Ensayo la construccion de la globalización cultural- vi semestre apt...
Tema06
1. 22308 - Programas de animación sociocultural
MÓDULO 1: Contexto histórico y aspectos conceptuales de la Animación
Sociocultural
TEMA 6
Antecedentes y desarrollo
histórico de la Animación
Sociocultural
Aina Calvo Sastre
2.
3. Tema 6: Antecedentes y desarrollo histórico de la Animación Sociocultural
SUMARIO
Presentación .................................................................................................. 2
Objetivos ........................................................................................................ 2
Ver objetivos del módulo................................................................................ 2
Índice de contenidos ...................................................................................... 2
Contenidos ..................................................................................................... 3
1. Los antecedentes de la Animación Sociocultural ................................... 3
2. El contexto de emergencia de la Animación Sociocultural ..................... 6
3. El desarrollo de la Animación Sociocultural en Europa .......................... 8
4. La Animación Sociocultural en España ................................................ 12
Bibliografía ................................................................................................... 17
1
4. Tema 6: Antecedentes y desarrollo histórico de la Animación Sociocultural
Presentación
Este capítulo no aspira a presentar una completa historia de la animación
sociocultural. Éste sería un objetivo desproporcionado para los propósitos de
este trabajo. Por otra parte, asumir este reto nos obligaría a desarrollar, entre
otras cosas, una historia de la cultura, otra de la educación popular y de los
procesos de transmisión cultural que se han dado fuera de los márgenes
académicos, otra del desarrollo comunitario... Dadas las características del
trabajo que presentamos, nos limitaremos, pues, a hacer un repaso de aquellos
hechos, situaciones, sucesos históricos, etc. que pueden ser considerados
como antecedentes de la ASC, y de aquellos factores contextuales que
explican la emergencia de la ASC en Europa a mediados del siglo que
acabamos de dejar atrás. Por último, presentaremos algunos de los datos más
significativos de su desarrollo, tanto en España como en el resto de Europa.
Objetivos
Ver objetivos del módulo
Índice de contenidos
1. Los antecedentes de la Animación Sociocultural ................................... 3
2. El contexto de emergencia de la Animación Sociocultural ..................... 6
3. El desarrollo de la Animación Sociocultural en Europa .......................... 8
4. La Animación Sociocultural en España ................................................ 12
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5. Tema 6: Antecedentes y desarrollo histórico de la Animación Sociocultural
Contenidos
1. Los antecedentes de la Animación Sociocultural
A lo largo de la Historia se han dado diversas iniciativas y experiencias que
pueden ser consideradas antecedentes de lo que hoy conocemos como
animación sociocultural. En las líneas que siguen exponemos aquellas que nos
parecen especialmente significativas. Cabe señalar, que no se trata tanto de un
análisis histórico en profundidad —cosa que, como ya hemos dicho, sería
motivo de un estudio monográfico que desborda claramente las pretensiones
de nuestro trabajo— como de proporcionar algunas pinceladas sobre aquellas
iniciativas, propuestas, actuaciones que han tenido lugar en otras épocas y que
nos ayudan a comprender la evolución y el sentido de la animación
sociocultural en nuestros días.
Creemos conveniente iniciar este apartado remarcando una idea que
algunos teóricos de la ASC han defendido de forma insistente y que acentúa la
‘atemporalidad’ de la ASC. Para estos autores tratamos un “phénomène de
tous les temps” (Gillet, 1995, 34) puesto que, como apunta Delorme (1985, 27):
“Es muy difícil determinar en qué fechas concretas empezó.
Indudablemente siempre existieron fenómenos de animación. A
partir del momento en que unas personas viven en grupos, en
barrios urbanos, en aldeas, en instituciones diversas, se produce la
animación en el sentido de que se organizan y se desarrollan unos
mecanismos de intercambio y de comunicación y en que unos
individuos se convierten especialmente en agentes facilitadores de
las manifestaciones sociales de esta comunicación”.
Así, la animación sociocultural habría existido siempre y su Historia se
confundiría con la de la civilización.
Al margen de esta interpretación, optamos por establecer una serie de
momentos, señalados y estudiados por diversos autores (Labourié, 1978;
López y Salas, 1987; Puig, 1988; Lorenzo, 1993; Úcar, 1992; Hernández, 1987;
etc.), y que marcan hitos importantes en el devenir de la ASC.
Lorenzo (1993), por ejemplo, analizando la evolución de la educación de
adultos, y de lo que hoy entendemos como educación permanente, ha creído
encontrar en el siglo XVIII las primeras iniciativas que podemos considerar de
manera directa como los antecedentes de la animación sociocultural. De este
modo, se centra en el Informe Condorcet (1792) donde encuentra una de las
primeras defensas abiertas de la necesidad de la educación en todas las
edades y uno de los primeros precedentes de lo que en Europa será conocido
bajo la denominación de educación popular. En este mismo sentido, hace
referencia también a las Escuelas Dominicales para jóvenes obreros que nacen
a comienzos de siglo promovidas por los Hermanos de las Escuelas Cristianas.
