El documento habla sobre la fe como conversión. Explica que la fe implica creer, aceptar, entregarse y vivir como testimonio de Jesús. También dice que la catequesis debe enseñar no solo a creer en Jesús sino a reproducir su vida de amor, perdón y trabajo por el Reino de Dios. Concluye que la fe es un don de Dios que transforma a las personas poco a poco y que la Palabra de Dios puede llevar a la conversión como lo hizo con el ciego de Siloé.