Lucas llora en su primer día de colegio porque quiere estar con su mamá, pero su maestra Marina lo consuela y le dice que se lo pasarán genial. Juegan en el patio, se divierten con los juguetes, se cuentan cuentos y se intercambian dibujos. Cuando Lucas sale del colegio está contento y le dice a su mamá que ya no tiene miedo porque se lo ha pasado muy bien.