Ambos constituyen dos claros ejemplos de la apertura del concepto de
educación y una forma de hacer próxima a lo que hoy conocemos como
animación sociocultural.
En nuestro contexto, y a lo largo del siglo XVIII, las Sociedades Económicas
de Amigos del País constituyen otro claro antecedente de la animación (Úcar
1992). Recordemos que nacen con el objetivo de difundir y hacer progresar la
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6. Tema 6: Antecedentes y desarrollo histórico de la Animación Sociocultural
agricultura, la industria, el comercio y las artes, y a través de sus actuaciones
contribuyen, indirectamente, a elevar el nivel cultural del país.
El siglo XIX acoge un importante movimiento obrero que se organiza y da
lugar a los ‘ateneos obreros’, a los ‘círculos’ y a los ‘centros católicos obreros’.
Todas estas organizaciones se caracterizan por otorgar protagonismo a sus
miembros y difundir la cultura a todo el pueblo a través de la educación
popular. Así, a finales de este siglo, nace el concepto de educación popular a
partir de la obra del estado y la iglesia a través de los maestros y los curas.
Aparecen, también, las escuelas para obreros organizadas por los sindicatos y
se desarrollan las bibliotecas municipales al tiempo que se empieza a hablar de
la ‘extensión universitaria’. Es en este contexto donde nacen las primeras
universidades populares1, como organizaciones obreras y campesinas,
pensadas para atender al desarrollo sociocultural de las clases y sectores más
desfavorecidos de la sociedad. Todo ello va abonando el tejido asociativo para,
a mitad del siglo XX, dar lugar a prácticas que sin duda calificaríamos de
animación sociocultural.
En el siglo XIX se dan otros hechos que igualmente podemos considerar
como precursores de la ASC. En este sentido, podemos hablar de la actuación
de la iglesia a través de sus obras de apostolado y de la importante acción
educativa y cultural que se realiza a través del movimiento de Acción Católica
(Hernández Díaz, 1997). No debemos olvidar que durante este siglo se
desarrollan también diversas órdenes y congregaciones que facilitan
estructuras organizativas en las que los seglares empiezan a implicarse de
manera activa.
En otro nivel, a finales del siglo XIX y principios del XX tienen lugar las
primeras experiencias de escuelas nuevas. De alguna forma, buena parte de
los planteamientos de estas experiencias, las escuelas al aire libre y la
pedagogía activa, constituyen el fundamento de algunos de los postulados que
conforman la pedagogía del ocio y la animación sociocultural (Puig y Trilla,
1985).
Se hace necesario aquí hacer mención específica del nacimiento del
movimiento ‘scout’ en el año 1907 como uno de los movimientos infantiles y
juveniles de mayor transcendencia a nivel mundial y que lleva consigo la
propuesta de un método propio de intervención (Soler, 1995b). De hecho es en
este cambio de siglo cuando la noción de juventud nace como grupo de edad
destinatario de una educación extraescolar y, poco a poco, va configurándose
como una etapa sociológica y psicológica con entidad propia (Labourié, 1988).
Centrándonos en el contexto español, entre todos los hechos, iniciativas,
etc., que tienen lugar en la primera mitad del siglo XX y que podemos
considerar como antecedentes de la ASC destacan, especialmente, dos de
ellos:
• La Extensión Universitaria promovida por la Institución Libre de
Enseñanza (ILE) a partir de sus ideas progresistas y reformistas.
Esta insitución inspira la renovación educativa y cultural española
1
La primera universidad popular se crea en Dinamarca en el año 1884 (FEUP, 1986).
4
7. Tema 6: Antecedentes y desarrollo histórico de la Animación Sociocultural
desde el año 1876 hasta 1939, quedando truncada por la tragedia de
la guerra civil.
• Las Misiones Pedagógicas, fundamentadas en los principios de la
ILE como obra del Patronato de las Misiones Pedagógicas
implantado a partir de la II República.
De alguna forma, las Misiones Pedagógicas han sido señaladas como el
antecedente más directo de la animación sociocultural en España (Froufe y
Sánchez, 1990), aunque entre ellas existan importantes diferencias: basta sólo
con señalar que las Misiones son promovidas totalmente por el Ministerio de
Instrucción Pública y Bellas Artes y que surgen ante el estado de depresión y
miseria del mundo rural, mientras que la animación sociocultural no depende
exclusivamente del Estado ni de ningún ministerio en concreto y, tal y como
veremos más adelante, emerge principalmente de entre los movimientos,
asociaciones, organizaciones de carácter no oficial (Monera, 1988).
