) o con algún instrumento a manera
de pincel. En muchos sitios rupestres es posible reconocer la impronta de los dedos o de la mano
completa, lo que sugiere una aplicación directa del pigmento; pero también se advierten trazos muy
finos o, por el contrario, áreas muy grandes, que debieron ser realizadas con algún instrumento
(pinceles o hisopos). También existe un tipo especial de pintura que se denomina negativa y que se
realizó soplando desde la boca el pigmento pulverizado sobre un objeto (por ejemplo, la mano),
dando como resultado una imagen de su contorno.
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11. Cementerio indígena de Usme: En el cauce de una quebrada en inmediaciones del recientemente descubierto
sitio arqueológico (cementerio indígena) se encuentran rastros de pintura rupestre indígena que se suman a los
vestigios de enterramientos de grupos Herrera y muisca. Estos son el blanco de una coyuntura especial en que
ciertas comunidades, que se autoreconocen como descendientes de los pueblos indígenas de la región y se
declaran “dolientes” (Boletín OPCA, 2009) reclaman por participación en la labores de manejo y puesta en valor
del lugar, no sólo por considerarlo patrimonio cultural sino por representar un “sitio sagrado”. Igualmente un
sector de la comunidad rural de la región ve en estos hallazgos una oportunidad para contrarrestar la expansión
urbana de la ciudad.
12. Piedra del indio, Ciudad Bolívar: Una roca, que aparece con evidencias de haber sido dinamitada en su parte
superior, posee rastros de pintura rupestre precolombina. A pesar de encontrarse en un afloramiento junto con
decenas de otros grandes bloques erráticos, éste que es el único signado también es el único que presenta
evidencia de explotación, quizás debido a prácticas de guaquería. El lugar se encuentra hoy en la zona límite de
un polígono de explotación minera y muy cerca de los cinturones de avance urbano de esta localidad de Bogotá.
Un sector de la comunidad ha manifestado su interés en resaltar su valor para sumarle elementos a una estrategia
de cambio de uso del suelo para proteger la zona como reserva medioambiental.
13. San Mateo, Soacha: Un celador, que cuida terrenos privados de una cantera en que se encuentran varias rocas con pintura rupestre, se enfrenta
ante el líder de un cabildo indígena urbano (Cabildo Pijao Diosa Dulima de Soacha) que pretendía acceder a las piedras con la intención de
realizar un ritual de pagamento. Tras un enfrentamiento verbal en que se exige abandonar el terreno por ser propiedad privada, los jóvenes que
acompañan al indígena argumentan al celador que ellos tienen derecho a estar ahí por que es un sitio de “patrimonio cultural”, tal como se ve
escrito –literalmente- en las piedras (ver foto anexa). El celador, que no entiende bien de lo que le están hablando, se defiende con la amenaza de
traer refuerzos y afirma que niega el acceso por que se ve obligado a cumplir las ordenes de su patrón. (Ver video
en: http://www.youtube.com/watch?v=mfvj928r3OU )
14. Parque Ecológico La Poma: En estos predios se lleva a cabo el programa de reforestación Hojas Verdes de la Cámara de Comercio de Bogotá, el cual consiste en la siembra de árboles a nombre de seres
queridos que han fallecido. En medio de este terreno se encuentran varios abrigos rocosos con pintura precolombina. Hoy día el lugar es frecuentado por los deudos para hacer visita y mantenimiento a
los arbolitos, pero no sólo los riegan y podan sus hojas, sino que también han empezado a decorarlos con diversos elementos alusivos a sus difuntos, en especial a los infantes (muñecos de peluche,
cintas de colores, juguetes), y están pintando de blanco los muros de los abrigos rocosos a manera de lápidas (ver foto anexa). Además del tema medioambiental no se ha manifestado un interés
decidido por parte de quienes manejan el parque por integrar las pinturas y abrigos rupestres a los contenidos pedagógicos y turísticos del parque para de esta manera propiciar su valoración y su
preservación, la cual además se esta viendo en riesgo ante el aumento de grafitis sobre las paredes rocosas.
