1. Sugerencias básicas para
comprender y reconstruir las ideas
de un texto filosófico
Universidad de San Buenaventura
Maestría en Filosofía Contemporánea
Segundo bimestre de 2015
Seminario: L. Wittgenstein • Investigaciones filosóficas
Profesor: Sebastián Pereira Restrepo
2. Identificar las tesis centrales del texto
(I)
1.) Hay que identificar cuáles son los enunciados
o tesis centrales – cuáles son las ideas – del texto
que tratamos de reconstruir y procurar
expresarlos y referirlos con nuestras propias
palabras de la manera más directa y clara
posible.
3. Identificar las tesis centrales del texto
(II)
• Si pensamos el texto filosófico en analogía a una obra
de ficción (como p.ej. una novela, una comedia o un
drama teatrales), puede decirse que las tesis e ideas
son las protagonistas del texto filosófico.
• Las ideas filosóficas se desarrollan en una tensión y en
un diálogo permanentes con otras ideas, bien sea para
asentir a ellas o para criticarlas, para tomar algunos de
sus elementos o para modificarlos, para expandirlas o
profundizarlas, para radicalizarlas o para relativizarlas,
para evaluarlas positiva o negativamente, para
“chocar” o “simpatizar” con ellas, etc.
4. Identificar las tesis centrales del texto
(III)
• Lo anterior quiere decir que, por lo general, en
un texto filosófico vamos a encontrar, por un
lado, las tesis e ideas que quiere defender el
autor en ese texto, y por otro lado, las tesis e
ideas a las cuales está respondiendo o
reaccionando de alguna manera.
• En esa medida, reconstruir un texto filosófico
de acuerdo con 1) implica generalmente:
5. Identificar las tesis centrales del texto
(IV)
(1) Identificar y referir de manera clara y directa las tesis que
son defendidas en el texto.
─ Para ello puede ser útil emplear también “rótulos filosóficos”
(sin abusar de ellos!): “Esta posición [identificada y referida
antes/después de tal y tal manera] podemos llamarla
antiesencialista, representacionalista, nominalista,etc.”
(2) Identificar y referir de manera clara y directa las tesis a las
cuales el texto está respondiendo de alguna manera.
(3) Identificar y referir de manera clara y directa cuál es la
relación (de crítica, de profundización, relativización,
modificación, etc.) que existe entre, por un lado, las tesis
que defiende el texto, y por otro lado, las tesis a las cuales
el texto está respondiendo de alguna manera.
6. Identificar las tesis centrales del texto
(V)
• Para resolver el punto 1) debemos entonces
plantearnos preguntas como las siguientes:
• ¿Qué tesis defiende el autor del texto?
• ¿A qué tesis está respondiendo o reaccionando el
autor del texto con sus propias tesis?
• Esas tesis a las cuales está respondiendo el texto
(con otras tesis), ¿están siendo criticadas,
relativizadas, modificadas, rechazadas, aceptadas
con reservas, etc.?
7. Identificar las distintas facetas de las
ideas (I)
2.) Hay que identificar cuáles son las distintas
facetas y ramificaciones de las ideas del texto
que tratamos de reconstruir y procurar
expresarlas y referirlas con nuestras propias
palabras de la manera más directa y clara
posible.
8. Identificar las distintas facetas de las
ideas (II)
• Las ideas y tesis que nos presenta un texto
filosófico no son algo monolítico y estático.
• Por el contrario, las ideas expuestas presentan
diversas facetas, tienen diversas implicaciones y
ramificaciones, que por lo general son expuestas
en el texto.
• El desarrollo de un texto filosófico (su „trama“,
por recurrir a la analogía inicial) consiste en gran
medida en explorar justamente las distintas
facetas e implicaciones de las ideas/tesis en él
expuestas.
9. Identificar las distintas facetas de las
ideas (III)
• Si las ideas son las protagonistas del texto
filosófico, puede decirse que sus facetas e
implicaciones son acaso comparables a la
caracterización que se hace del protagonista en
una obra de ficción mediante sus distintas
„maneras de actuar“, las líneas que pronuncia y
las diversas situaciones y contextos en que se
desenvuelve.
• Al reconstruir un texto filosófico atendiendo a 2),
debemos entonces procurar tener en cuenta lo
siguiente:
10. Identificar las distintas facetas de las
ideas (IV)
(1) Identificar y referir de manera clara y directa qué
facetas e implicaciones de las tesis defendidas en el
texto son exploradas en el mismo, verificando que se
trate efectivamente de facetas e implicaciones de
esas ideas y mostrando (cuando ello no sea evidente)
por qué, en qué medida, se trata de facetas e
implicaciones de esas ideas.
(2) Identificar y referir de manera clara y directa qué
facetas e implicaciones de las tesis (probablemente
antagónicas en alguna medida) a las cuales responde
el texto son exploradas en el mismo (verificando y
mostrando lo mismo que en (1).
11. Identificar las razones a favor y en
contra (I)
3.) Hay que identificar cuáles son las razones y
argumentos centrales que se ofrecen a favor y
en contra de las tesis e ideas centrales del texto
que tratamos de reconstruir y procurar
expresarlos con nuestras propias palabras de la
manera más clara y directa posible.
