El documento define el racismo como la exagerada defensa del sentido racial de un grupo étnico que conduce a comportamientos anormales como la violencia y la intolerancia. Explica que las razones fundamentales por las que alguien puede desarrollar actitudes racistas son experiencias negativas previas con personas de otros grupos o haber aprendido esos comportamientos desde la infancia. Finalmente, propone que para combatir el racismo es necesario educar desde pequeños para aceptar a todos y dar buenos ejemplos basados en el respeto mutuo.