Este documento presenta cinco reflexiones sobre temas relacionados con la vocación desde una perspectiva cristiana. La primera reflexión se titula "Escucha" y enfatiza la importancia de escuchar antes de amar o tomar decisiones. La segunda se llama "Encarnación" y habla sobre Dios que se encarna en Jesús y en cada persona. La tercera reflexión es sobre la "Ternura" y cómo experimentar el amor tierno de Dios. La cuarta se titula "Pasión" y describe la vocación como una pasión que saca lo mejor de cada uno. La
1. 12
(Textos tomados de una página web de las Claretianas Acompasando)
1. “¡ESCUCHA!”
por José Ángel Beltrán
“Escucha Israel, Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, con toda tu alma y con toda tu mente y
al prójimo como a ti mismo” Mc 12, 28-31.
-Esta es la respuesta de Jesús cuando le preguntan cuál es el primer mandamiento. Todos conocemos estas
palabras de Jesús y desde nuestra fe en Él todos queremos hacerlas nuestras y vivirlas con profundidad,
pero curiosamente se nos suele olvidar como Jesús comienza ha explicarnos qué es lo más importante:
“Escucha”… sí, es cierto, lo más importante es amar, pero para amar bien, para saber cómo amar,
es muy importante escuchar primero.
.Si hablamos de vocación la escucha se convierte en la primera actitud que debemos cultivar, por
supuesto que la iniciativa la sigue llevando este Dios que llama, pero es el mismo Dios que quiso dejar
intacta nuestra libertad de modo que seamos nosotros los que podamos responder a su llamada… sólo si
antes la hemos escuchado.
Cuántos errores vienen de aquí, cuántos malentendidos, cuánto camino recorrido en sentido inverso,
cuánto tiempo perdido… por no escuchar, por lanzarnos a buscar sin habernos parado antes, cuánto afán
por “hacer” sin haber dedicado antes tiempo para “recibir”. En la fe, como en la vida, lo más importante
lo recibimos, no es tanto que optemos por ello sino que lo acogemos en el corazón y lo hacemos
nuestro… y para eso hay que escuchar.
.
Al igual que María, que es para cualquier cristiano un icono vocacional, lo nuestro es estar atentos para
que cuando Dios quiera presentarse podamos acoger su palabra, no digo ni siquiera entenderla, María
no entendió al ángel en la anunciación pero escuchó su llamada y se hizo disponible para dejar nacer a
Jesús. María escuchaba y “guardaba en el corazón”, ya llegaría el momento de entender, de optar, de
entregar… pero antes de todo eso María escuchaba.
CONVOCADOS HOY
2. 12
Nuestra relación con Dios está llamada a seguir continuamente esta dinámica, si queremos descubrir cuál
es nuestra vocación, si queremos afianzarnos en la vocación que ya se nos ha regalado, el primer paso
siempre es la escucha.
.Es cierto que la oración es un dialogo entre amigos, pero en ese dialogo es tan importante expresarnos
ante Dios como escuchar lo que Dios quiera expresar. Nuestro Dios no es un Dios mudo, bien sabemos
muchos que cuando habla lo hace con claridad y firmeza, pero lo hace cuando Él quiere, a través de
su Palabra, de los acontecimientos, de las personas que nos rodean, desde los deseos que nos
mueven… mientras tanto lo nuestro es escuchar…no vaya a ser que Dios nos esté hablando ya y
nosotros estemos perdidos en medio de tantos ruidos que solemos tener dentro y fuera de nosotros.
- Canción Juan Luis Guerra “Tan sólo he venido”
- http://www.youtube.com/watch?feature=player_embedded&v=41KnjjucBH4
Palabras: Tan solo he venido… a escucharte…
..Palabra: “Escucha Israel” Dt 6, 4-9
.Para la reflexión:
• ¿Tengo una actitud de escucha en mi vida?
• ¿De qué me habla la realidad que me rodea?
• ¿Qué escucho de los demás?
• ¿Qué quiere Dios decirme?
.
.
CONVOCADOS HOY
3. 12
2. “ENCARNACIÓN”
por José Ángel Beltrán
.Si hablamos de vocación creo que “encarnación” es otra de esas “palabras clave” que nos ayudan a
profundizar, a descubrir y a renovar la llamada que Dios nos hace a cada uno.
.Es sorprendente que nuestro Dios haya elegido revelarse de esta forma: cuando decide dar su Palabra
definitiva lo hace “rebajándose a ser como uno de nosotros”(cf. Flp 2, 6-7), asume nuestra debilidad, la
fragilidad de la condición humana, nuestras alegrías y tristezas, nuestras certezas y miedos, nuestras
dudas, nuestros deseos…
.Es sorprendente cómo, una vez más, Dios elige la sencillez, la humildad, la pequeñez…se fija en María
para “acontecer en la historia” y vive una vida “escondida” entre los suyos hasta que llega el momento de
anunciar el evangelio.
