La solidaridad se define como la colaboración mutua y el sentimiento de unión entre las personas, especialmente durante experiencias difíciles. La solidaridad implica servir al bien común en lugar del individualismo, intentar resolver las necesidades de los demás con empatía y discernimiento, y brindar ayuda desinteresada sin importar raza, religión u origen. La solidaridad ha permitido que la humanidad alcance altos niveles de civilización y progreso, y ha ayudado a superar desastres a lo largo de la historia.