Los sistemas de radiotelefonía pública celular dividen la zona de cobertura en células más pequeñas, asignando frecuencias y dotando cada célula de una estación base. Las células se pueden subdividir aún más sectorizando la cobertura de cada estación base en tres sectores de 120 grados. Los sistemas asignan frecuencias de forma fija a cada célula pero permiten tomar prestadas frecuencias de células vecinas si hay congestión.