El documento clasifica los problemas en dos enfoques: enfoque negativo, cuando se quiere eliminar o reducir una situación presente o esperada, y enfoque positivo, cuando se desea mejorar una situación actual o prevista. También los clasifica en problemas presentes, relacionados con circunstancias actuales que requieren soluciones a corto plazo, y problemas futuros, que aún no ocurren pero son probables o improbables pero de graves consecuencias. Finalmente, evalúa los problemas presentes por su importancia, gravedad y evolución, y los futuros por