A través de las Misiones Pedagógicas, nos recuerdan Froufe y Sánchez
(1990), se trabajaba el fomento de la cultura general (a través del
establecimiento de bibliotecas populares fijas o ambulantes, organización de
lecturas y conferencias públicas, sesiones de cine, sesiones musicales, etc.), y
la orientación pedagógica (visitas a escuelas rurales y urbanas, lecciones
prácticas, excursiones, etc.). En definitiva, se pretendía hacer llegar a la gente
de las zonas rurales de España el progreso de la cultura a través de jóvenes
universitarios, estudiantes de las escuelas normales y otras facultades y
personas que creían en la renovación educativa y cultural a partir de una tarea
altruista, inspirada en los principios del liberalismo y la ética laica humanista. La
voluntad era asegurar la continuidad de esta cultura y su desarrollo una vez
acabada la intervención (Soler, 1996).
En la tabla siguiente representamos, de forma resumida, los antecedentes
más significativos de la ASC.
Siglo Antecedentes
- Creación de las Escuelas Dominicanas
- Informe Condorcet (Francia)
XVIII - Sociedades Económicas de Amigos del
País
- etc.
- Movimiento obrero
-Ateneos obreros
-Patronatos
-Círculos obreros
-Bibliotecas populares
-Extensión universitaria
-Universidades populares
- Acción de la iglesia
XIX -Patronatos
-Centros Católicos Obreros
-Acción Católica
-Organizaciones piadosas
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8. Tema 6: Antecedentes y desarrollo histórico de la Animación Sociocultural
- Actividades escolares y extraescolares
-Mutuas escolares
-Cooperativas escolares
-Excursiones escolares
-Colonias y guarderías escolares
-Escuela Nueva y pedagogía al aire
libre
- etc.
- Movimiento obrero
- Acción de la iglesia
- Actividades escolares y extraescolares
XX - Extensión Universitaria (ILE)
- Misiones Pedagógicas
- Movimientos infantiles y juveniles
(movimiento scout, etc.)
- etc.
Fuente: Elaboración propia.
2. El contexto de emergencia de la Animación Sociocultural
La animación sociocultural responde a un conjunto de factores que se
configuran y coinciden en la primera mitad del siglo XX, especialmente en el
período comprendido entre las dos guerras mundiales. Aunque, como se
señalará más adelante, lo que hoy conocemos como animación sociocultural –
o, por lo menos, lo que nosotros entendemos por ASC- no alcanza su máximo
desarrollo hasta la década de los años sesenta. En este apartado detallamos
los factores contextuales que justifican, explican o condicionan la emergencia
de la ASC2. Éstos pueden agruparse en torno a cinco bloques: (a) el desarrollo
tecnológico e industrial; (b) la superpoblación de las grandes ciudades; (c) la
rapidez de los cambios; (d) las nuevas propuestas pedagógicas; (e) el
desarrollo de las sociedades democráticas.
a) El desarrollo tecnológico e industrial
b) La superpoblación de las grandes ciudades
c) La rapidez de los cambios
d) Las nuevas propuestas pedagógicas
e) El desarrollo de las sociedades democráticas
2
Los factores o elementos que presentamos resumen las principales ideas que diversos
autores han expuesto sobre el nacimiento de la animación sociocultural. Concretamente nos
hemos basado en las aportaciones de Labourié (1978), Ander-Egg (1984), Debesse y Mialaret
(1988), Marchioni (1988), Froufe y Sánchez (1990), Puig (1988), Sánchez (1992), Úcar (1992),
Ventosa (1993), De Miguel (1995), Hernández Díaz (1997) y Merino (1997).
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9. Tema 6: Antecedentes y desarrollo histórico de la Animación Sociocultural
Todos estos aspectos configuran los principales trazos del contexto en el
que emerge la animación sociocultural. En la tabla siguiente, resumimos
algunas de las ideas más importantes que se han ido exponiendo a lo largo de
este apartado.
Desarrollo - Nacimiento de la sociedad postindustrial
tecnológico e - Crecimiento acelerado de ciudades sin estructuras
industrial - Incremento de la disponibilidad de tiempo libre
- Existencia de tiempo desocupado, pero poco libre
- Ideología del consumo ilimitado
- Impacto de la industria cultural
- Poder manipulador y homogeneizador de los m.c.m.
- Envejecimiento de la población
- Jubilación anticipada sin preparación para la vida de
no trabajo
- etc.
- Concentración de grandes masas de población en
Superpoblación de
espacios reducidos
las grandes ciudades
- Aislamiento
- Individualismo
- Pérdida de indentidad local y calidad de vida
- Desarraigo
- Falta de infraestructuras y equipamientos adecuados
- Atonía participativa
- Nuevas formas de marginación social
- Cambio en la estructura familiar
- Nuevas necesidades educativas
- Abandono de zonas rurales
- etc.
Rapidez de los - Cambios económicos y culturales muy rápidos
cambios - Saturación de información
- Necesidad de adaptación a los cambios
- Necesidad de formación y reciclaje
- Crisis de valores
- etc.
Nuevas propuestas - Desescolarización y ciudades educativas
pedagógicas - Pedagogía no directiva
- Pedagogía de la liberación
- Otros espacios educativos: educación extraescolar,
educación en el tiempo libre, educación de adultos,
educación compensatoria, etc.
