1. Su Misión
Presidente
Gordon B. Hinckley
Misión 1
2. SU MISIÓN
Pte. Gordon B. Hinckley
“Les prometo que el tiempo que inviertan
en el campo misional, si lo transforman en
un servicio dedicado, les otorgará mayores
beneficios que ningún otro período de dos
años en toda su vida. Descubrirán que
significa dedicación y consagración,
desarrollarán poderes de persuasión que
bendecirán su vida entera.
Misión 2
3. Su timidez y sus temores irán
desapareciendo gradualmente a medida que
se desenvuelven con audacia y convicción.
Aprenderán a trabajar con otras personas en
un espíritu de equipo. El canceroso mal del
egoísmo será suplantado por un sentido de
servicio a los demás. Se acercarán al Señor
más de lo que seguramente podrán hacerlo
en cualquier otra circunstancia. Llegarán a
saber que sin Su ayuda, son, por cierto,
débiles y simples, pero que con ella pueden
Misión
lograr milagros. 3
4. Establecerán hábitos de laboriosidad,
desarrollarán el talento de fijarse metas
de esfuerzo personal. Aprenderán a
trabajar con enfoque y propósito. Que
magníficos cimientos serán todas estas
cosas para ustedes a la hora de ganar
una educación y ejercer una profesión.
Esos dos años no serán tiempo perdido
sino invertido en la obtención de
destrezas . . .
Misión 4
5. Si sirven una misión buena y fiel, serán
mejores maridos, mejores padres, mejores
estudiantes y mejores profesionales en la
carrera de su elección. El amor es la esencia
de la obra misional, la abnegación es su
naturaleza, la autodisciplina es un requisito
primordial y la oración abre las compuertas
del poder.”
Misión 5
6. Y más allá de todo lo anterior,
sentirán en el corazón la dulce paz de
saber que han servido fielmente al
Señor. Su servicio se transformará en
una expresión de agradecimiento a
Nuestro Padre Celestial.
Llegarán a conocer al Redentor
como su mejor amigo en esta vida y
en la eternidad.
Misión 6
7. SU MISIÓN
Pte. Gordon B. Hinckley
“Cuan profundamente agradecido
estoy por la experiencia vivida en mi
misión. Pude influir en la vida de unas
pocas personas quienes, con el transcurso
de los años, me han expresado su gratitud.
Eso ha sido importante, pero nunca me
preocupó demasiado el número de
bautismos que yo u otros misioneros
efectuamos.”
Misión 7
8. Mi satisfacción siempre provino de la
seguridad de saber que hice lo que el
Señor quiso que hiciera y de que fui un
instrumento en Sus manos para el
logro de Sus propósitos. En el curso
de esa experiencia se grabó en lo más
profundo de mi ser la convicción y el
conocimiento de que esta es por cierto
la verdadera y viviente obra de Dios,
restaurada por medio de un profeta
para la bendición de todos quienes la
acepten y vivan de acuerdo con sus
principios.”
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9. CON EL SEXO
OPUESTO
Nunca esté a solas ni tenga un trato
impropio con ninguna persona del sexo
opuesto. El coquetear (flirtear) y el
concertar una cita con una persona de
sexo opuesto no se permite. Usted no
debe llamar por teléfono, escribir, ni
aceptar llamadas telefónicas ni cartas
de persona alguna del sexo opuesto
que viva dentro de los límites de la
misión o Misión de éstos.
cerca 9
10. CON EL COMPAÑERO
Nunca esté solo. El contar con la
presencia del compañero genera fuerza y
protección. Al trabajar de dos en dos,
según la manera del Señor, se protegerán
el uno al otro de las tentaciones y de las
acusaciones falsas. Además, se apoyarán
mutuamente al dar testimonio. (véase
Eclesiastés 4:9-10) Esto incluye el estar de a
dos en la capilla.
Misión 10
11. Si su compañero tuviera dificultades
en la obra o en sus asuntos
personales, sepa percibir y
comprender esos problemas y pida
consejo a su presidente de misión. Si
bien usted debe ser leal a su
compañero, tiene que darse cuenta
que cualquier imprudencia o
violación de las normas misionales
puede amenazar su eficacia, también
su salvación. Muestre suficiente
interés en su compañero para pedir
ayuda al presidente de la misión
antes de que un problema se
convierta en una crisis. 11
Misión
12. SU MISIÓN
La sombra de su vida futura
Pte. Gordon B. Hinckley
“La tentación está por todas partes en
todos los rincones del mundo. Hay personas
que, si pudieran, harían caer a los misioneros.
Cada uno de ustedes tiene un compañero.
¿Por qué? Bueno, una de las razones es que
el Señor declaró, “. . . En boca de dos o tres
testigos conste toda palabra.” (Mateo 18:16)
Misión 12
13. Otra razón es para la protección mutua.
Si están juntos, son pocas las
probabilidades de que los dos se
equivoquen. Es posible que uno se
sienta tentado a caer, pero el otro lo
levantará, lo corregirá y le dará fuerzas
para resistir. Las artimañas del mundo
son sutiles. Tengan cuidado. Lo que
ustedes quieren es regresar a su casa
con honor. No se vuelquen hacia la
tragedia. La transgresión nunca fue
felicidad; el mal nunca fue felicidad.”
Misión 13
14. SU MISIÓN
La sombra de su vida futura
Pte. Gordon B. Hinckley
“!Cuan maravilloso es su llamamiento!
No están aquí para tomar fotografías ni para
jugar. Fueron enviados para encontrar y para
enseñar. Tal es nuestra oportunidad, nuestro
desafío y nuestra responsabilidad. Nunca
llegarán en la vida a cimas más altas que las
que alcanzarán en el campo misional.
Misión 14
15. Es posible que esto les suene
extraño. Esta misma declaraciòn la
hice en Argentina hace mucho
tiempo y unos diez años después
recibí una carta de un joven en la
cual decía: “Cuando servía como
misionero en Artentina, usted fue de
visita y me hizo un maleficio que
nunca he podido sacarme de
encima. Desde entonces nada me
ha ido bien. Fracasé en los
estudios, fracasé en mi trabajo y
fracasé en mi matrimonio.”
Misión 15
16. Yo no le hice ningún maleficio. Lo
único que les dije fue que jamás
caminarían más erguido ni
alcanzarían cimas más altas que
cuando se encontraban en el
servicio del Señor, y su vida
posterior a la misión así lo
demostró.
Este es el gran día de oportunidad
de forjar en ustedes hábitos de
trabajo que les serán una bendición
por el resto de su vida.
Misión 16
17. El Señor dijo: “Y si vuestra mira
está puesta únicamente en mi gloria,
vuestro cuerpo entero estará lleno
de luz y no habrá tinieblas en
vosotros.” (DyC 88:67). Si se
concentran en la obra del Señor, si
le dan sus mejores esfuerzos, todo
el cuerpo se llenará de luz y no
habrá más obscuridad en ustedes.
Así se marcharán la obscuridad del
pecado, la obscuridad del ocio y
toda otra cosa negativa. Esas son
las palabras del Señor para ustedes
y para mí.
Misión 17