El durazno es originario de China y fue introducido en Europa a través de la Ruta de la Seda. Es una fruta jugosa con muchos beneficios para la salud como vitaminas A, B, C y E, así como minerales como potasio y hierro. El durazno ayuda a mejorar la vista, reducir la presión arterial y previene enfermedades del corazón y cáncer.