- Democratización de la educación
- etc
Desarrollo de las - Democratización de la cultura
sociedades - Democracia cultural
democráticas - Promoción social
- Diversificación de la sociedad
- Desarrollo y crisis del Estado de Bienestar
- etc.
Fuente: Elaboración propia.
7
10. Tema 6: Antecedentes y desarrollo histórico de la Animación Sociocultural
3. El desarrollo de la Animación Sociocultural en Europa
El contexto que acabamos de describir —que corresponde a mediados del
siglo XX— explica que, a partir de la Segunda Guerra Mundial (1939-1945), se
desarrolle en Europa la ASC. Una vez finalizada esta tragedia, el movimiento
de educación popular se reorganiza y vuelve a tomar fuerza. Instituciones
eclesiásticas, diversos movimientos laicos, partidos políticos, movimientos
infantiles y juveniles... son los protagonistas del proceso de reestructuración
social que se empieza a generar.
En el marco de las grandes asociaciones y federaciones nacionales e
internacionales que se van estructurando, encontramos muchos de los modelos
de intervención social y cultural que siguen vigentes en la actualidad. De
hecho, en el seno de estos movimientos sociales, se potencian metodologías y
técnicas educativas orientadas a la concienciación y participación activa de los
miembros de la comunidad que, posteriomente, se han considerado
características de la ASC.
A la hora de establecer cuándo y dónde nace el término ‘animación
sociocultural’ existen diferentes criterios. Hay quien afirma que la palabra se
emplea por primera vez en la reunión organizada en Mondesse (Austria) por la
Unesco en el año 1950 (De Miguel, 1995; Úcar, 1992). Otros consideran que el
concepto tiene un origen canadiense a partir del trabajo realizado en el marco
del desarrollo comunitario de determinadas regiones de Estados Unidos
(Simpson, 1989).
Parece ser, no obstante, que el término ‘animateur’ aparece por primera vez
en un Decreto de la Dirección de Educación Popular del Ministerio Francés de
Educación Nacional del 17 de octubre de 1955 (Mignon, 1999). Es en esta
misma época cuando distintos organismos especializados de la ONU empiezan
a promover programas de desarrollo comunitario que integran diferentes
proyectos en función del organismo promotor (entre ellos se encuentran la
Unesco con programas de educación de adultos; la OIT con programas de
promoción de cooperativas y pequeñas industrias rurales; la FAO con
programas de extensión agrícola, de economía doméstica, etc.). Todos ellos,
de alguna forma, constituyen el embrión de lo que más adelante se entenderá
como ASC, cuando el término se utilice con mayor claridad a partir de finales
de los años sesenta.
Un breve recorrido por la realidad sociocultural de la época en algunos
países europeos nos ofrece otros indicios del nacimiento, de la
institucionalización, de la ASC. En el caso de Suiza, por ejemplo, en el año
1962 se crea la primera Escuela de Animadores de Juventud y, dos años más
tarde, aparece también en Francia de la mano de la Unión Francesa de
Centros de Vacaciones (De Miguel, 1995). A partir de aquí, el término empieza
a popularizarse y generalizarse y la figura del animador se va perfilando con la
asignación de tareas en centros de vacaciones, casas de juventud y de cultura,
centros cívicos, etc. La situación en el Reino Unido e Irlanda del Norte, sin
embargo, es distinta. Aquí, como veremos con mayor detenimiento en el
apartado correspondiente a la dimensión social de la ASC, el concepto del que
se parte es el community development y el término ASC será prácticamente
desconocido en el contexto anglosajón (Simpson, 1989).
8
11. Tema 6: Antecedentes y desarrollo histórico de la Animación Sociocultural
De esta forma, a partir de los años sesenta y setenta, y guiados por la idea
de la sociedad del bienestar, los estados europeos crean y potencian servicios
socioculturales haciendo que la ASC se convierta en un tema de interés a nivel
Europeo. En este sentido, el Consejo de Europa3 crea en el año 1962 el
Consejo de Cooperación Cultural (CCC) como un organismo encargado de
llevar a cabo estudios e investigaciones, con la finalidad de renovar la
educación y la cultura de los países europeos. En este contexto, durante los
años 1970-1976, se lleva a cabo el “Proyecto Animación” bajo la dirección de J.
A. Simpson. El objetivo del proyecto era “examinar las posibilidades de orientar
las políticas culturales para estimular la democracia cultural por medio de
programas de animación” (Ministerio de Cultura, 1980, 14).
A partir de este proyecto europeo de investigación y de los cuatro
simposiums que tuvieron lugar en el marco de su desarrollo (Rotterdam, 1970;
San Remo, 1972; Bruselas, 1974; y Reading, 1976) se configura de una forma
más clara el concepto de animación sociocultural (Ventosa, 1993).