15. Abrigos rocosos del Tequendama: Un grupo heterogéneo de personas, miembros de una comunidad
urbana autoreconocida como indígena (o en vías de reetnización) visitan los abrigos con la intención
de realizar un rito de apropiación del territorio ancestral. Se pintan sus rostros con los mismos
motivos gráficos de las pinturas rupestres del lugar. (Ver video
en: http://www.youtube.com/watch?v=JxWajrLUKhI&NR= )
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17. Chivonegro, Bojacá: En medio de un paraje sub-xerofítico desolado se encuentran grandes bloques y abrigos rocosos que han sido
signados con pinturas rupestres precolombinas. Hoy día, en los terrenos propiedad del municipio se están llevando a cabo adecuaciones
para transformar el sitio (que llaman Parque temático-arqueológico Piedras de Chivonegro) en un aula ambiental gracias a un
convenio con la CAR. A pesar de representar un sitio de interés cultural y turístico (del que las recientes administraciones municipales
han echado mano como símbolo de identidad), no se contó con el permiso del ICANH para realizar las obras de adecuación del aula
(apertura de sendero y quiosco) como exigencia de los planes de manejo ambiental en terrenos con potencial arqueológico; y sus
pinturas rupestres están completamente abandonadas y siendo presa del graffiti y de la realización de fogatas. Además del
medioambiental no hay un interés decidido por parte de quienes manejan el predio en integrar a un discurso pedagógico las pinturas
rupestres. Se tienen datos recientes de la realización de cultos esotéricos en que se utilizaron restos humanos, además el lugar suele ser
escenario de “paseos de olla” de fin de semana y de la filmación de comerciales y series de televisión.
18. • La Chaguya, Zipacón: Un pequeño grupo de abrigos y pinturas rupestres se ha conservado a pesar de las obras de ingeniería que
representaron la construcción del ferrocarril a comienzos del s. XX y de la carretera (década de 1950). En la actualidad algunos
habitantes de la zona dan razón de tradiciones de sus mayores sobre la posible fórmula de preparación de los pigmentos y quiénes
fueron sus autores. Don Felipe Alarcón de 76 años habitante de toda la vida de la zona declara con orgullo que “estas piedras son
patrimonio nacional”(comunicación personal, 2010).
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20. Los municipios de San Jacinto y San Juan Nepomuceno.
Los petroglifos de San Jacinto son un conjunto de grabados en las rocas pertenecientes a la cultura zenú,
ubicados en Colombia.
• En los municipios de San Jacinto y San Juan Nepomuceno (departamento de Bolívar, Colombia), se encuentran varios sitios arqueológicos pertenecientes a la
cultura zenú, también conocida como sinú.
• El más importante de estos grabados se encuentra sobre el tramo del Arroyo Rastro, mayormente en jurisdicción en el municipio de San Juan Nepomuceno y
muestra la cara de un cacique zenú, con otras caras ubicadas encima de la principal. Para algunos investigadores las otras caras representarían los antepasados
del cacique
23. Dinámicas y agentes
• Entre las dinámicas advertidas y agentes identificados que confluyen, afectan o
influencian estos sitios rupestres se pueden enumerar:
Resignificación y apropiación de los sitios rupestres (y del territorio que significan)
como lugares de identidad y reafirmación de pertenencia a comunidades
específicas. Hay una tendencia reciente de grupos urbanos que se están autoreconociendo
como indígenas (p.e. La Nación Muisca Chibcha de Bacatá o el Cabildo Pijao Diosa
Dulima para los casos de los sitios rupestres de Facatativá, Tequendama y Soacha), y que
pretenden alcanzar el mismo estatus de reconocimiento de otros grupos étnicos, con sus
derechos y privilegios, amparados en la figura constitucional que a partir de 1991 define a
la Nación colombiana como pluricultural y multiétnica; lo cual ha venido siendo
interpretado o parece estar estimulando una suerte de “invención de comunidades”
(parafraseando a Hobsbawn, 1999) como estrategia para acceder, de acuerdo a sus
lineamientos filosóficos, al control “simbólico” de territorios. Aunque estas intenciones
no siempre son del todo “espirituales”, toda vez que, además de prácticas esotéricas y
realización de rituales diversos en los sitios rupestres, también participan en la promoción
de paquetes turísticos para visitar estos lugares con diversos propósitos terapeútico-
espirituales en lo que se está denominando como Etno-turismo (1).
27. • Tal parece que para los primeros investigadores el dibujo no resultaba
escencial para la presentación de sus trabajos, hasta se puede afirmar
que sólo presentaron el material que se adaptada a la comprobación de
sus hipótesis.
28. • Los artistas fueron los karijonas, una
tribu belicosa y caníbal ya extinta.
sucumbieron ante el hombre blanco.