12. Identificar las razones a favor y en
contra (II)
• Los textos filosóficos no sólo nos presentan tesis e
ideas así como sus posibles facetas y ramificaciones.
• Tan importante como lo anterior – o incluso más, dado
que la filosofía es ante todo una práctica
argumentativa, un juego de dar y recibir razones – son
las razones y argumentos que nos ofrecen a favor y en
contra de las ideas expuestas en ellos.
• Podríamos decir que las razones a favor y en contra son
análogas a los personajes de reparto, quienes actúan
en este caso a manera de aliados o de enemigos de los
personajes y son fundamentales en el desarrollo de la
trama (aquí la analogía es débil).
13. Identificar las razones a favor y en
contra (III)
• Al procurar identificar y referir las razones y
argumentos a favor y en contra debemos tener
en cuenta que estos pueden darse de formas muy
diversas, p.ej.:
– Brindando ejemplos y contraejemplos.
– Argumentando deductivamente.
– Empleando analogías y experimentos mentales.
– Señalando la presencia de falacias o de
inconsistencias, mostrando que un argumento es
circular, que una idea comete un “error categorial”,
que de ella se desprenden implicaciones insostenibles,
que una tesis es ambigua, contradictoria, etc, etc.
14. Identificar las razones a favor y en
contra (IV)
• Por lo general, el texto filosófico nos presenta
razones a favor y en contra de las tesis que se
defienden en él.
• En esta “competencia de las razones”, el texto
procura inclinar la balanza hacia aquellas
razones que hablan a favor de las ideas que se
defienden en él.
• Reconstruir las razones a favor y en contra
implicaría entonces lo siguiente:
15. Identificar las razones a favor y en
contra (V)
(1) Identificar y referir de manera clara y directa las
razones a favor de las tesis defendidas en el
texto, verificando muy bien que se trate
efectivamente de razones, y que sean razones a
favor de esas tesis.
(2) Identificar y referir de manera clara y directa las
razones en contra de las tesis defendidas en el
texto (verificando lo mismo que en (1).
(3) En la medida que el texto lo permita, evidenciar
que las razones a favor de las tesis defendidas
en el texto “superan” a las razones en contra.
Notas del editor
Preguntar: cuáles tesis? Las de quién?
En muchos casos –como p.ej. en las I.F.–, las tesis centrales no están formuladas de manera clara, explícita y directa.
Las ideas que están expresadas de manera indirecta.
Identificar estas tesis requiere por lo tanto una labor de interpretación.
En esa labor debemos atender a conceptos clave, preguntándonos qué es lo que dice el autor en relación con esos conceptos y buscando responder nosotros mismos a esa pregunta con enunciados claros y directos.
Podríamos decir que las ideas son las protagonistas del texto filosófico.
En relación con el punto (1): A fin de emplear también puede ser útil empla. Aquí es necesario tener mucho ojo y emplear bien los rótulos.
Mencionar que el punto (2) y (3) no son absolutamente necesarios, pero son. La importancia de la posición antagonista. La posición antagónica sirve para perfilar, para darle forma a las propias ideas.
Si un Filósofo dice A, es porque otro filósofo ha dicho ¬A, o A*, B, o C,
Senalar que todo este proceso debe ejecutarse en un texto de corrido (aunque evidentemente también se pueden destacar algunas tesis)
Las ideas „atraen“, por así decirlo, otras ideas; también puede decirse que otras ideas se „desprenden“ de ellas.
Si las ideas son las protagonistas del texto filosófica, las facetas de las ideas que nos presenta el texto filosófico son las situaciones, los contextos, las maneras de actuar en que se despliegan las ideas en tanto que protagonistas.
Las ideas „atraen“, por así decirlo, otras ideas; también puede decirse que otras ideas se „desprenden“ de ellas.
Si las ideas son las protagonistas del texto filosófica, las facetas de las ideas que nos presenta el texto filosófico son las situaciones, los contextos, las maneras de actuar en que se despliegan las ideas en tanto que protagonistas.
Ilustrar esto con la idea de los juegos del lenguaje, prefigurada en §3.
Si las ideas son las “protagonistas” de un texto filosófico, puede entonces decirse que las razones a favor y en contra son la trama del mismo. No: serían más bien los actores de reparto.
No: hay
Falta algo muy importante: El texto filosófico explora las distintas facetas de una idea, las consecuencias que se desprenden de ella, sus ramificaciones.
En contra de las ideas y de las ramificaciones de las ideas.
(Las razones en contra de las tesis que defiende el texto suelen ser razones a favor de las tesis e ideas a las cuales está reaccionando el texto (cuando se trata de una relación de antagonismo)).
(las razones en contra pueden ser razones a favor de la
(Las razones en contra de las tesis que defiende el texto suelen ser razones a favor de las tesis e ideas a las cuales está reaccionando el texto (cuando se trata de una relación de antagonismo)).
(las razones en contra pueden ser razones a favor de la