Venezuela condena el golpe de Estado en Brasil contra la Presidenta Dilma Rousseff. Venezuela considera que el proceso para destituir a Rousseff violó la constitución brasileña y sustituyó la voluntad de los 54 millones de brasileños que la eligieron. Venezuela retirará a su embajador de Brasil y congelará las relaciones políticas y diplomáticas con el nuevo gobierno surgido del golpe, el cual forma parte de una embestida oligárquica e imperial contra los procesos progresistas y de izquierda en la región.