En el primero de ellos, que supone el incio del proyecto citado, se define la
democracia cultural como la cultura de la participación y una condición de
bienestar. Se habla también de la ASC desde dos perspectivas: desde una
concepción revolucionaria y con carácter finalista; y desde una concepción
instrumental entendiéndola como un conjunto de técnicas participativas y
expresivas.
En el segundo encuentro, celebrado en San Remo dos años más tarde, se
presenta la definición de animación sociocultural del CCC del Consejo de
Europa con la intención de unificar las dos concepciones predominantes:
“la animación busca aportar sobre el plano mental, físico y
afectivo a los habitantes de un sector dado, un estímulo que les
permita abrirse a un abanico de experiencias y, por tanto, realizarse,
expresarse más plenamente, de forma que tomen conciencia de su
pertenencia a una comunidad sobre la cual puedan ejercer cierta
influencia a la que deben aportar una contribución” (Simpson, 1972,
8) 4.
El tercer simposium, realizado en 1974 en Bruselas, se centra en la
deontología, estatus y formación de los animadores. Se distingue aquí entre la
animación como tarea específica y como estilo o forma de hacer en cualquier
otra tarea. Es por ello por lo que se afirma que lo que define a la ASC no son
tanto los contenidos o las actividades sino más bien la forma en que éstas se
llevan a cabo.
En el año 1976 se dan a conocer las conclusiones del “Proyecto Animación”
del CCC del Consejo de Europa. Éstas hacen referencia a (Ventosa, 1993):
• La ampliación del alcance de la ASC a toda la población
3
Una evolución de las actuaciones del Consejo de Europa en materia de cultura así como las
iniciativas que se están desarrollando en la actualidad pueden consultarse en su página web:
http://cultura.coe.fr (octubre, 1999).
4
Simpson, J. A. (1972). Bilan et héritage, 8. (Citado por Ventosa, 1993, 55).
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12. Tema 6: Antecedentes y desarrollo histórico de la Animación Sociocultural
• Una concepción de la animación y la difusión como estrategias
culturales complementarias
• No entender la privación socioeconómica como la única causa de la
pasividad cultural
• Los medios materiales no son suficientes para una transformación
sociocultural
• Es importante avanzar desde la preponderancia del grupo hacia la
valoración del individuo
• La necesidad de pasar del idealismo abstracto y ambicioso al
modesto pragmatismo
• La animación no sólo puede hacerse desde el marco de las políticas
culturales, también puede realizarse desde otros ministerios.
Este mismo año tiene lugar en Oslo la Primera Conferencia de Ministros
Europeos responsables de Cultura (De Miguel, 1995). En ella, los gobernantes
asumen los resultados del proyecto de ASC liderado por Simpson, dictaminan
el alcance de la cultura como factor de desarrollo (Hernández, 1989a) y ello
supone el paso en Europa del concepto de democratización cultural al de
democracia cultural5.
Los problemas derivados de la recesión económica llevan a que los
planteamientos optimistas de la sociedad del ocio se vean suplantados por los
planteamientos restrictivos de la sociedad del paro (Soler, 1996). En este
sentido, el CCC ve reducidos sus presupuestos y se ve obligado a reagrupar
sus proyectos de actuación. Como consecuencia de todo ello, el Consejo de
Europa deja de interesarse de manera específica por la ASC y confía su
desarrollo a un proyecto general de promoción de la cultura urbana en el que
predomina la preocupación por los grandes centros culturales y las artes
tradicionales. Es entonces cuando nace el proyecto “21 Ciudades” que se
desarrolla entre los años 1979-1982 bajo la dirección de Brian Goodey y que
dará lugar a la Declaración de Bremen en el año 1983.
El proyecto “21 Ciudades”aporta una nueva concepción de la cultura como
una inversión que, como tal, requiere una evaluación y control rigurosos. A
partir de este proyecto y de las distintas conferencias de ministros que tienen
lugar durante estos años (Atenas, 1978; Luxemburgo, 1981; Berlín, 1983) se
observa cómo en Europa la ASC, por un lado, va pasando de una
consideración estatal a un ámbito más concreto y cercano, a nivel municipal.
Por otro, se aleja de la concepción del tiempo libre y de la cultura como un bien
de lujo, y se integra en el marco de las políticas de desarrollo cultural (Ventosa,
1993).
La tarea del CCC ha fomentado la investigación en el tema de políticas
culturales, ha ayudado al intercambio de experiencias, ha contribuido en la
creación de una red de documentación cultural... Los aspectos señalados
ponen de manifiesto el impulso que han supuesto las actuaciones del CCC del
Consejo de Europa para la ASC durante la década de los ochenta (Ventosa,
5
Ambos conceptos son analizados con mayor detalle en el tercer capítulo del trabajo que
presentamos. Concretamente en el apartado dedicado a la dimensión cultural de la ASC.
10
13. Tema 6: Antecedentes y desarrollo histórico de la Animación Sociocultural
1992b). Una década en la que se vislumbran dos tendencias diferenciadas de
ASC (Viché, 1989):
• Una tendencia centrada en la ocupación del tiempo libre y el
desarrollo de actividades de creación y promoción cultural (se
incluyen aquí países como Francia, Italia, España o Alemania).
