1. USO RACIONAL Y EFICIENTE DE LA ENERGÍA ELÉCTRICA Elaborado Por: Ing. Roger Silva Puerto Ordaz, Junio 2009
2. INTRODUCCIÓN El crecimiento de la economía durante los últimos años se ha traducido en un extraordinario aumento del consumo de energía, que de mantenerse en la misma proporción provocaría requerimientos energéticos que deberían acarrear una respuesta desde el lado de la oferta, que si no tiene en consideración la protección del medio ambiente y de los recursos naturales nacionales, podría comprometer el crecimiento futuro del país. Por lo tanto, el uso eficiente de la energía constituye una de las más importantes opciones tecnológicas para enfrentar los problemas señalados, lo cual no es una teoría nueva, ya que a principios de los setenta la gran mayoría de los países industrializados adoptaron agresivas políticas de racionalización de la energía, para enfrentar los severos aumentos en los precios del crudo y los elevados grados de incertidumbre que se instalaban en los mercados de energía.
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4. La eficiencia energética sólo tiene sentido en la medida que permite reducir los costos globales de producción. Sin embargo, con algunas teorías se afirma que el uso eficiente de la energía eléctrica no es una opción válida para los países en desarrollo como Venezuela, los que antes de pensar en economías de energía, deberían aumentar su consumo para mecanizar su actividad productiva y mejorar las condiciones de vida de la población. Esta argumentación contiene una falacia, ya que el uso eficiente de la energía no consiste en racionar o reducir los servicios que ésta presta sino en utilizarla mejor.
5. Incluso existen evidencias de que los aumentos de productividad y la reducción de los consumos energéticos por unidad de producto constituyen facetas de un mismo proceso. En consecuencia, el problema no es la cantidad de energía empleada sino la forma más económica de asegurar la calidad térmica y ambiental de los hogares, iluminar adecuadamente las áreas productivas, de esparcimiento y domésticas, transportar personas y mercancías, proporcionar fuerza motriz a equipos, máquinas, herramientas y al sector industrial en general de forma segura y confiable.
6. El crecimiento de la demanda del suministro de electricidad debe ir asociado al uso eficiente de la misma, que a su vez se sustenta en la modernización del sector e instalación de nuevos equipos. Debemos hacer uso eficiente de la energía para mantener una mejor calidad de vida y permitir a los organismos competentes el tiempo necesario para invertir en este sector, lo que se traduce a largo plazo en la continuidad y confiabilidad del servicio eléctrico.
7. En términos generales puede afirmarse que en la mayoría de las instalaciones eléctricas se derrocha del orden de un 10% o más de la electricidad que se adquiere de las empresas eléctricas, debido a una selección y operación inadecuada de los equipos y sistemas de distribución de la electricidad Las principales pérdidas eléctricas provienen del uso de motores, transformadores y líneas de distribución. En el sector industrial, alrededor de un 70% del total de consumo eléctrico es realizado por los motores eléctricos, equipo que constituye uno de los objetivos principales de cualquier programa de eficiencia energética, no sólo en el caso de los proyectos nuevos sino que además en situaciones de reemplazo de equipos existentes.
19. En términos generales, esta demostrado que con el uso eficiente de la energía eléctrica se puede reducir el consumo eléctrico hasta en un 20%. En el hogar, oficina y ambientes en general se recomienda proteger ventanas con persianas o papel ahumado para disminuir la entrada de calor y tener un ambiente más agradable. Adicionalmente, al pintar las paredes con colores claros y pasteles se puede mantener un ambiente fresco y así se reduce el consumo de aire acondicionado e iluminación. El buen estado de las instalaciones eléctricas es también de vital importancia, puesto que la presencia de fugas eléctricas incrementan el consumo, además que pueden representar riesgos para las personas y las viviendas.
20. CONCLUSIÓN El uso eficiente de la energía no consiste en racionar o reducir los servicios que ésta presta, sino en utilizarla mejor. El problema no es la cantidad de energía empleada en un proceso, sino la forma más económica de asegurar la calidad térmica y ambiental de los hogares, iluminar adecuadamente las áreas productivas, de esparcimiento y domésticas, transportar personas y mercancías, proporcionar fuerza motriz a equipos, máquinas, herramientas y al sector industrial en general de forma segura y confiable. Es preciso recordar que el problema energético en el mundo no es una tarea que tiene que ser resuelta sólo por los Gobiernos o Empresas Eléctricas, ni por los grandes investigadores o empresarios e inversionistas, es un problema que nos involucra a todos y su solución beneficiara a esta y a próximas generaciones
21. Es necesario que la sociedad en general este informada sobre el uso eficiente de la energía eléctrica y entienda que todos somos un instrumento para lograr el desarrollo de este sector; sólo debemos contribuir utilizando conscientemente todos los recursos y beneficios que nos produce la energía eléctrica.