1. Caricatura sin Monitos
Francisco A. Servin de Alba
23 junio 2012
Y ahora qué hacemos?
Menudo entuerto es donde se ha metido el responsable de la operación, por medio del cual
se detuvo al presunto hijo del Chapo Guzmán. Pues resulta que el supuesto Jesús Alfredo
Guzmán Salazar, se llama Félix Beltrán León. Dicho por su Madre, Elodia León. Confirmado
por la señorita Verónica González, quien dijo ser abogada de la familia Guzmán Loera y
demostrado por su mujer la señora Karla Pacheco, a través de varios documentos oficiales.
Asi se asienta en los diarios que han cubierto la información. Es más, ya la DEA (Drug
Enforcement Administration), también declaró que, la persona detenida, no es el hijo del
Chapo.
Somos un país que ha vivido con la mentira de vecina. Entonces, tenemos un catalogo
disponible para resolver estos casos.
Sugiero que se busque los servicios de personas expertas en estos menesteres. Alguien como
la Paca, aquella famosa vidente que descubrió el cadáver de un diputado, Manuel Muñoz
Rocha, al que después se le vio de compras en Texas. O tal vez algún encumbrado miembro
de la clase política que en vez de un manto negro, requisito de todo buen mago, solamente
necesite la brisa marina para llevar a cabo la traslación.
No sería mala idea que también se le pidiese a la empresa televisora que transmitió “en vivo”
la detención de aquellos secuestradores, entre los que estaba una fémina francesa, que hiciera
una edición parecida.
Y pensándolo mejor, si se recurre a los servicios del que produjo el episodio del secuestro del
avión de Aeroméxico, por un fanático religioso. Probablemente conseguiría con esa indudable
imaginación, ensamblar a este muchacho Félix Beltrán en el árbol genealógico del Chapo.
Pero, si me apura, a lo mejor el candidato mas adecuado para resolver el enigma sería, el que
escribió el guión de los doscientos millones de dólares en efectivo que se encontraron en casa
del empresario chino Zhenli Ye Gon, quien acusó al aspirante a Senador Javier Lozano Alarcón
de haberle dicho “coopela o cuellos”, para que le guardara “la morralla” que emplearían en la
campaña de Felipe Calderón.
Y que opina usted si llamaramos a quien nos vio la cara en aquella desgracia de la pequeña
Paulette, en el Estado de México, que dizque estuvo nueve días en medio de un colchón. Ni
los peritos se dieron cuenta. Menos la madre y la reportera de televisión que se sentaron ahí,
justamente encima, para grabar una entrevista después de varios días del inicio de la patraña.
La lista de talentos no termina, pues existen Presidentes, Senadores, Diputados, Asambleístas,
Gobernadores, y un largo etcétera, que pudiesen cooperar con su gran inventiva. Ese no es el
problema.
Lo verdaderamente grave es la manera de maltratar a las instituciones que se dicen,
2. jactanciosamente, respetar.
Con preocupación se lee, que la Marina fue la encargada de realizar el operativo, “meses
de arduo trabajo de inteligencia” (hágame el favor), a cientos de kilómetros de la playa mas
cercana. Mientras el Ejército sufre un embate, que hasta pareciera adrede. Con una imagen
disminuida por una serie de violaciones a los Derechos Humanos, en esta absurda guerra
frontal contra un enemigo disfrazado.
No se si estos muchachos que detuvieron tengan algo que ver con quien buscaban, pero
ahora ya se cuestiona la manera de ejercer la justicia. Todos estaríamos expuestos a una
equivocación y eso, de entrada, hace flácido el músculo legal.
Tampoco descarto que pudiese ser una maniobra que distraiga, para que, por ahí, nos salgan
con algún esquema premeditado.
Lo único que se puede apreciar, es que alguien está alborotando el gallinero. Y no
necesariamente es, quien perdió el control, por emborracharse de poder.
Con el yerro de hoy, el resultado es irrefutable: todos perdemos. México, otra vez, vuelve a ser
un referente negativo. Es por eso que nos ven con distinto nivel en el exterior.
Si lo que pretendían era mover el posible resultado del primero de julio, con un asunto como
este, se equivocaron. Si lo que están planeando es alterar el ánimo de los electores, no lo
conseguirán.
Por una vez, será nuestro el país. Y gracias a todas las acciones, llenas de soberbia, por parte
de los mismos de siempre, se ha podido comparar el miedo con el futuro que nos espera y el
resultado queda claro.
Con la fuerza de una juventud preparada y la experiencia que se tonifica, la nación puede
demostrase lo grande que ha sido y ocupar el verdadero lugar que le corresponde.