.Es sorprendente cómo la Palabra insiste en la presencia del Espíritu Santo en nosotros (Rm 8, 9; 1ª Co 3,
16; Ez 36, 26-27…), una y otra vez Dios nos recuerda que “Él vive en nosotros”.
.Y es también sorprendente cómo tantas veces, pretendemos buscar fuera lo que ya llevamos dentro,
cómo nos escapamos continuamente de esa Palabra que Dios ya ha puesto en cada uno de nosotros, cómo
somos incapaces de escuchar el pálpito de esa Vida que late en nuestro interior.
La vocación supone “descubrirse habitado” por este Dios que ha optado por encarnarse en nosotros,
supone, como ya hemos dicho en estos meses, bucear en el propio interior y escuchar esa voz que Dios
reserva “solo para mí”…adentrarse en esa intimidad que Dios quiere vivir conmigo porque me Ama con
locura y sin condiciones.
Sí, Dios me Ama, con mis incoherencias y mis miserias, con mis dudas, mis miedos y mis fracasos, con
mi debilidad…con todo mi pecado…
CONVOCADOS HOY
4. 12
.…Y me Ama también con todos los dones que Él mismo ha puesto en mí, con toda la capacidad de
entrega que Él me ha regalado, con toda la capacidad de Amar que tengo, que va más allá de mis propias
fuerzas o capacidades porque Él mismo ya Ama en mi.
.Y este ejercicio de encarnación, de descubrirme habitado, me lleva necesariamente a descubrir a este
mismo Dios presente en cada ser humano de este mundo, presente y encarnado sobretodo en los
pequeños, los excluidos, los marginados…todos ellos preferidos de este Dios que quiso encarnarse en “lo
pequeño” y que sigue llamándonos a cada uno desde el mismo “lugar cristológico” que constituyen los
empobrecidos de esta tierra.
Canción Ain Karem “Realidad”
. http://www.youtube.com/watch?feature=player_embedded&v=7M5IWTwv-yM
Palabras:
“Tú no eres quien pensaba”…una “realidad” tantas veces teñida de miedos, de dudas, de fracasos…y
sin embargo tan “preñada” de Dios, tan llena de las posibilidades de un Dios para el que nada es
imposible, un Dios que se revela como Señor de toda la historia… de la mía también… si yo le doy
permiso.
Palabra:
“el Espíritu Santo descenderá sobre ti…” Lc 1, 26-38
Cuestiones para la reflexión:
• ¿De qué manera concreta siento yo que Dios “se hace carne en mi vida”?
• ¿Cómo estoy yo llamado a “encarnar” el evangelio que Jesús me propone?
• ¿Cómo preparo yo mi corazón para este Dios que viene para “hacer morada en mí”?
• ¿Estoy dispuesto a “dejar nacer” a Jesús en mí?
.
.
.
CONVOCADOS HOY
5. 12
3. “TERNURA”
por José Ángel Beltrán
“El hijo de Dios, en su encarnación, nos invitó a la revolución de la ternura” (Evangelii Gaudium 88)
.…la “revolución de la ternura”, me parece una maravillosa expresión para anunciar el evangelio de
este Dios que quiso nacer indefenso, pequeño y débil para mostrarnos el camino de la “verdadera
humanidad”, de la verdadera vocación a la que somos llamados cada uno.
Y es que ternura me parece otra de esas palabras claves de las que vamos hablando en estos meses,
una actitud fundamental en cualquiera que esté buscando o profundizando en su propia vocación, y
una actitud fundamental también en todos aquellos que tenemos como misión o ministerio ayudar a otros
a descubrir y crecer en la vocación.
Pero para tener esta actitud vital que nos impulse a mirar y acoger con ternura a los demás (sea cual sea su
condición… o la nuestra) necesitamos previamente haber experimentado nosotros mismos la ternura de
Dios. Haber gustado esa experiencia de un Amor que nos envuelve y que nos hace descubrir una nueva
manera de ser y de estar en el mundo.
.Un Amor que se revela en la relación de intimidad con Dios, en el dialogo personal con Él, en el
deseo de paz y fraternidad que se nos despierta en la oración… y también en la relación con los demás,
en los gestos de cercanía y cariño, en el cuidado que ponemos al hacer las cosas, en la acogida de los
que llegan a nosotros heridos, cansados, desesperanzados…
.Un Amor que se concreta en sonrisas, caricias, abrazos… un Amor que nos lleva a compartir lo que
somos y tenemos… un Amor que a veces se nos olvida y queda enterrado entre las prisas, la rutina o los
sinsabores que vamos acumulando, pero que sin embargo anhelamos en lo más profundo de nuestro
corazón… “gusté de Ti y ahora te anhelo” que decía S. Agustín y que expresa perfectamente ese deseo
CONVOCADOS HOY
6. 12
íntimo de volver a experimentar el Amor tierno de Dios con cada uno, ese Amor personal, íntimo,
sobrecogedor, que es capaz de despertar en nosotros las posibilidades más recónditas de nuestro ser y
activarlas para poder amar a otros como nosotros hemos sido Amados.
