Este documento describe las actividades básicas, instrumentales y avanzadas de la vida diaria que se evalúan para determinar el nivel de dependencia de una persona. Incluye actividades como alimentarse, aseo personal, uso del baño, vestido, movilidad, uso del teléfono, transporte, compras, tareas domésticas, dinero, medicación y ocio. La evaluación de cada actividad proporciona información sobre la capacidad de la persona para realizar actividades habituales e independencia.

1. “Atención sociosanitaria a personas en situación de dependencia”
Mónica Minguela Castro (Trabajadora Social)

2. Actividades Básicas de la Vida Diaria
(ABVD)
Actividades Instrumentales de la Vida
Diaria (AIVD)
Actividades Avanzadas de la Vida Diaria
(AAVD)
La valoración funcional se centra en evaluar la capacidad de la
persona para realizar las siguientes actividades de la vida diaria.

3. Implica reconocer los cubiertos
y la capacidad de llevarlos del
plato a la boca.
Alimentarse
Implica la transferencia al lugar de la
ducha, manejo de envases necesarios,
graduar la temperatura, enjabonarse,
aclararse y secarse.
Aseo e higiene personal
Implica la transferencia, posición en el
inodoro, manejo de la ropa y limpieza de
la zona, el control completo del vaciado
voluntario de la vejiga urinaria y del
intestino.
Uso del inodoro y
control de esfínteres
Implica la correcta elección de las
prendas en función del clima y la
situación, así como la acción de
vestirse y desvestirse.
Implica moverse de una posición a
otra, realización de transferencias y
deambulación.
Movilidad funcionalVestido

4. Implica tener iniciativa para su
uso, reconocer números de
teléfono y marcarlos.
Usar el teléfono
Supone identificar los distintos transportes,
destinosy hacerusodeellos.
Transporte público
Comidas y compras Cuidado de la casa
y lavado de ropa.
Dinero
Medicación
Supone tomar la medicación a la
hora y dosis correcta.
Implica realizar las compras
necesarias y también organizarse,
prepararse y servirse las comidas.
Implica realizar las tareas
domésticas por si mismo.
Supone total independencia en
los asuntos económicos.

5. Implica la participación en actividades de ocio y tiempo libre, religiosas, laborales o aquellas de valor
para la persona. También suponen la utilización de productos de apoyo que faciliten la movilidad.

6. El resultado de la evaluación de cada una de las
actividades de la vida diaria ofrecerá información
referente a la capacidad que tiene la persona usuaria
para realizar su actividad habitual y mantener su
independencia en el medio en que se encuentra.
“Atención sociosanitaria a personas en situación de dependencia”
Mónica Minguela Castro (Trabajadora Social)