Este documento describe la fuerza de la amistad a pesar de la distancia física. Aunque la persona nunca ha sentido la piel, visto las manos o la locura del amigo, encuentra paz y risa en sus palabras, y visión de esperanza en su mirada. Afirma que aunque nunca se han reunido o visto, comparten sentimientos y se reconocen el uno al otro. Concluye que la amistad puede superar cualquier reto o distancia porque comparten un tesoro inmaterial.