• Una tendencia centrada en el desarrollo comunitario a través de la
facilitación de estructuras de participación social y servicios a la
comunidad (representada por países nórdicos y anglosajones).
A modo de síntesis, señala Hernández (1989a, 28), “(…) en la base de la
comprensión de la Animación Sociocultural a partir de sus orígenes, se sitúan
tres momentos y tres perspectivas”:
a. La dinámica de la reconstrucción francesa tras la segunda guerra
mundial, entendiendo dicho proceso de intervención como un instrumento
de promoción del dinamismo sociológico.
b. El proceso de normalización sociológica del núcleo vertebrador de la
Europa occidental. Un proceso que conlleva la comprensión de la
intervención sociocultural como herramienta para la gestión de la cultura
entendida como servicio público.
c. La generalización del derecho a la cultura como uno de los derechos
humanos fundamentales y, en consecuencia, la aceptación de la
intervención sociocultural como motor de evolución social.
En términos generales, el desarrollo de la ASC en Europa ha contribuido en
la creación de un clima de opinión responsable a favor de las artes
comunitarias y ha permitido establecer un clima de tolerancia, por parte del
público, hacia las diferentes manifestaciones del arte y la cultura. Desde su
vertiente más social, la ASC ha posibilitado la experimentación de estrategias,
técnicas, modelos, etc. para la implicación activa de la población en los
procesos de desarrollo comunitario. Todas estas contribuciones han supuesto
un avance muy importante en el ámbito sociocultural, pero no acaban aquí. La
ASC, desde su potencialidad educativa, tiene todavía un papel muy importante
en el marco de la intervención sociocultural. De ello nos ocuparemos más
adelante, en un capítulo posterior, al hacer referencia a la práctica de la ASC.
11
14. Tema 6: Antecedentes y desarrollo histórico de la Animación Sociocultural
4. La Animación Sociocultural en España
Una vez enmarcados los rasgos más notorios de la evolución de la ASC en
Europa, nos disponemos ahora a hacer un rápido repaso de los hechos,
instancias y situaciones que marcan el nacimiento y desarrollo de la ASC en
España hasta nuestros días6.
En España el término ‘animación sociocultural’ no empieza a ser utilizado
hasta finales de los años sesenta, principios de los setenta, cuando se recoge
gran parte del trabajo desarrollado en Francia (De Miguel, 1995).
Durante los años del franquismo, como apunta Ventosa (1993), España se
queda al margen de todo el movimiento promovido por el CCC del Consejo de
Europa —al que nos hemos referido en el apartado anterior—. La falta de
libertades públicas como la libertad de expresión, de asociación, de
manifestación… y todo el control ideológico predominante, imposibilitan que
pueda hablarse abiertamente de animación sociocultural. A pesar de ello, se
producen algunas iniciativas que determinan, claramente, el surgimiento de la
ASC en nuestro contexto. Nos estamos refiriendo, por ejemplo, a los
programas de extensión universitaria —ya mencionados al hablar de los
antecedentes de la ASC—; la tarea de recuperación de tradiciones y folklore
desarrollada por la Sección Femenina; o el desarrollo del movimiento infantil y
juvenil durante los años del franquismo a través del Frente de Juventudes,
surgido en el año 1940 con el objetivo de adoctrinar políticamente a los jóvenes
a través de actividades recreativas y culturales diversas (Hernández Díaz,
1997). En este contexto, y con el margen de libertad de actuación con el que
cuenta la iglesia católica (Soler, 1996), aparecen organizaciones con una clara
finalidad de intervención sociocultural tales como Cáritas, el Movimiento Júnior,
el movimiento scout, etc. (Froufe y Sánchez, 1990).
En cualquier caso, es a partir de los años sesenta, tras la liberación
económica que inicia el régimen de Franco con la apertura al mundo por medio
del turismo, los emigrantes y las relaciones oficiales con otros gobiernos, que
empiezan a llegar a España nuevas corrientes de pensamiento y práctica en el
ámbito social y cultural, entre las que se encuentra la animación sociocultural
(Hernández Díaz, 1997). Si bien, ésta no alcanzará su pleno reconocimiento
hasta unos años más tarde, dentro ya de la fase de transición a la democracia.
Hernández (1987, 30) refleja esta situación de la siguiente forma:
“El triunfo de la alternativa democrática desencadenó en España
un proceso intenso de dinamismo colectivo y de creatividad social.
Todo estaba por hacer: diseñar y establecer un modelo nuevo de
Estado, perfilar y estructurar las formas de una nueva
Administración, vertebrar y dar carne a la nervatura institucional y
asociativa del entramado social, implantar en él nuevas actitudes,
nuevos comportamientos, hábitos nuevos… Y todo esto había de
6
Análisis más pormenorizados de la evolución histórica de la ASC en España pueden
encontrarse en Hernández (1987), De Castro y García (1989), Froufe y Sánchez (1990), Úcar
(1992) o Hernández Díaz (1997).
12
15. Tema 6: Antecedentes y desarrollo histórico de la Animación Sociocultural
surgir del embrión de sociedad nueva que germinaba, oficialmente
clandestina, bajo la losa de la dictadura (…)”.
Úcar (1992) y De Miguel (1995), en sus revisiones históricas sobre el
desarrollo de la ASC en España, destacan una serie de acontecimientos
correspondientes a las décadas de los años sesenta, setenta y ochenta.
Empezando por los años sesenta, merecen una mención especial todos los
programas de entramado comunitario que tratan de provocar la socialización de
los jóvenes. Se trata de un momento muy productivo, especialmente en
Cataluña, donde los movimientos de educación en el tiempo libre se
desarrollan con fuerza y bajo la influencia del trabajo que se venía realizando
en Francia. De hecho, como afirma Soler (1996), muchas de las personas
responsables de la administración en la actualidad provienen de estos
movimientos de educación del tiempo libre.
Por otra parte, surgen los primeros movimientos vecinales que, en un primer
momento, se constituyen como Asociaciones Familiares y, más tarde, se
convierten en las Asociaciones de Vecinos que conocemos actualmente. Se
trata de uno de los ejemplos más claros de los movimientos sociales que
empiezan a generar una conciencia social crítica frente a la dictadura.
Junto a todo ello, la introducción en España de las ideas pedagógicas de
Freire, y el movimiento de renovación pedagógica Rosa Sensat en las escuelas
catalanas, consituyen unos referentes pedagógicos fundamentales para el
desarrollo posterior de la ASC.
Por lo que respecta a la década de los años setenta, con la Ley General de
Educación y Financiamiento de la Reforma Educativa, por primera vez en
España se contempla la educación desde una perspectiva permanente y no
limitada exclusivamente a la infancia y la juventud. Empieza a hablarse de
promoción y extensión cultural y se crea el Programa de Educación
Permanente de Adultos7.
El movimiento vecinal se consolida transformándose en el primer paso para
una nueva estructuración del movimiento ciudadano a través de una auténtica
experiencia de participación social. El ambiente de efervescencia social se
respira, a su vez, a través de la aparición de nuevos medios de comunicación
más abiertos, plurales y próximos a los ciudadanos: revistas como Viejo Topo,
Ajoblanco, Oriflama...; editoriales como Edicions 62; radios libres, etc.
En el año 1974 aparece el Decreto sobre la organización e inspección de
campamentos, albergues, colonias y marchas juveniles y el 25 de noviembre
de 1976 se acaba reconociendo el trabajo y las demandas de los movimientos
de educación en el tiempo libre existentes, a través de la determinación de las
condiciones de idoneidad para dirigir actividades de tiempo libre y la
autorización de la constitución de las escuelas de formación (primero como
Escuelas de Aire libre y, más tarde, con el traspaso de competencias a las
comunidades autónomas, se hablará oficialmente de ellas como Escuelas de
Educadores en el Tiempo Libre).
7
Orden del 26 de julio de 1973 (BOE del 1 de agosto de 1973).
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16. Tema 6: Antecedentes y desarrollo histórico de la Animación Sociocultural
La promulgación de la Constitución Española en 1978 conlleva la
recuperación de muchas libertades y la garantía de igualdad de todos los
ciudadanos ante la educación, la cultura y los diferentes bienes y servicios.
Esta nueva estapa viene marcada igualmente por la incorporación de España
en la Comunidad Europea en el año 1977 y por la participación, aunque con
cierto retraso, en algunos de los proyectos culturales que se venían realizando.
La toma de conciencia de la necesidad de participación ciudadana en la
formación de la cultura desemboca en la creación, dentro del Ministerio de
Cultura, de dos Direcciones Generales: la Dirección General de Difusión
Cultural y la Dirección General de Desarrollo Comunitario. Dentro de la primera,
dedicada a la vertebración de las corrientes culturales que surgen de manera
espontánea en la sociedad, se crea la Subdirección General de Animación
Cultural8.
Durante estos años, destaca la labor desarrollada por la Editorial Marsiega
que recoge las distintas experiencias de educación popular y el pensamiento
de P. Freire. La experiencia latinoamericana está también muy presente en
estos primeros pasos de la ASC en España. De hecho, dentro de la
estructuración del discurso de la ASC en el contexto español, se observan dos
corrientes diferenciadas que responden a dos realidades socioculturales
distintas: la experiencia europea, que puede representarse en la persona de P.
Besnard; y la experiencia latinoamericana9, llegada, sobre todo, de la mano de
E. Ander-Egg. Cabe reseñar que, con la entrada de España en la Comunidad
Europea, la reflexión en torno a la ASC se va identificando cada vez más con la
corriente europea.
La década siguiente, la de los años ochenta, es considerada por muchos
como los años “de la madurez de la animación sociocultural” en España (Úcar,
1992, 21). Con la llegada de la democracia y la aparición de los ayuntamientos
democráticos se inicia un proceso importante de estructuración y consolidación
de la ASC que, paradójicamente, va acompañado de un proceso de
desarticulación del movimiento asociativo. La administración acoge a muchos
de los responsables destacados de los movimientos sociales, y pasará a
asumir algunas de las iniciativas que hasta entonces estaban en manos del
movimiento ciudadano. Se crean así fundaciones, centros cívicos, concejalías
de cultura y juventud, universidades populares, escuelas campesinas, etc. Y
aparecen las primeras Escuelas de Animación de carácter municipal y
autonómico, dedicadas a la formación de animadores.
Otra prueba del creciente interés hacia la ASC durante estos años está en la
enorme cantidad de congresos, jornadas, seminarios y encuentros que se van
realizando en todo el territorio español sobre la temática10.
8
Una visión detallada del proceso de reestructuración del Ministerio de Cultura durante esta
época puede consultarse en Lledó (1988).
9
Ander-Egg (1984b) aporta una visión de conjunto sobre el desarrollo de la animación
sociocultural en latinoamérica a partir de los programas de desarrollo de la comunidad y de los
programas de educación popular.
10
Úcar (1992) enumera hasta dieciocho ejemplos entre los que se encuentran el “I Congreso
de Animación Sociocultural y Municipio” celebrado en Madrid en el año 1982; “Interacció 84.
Escola d’Estiu de l’animació sòciocultural” organizada en Barcelona en 1984; las “Jornadas de
Animación Juvenil” en Vitoria-Gasteiz en 1985; el “Simposium sobre Procesos socioculturales y
participación” celebrado en Palma de Mallorca en 1989, etc.
14
17. Tema 6: Antecedentes y desarrollo histórico de la Animación Sociocultural
Dentro ya de los noventa y como consecuencia directa de las necesidades
sociales detectadas y de las prácticas realizadas en el ámbito sociocultural, por
una parte, la animación sociocultural se incorpora como especialización en la
Diplomatura en Educación Social (Real Decreto 1.420/1991, de 30 de agosto) y
en el año 1995 se celebra en Murcia el I Congreso del Educador Social. Por
otra, con la promulgación de la Ley de Ordenación General del Sistema
Educativo (1990) aparece dentro de la formación profesional de grado superior,
la figura del TASOC (Técnico en Actividades Socioculturales). Hasta este
momento, la formación en el campo sociocultural había estado en manos de
centros no reglados y del sector del voluntariado. Ambas iniciativas
(universitaria y de formación profesional) suponen el reconocimiento, por parte
del sistema educativo reglado, de esta metodología de intervención11 y pueden
ser interpretadas como un indicio determinante del proceso de consolidación de
esta forma de intervención en el ámbito sociocultural.
En la tabla 4 se resumen los hechos más significativos de la evolución de la
animación sociocultural en España correspondientes a las últimas cuatro
décadas.
-Programas de Extensión Universitaria.
-Sección Femenina.
-Aparición de movimientos y
organizaciones sociales: Cáritas,
Movimiento Junior, Movimiento Scout, etc.
Década de los sesenta -Especial desarrollo del movimiento de
educación en el tiempo libre infantil y
juvenil.
-Creación de las primeras Asociaciones
Familiares.
-etc.
-Ley General de Educación y
Financiamiento de la Reforma Educativa.
-Desarrollo del movimiento vecinal a
través de las Asociaciones de Vecinos.
-Creación de las Escuelas de Aire Libre.
Década de los setenta
-Creación del Ministerio de Cultura y de la
Dirección General de Difusión Cultural
(con la Subdirección General de
Animación Cultural) y la Dirección General
de Desarrollo Comunitario.
-Aprobación de la Constitución Española.
-Constitución de los primeros
Ayuntamientos democráticos.
-etc.
-Incorporación de las actuaciones de ASC
11
A lo largo de los capítulos siguientes, iremos haciendo referencia a algunas de las
consecuencias de este reconocimiento formal y académico de la animación sociocultural.
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18. Tema 6: Antecedentes y desarrollo histórico de la Animación Sociocultural
en las administraciones locales:
concejalías de cultura y juventud; creación
de centros cívicos y centros culturales, etc.
-Transferencia de competencias en
materia de juventud, ocio y formación y
creación de las Escuelas de Educadores
Década de los ochenta
en el Tiempo Libre.
-Realización de múltiples jornadas,
encuentros, seminarios, congresos, etc.
sobre ASC.
-Creación de las Escuelas de Animación.
-Configuración del perfil del animador y
contratación de los primeros animadores
socioculturales.
-Aparición del TASOC.
-Incorporación de la ASC como
Década de los noventa especialización de la Diplomatura en
Educación Social.
-I Congreso del Educador Social.
Fuente: Elaboración propia.
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19. Tema 6: Antecedentes y desarrollo histórico de la Animación Sociocultural
Bibliografía
Ver bibliografía general del programa
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