Un Amor al que somos llamados si queremos “vivir vocacionalmente”, si queremos Amar “con toda
nuestra mente, con todas nuestras fuerzas, con todo nuestro corazón”
Canción: “Desde abajo” Ain Karem
.http://www.youtube.com/watch?feature=player_embedded&v=-a_rsfldTbg
Palabras:
Una “revolución de la ternura”… hecha “desde abajo, desde dentro y desde cerca”… al estilo del Dios
de Jesús
Palabra:
“Jesús le miró con ternura y le dijo: sólo te falta una cosa: “vete, vende todo lo que tienes y reparte el
dinero entre los pobres y tendrás un tesoro en el Cielo. Después ven y sígueme” Mc 10, 21
-Cuestiones para la reflexión:
• Recuerda de qué manera te has sentido Amado por Dios
• ¿Cuándo te has sentido “mirado con ternura” por Jesús?
• ¿Qué deseos despierta en ti la relación que tienes con Dios?
• ¿A qué te invita el Señor con su mirada?
CONVOCADOS HOY
7. 12
4. “PASIÓN”
por José Ángel Beltrán
Si con algo tiene que ver la vocación es con sacar lo mejor que cada uno lleva dentro, vivir la vida
vocacionalmente es fundamentalmente responder a una llamada que ya llevamos impresa en nuestro
interior, una llamada que nos pertenece y a la que pertenecemos, una llamada que moviliza lo mejor de
cada uno, que saca de nosotros ese tesoro que Dios puso cuando nos soñó para que pudiésemos
“vivir en abundancia” y repartir abundantemente esa Vida regalada desde antes de nacer.
.La vocación, más que renuncia, es sobretodo pasión, se trata más que nada de descubrir aquello que
colma nuestro corazón y nos moviliza, aquello que se manifiesta como deseo profundo y que nos
llama insistentemente porque es algo que nos configura íntimamente y que nos construye como personas
sacando lo mejor que llevamos dentro.
“Antes de que nacieras te llamé por tu nombre” Jr 1, 5. Dios ya puso su semilla en nosotros incluso
antes de nacer, llevamos dentro la llama que prende nuestra vida y que es capaz de encender lo que somos
y lo que hacemos para convertirlo en un fuego que no se apaga. Ese es el secreto de tantos testigos del
evangelio que nos muestran con su vida lo que es “vivir en plenitud”, su sola presencia nos transmite
fuerza y esperanza, sus acciones nos llenan de pasión y de un entusiasmo contagioso que se propaga,
incluso a pesar de las dificultades, los sacrificios y la injusticia logran transmitir serenidad y alegría de
vivir… porque precisamente esa es la consecuencia de vivir vocacionalmente: la alegría y la paz.
.La vocación nos lleva a descubrir “nuestro lugar en el mundo”, nos acerca a nosotros mismos
haciéndonos capaces de entregarnos a los demás, nos libera del miedo, de la angustia, del vacío, del
sinsentido de vivir una vida que no nos pertenece ni nos apasiona. La vocación nos arrastra hacia el
camino de una vida apasionante, apasionada y apasionadora, llena del riesgo del evangelio, de la
CONVOCADOS HOY
8. 12
incertidumbre del Amor, de la debilidad de lo pequeño que es capaz de hacerse grande, una vida de
encuentros compartidos, de momentos en los que se nos ensancha el pecho y rebosamos de alegría porque
sabemos que estamos respondiendo a lo que verdaderamente somos y que con esa respuesta estamos
también construyendo un mundo más justo y mas fraterno.
.
Video”Live True” Anuncio Dewars
-http://www.youtube.com/watch?feature=player_embedded&v=Ve3PeihKwmg
Palabras:
Hazlo solo si ya lo llevas dentro… si te nace, si lo necesitas para ser tu mismo, saca siempre lo mejor de
ti.
Palabra:
“Yo he venido para que tengan Vida y para que la tengan en abundancia” Jn 10,10
Cuestiones para la reflexión:
• ¿Qué significa para mi “vivir en abundancia”?
• ¿Qué es lo que realmente me apasiona?
• ¿Vivo respondiendo a esta llamada que llevo dentro?, ¿lo que mueve mi vida es lo que anhela mi
corazón?
• ¿Qué tengo que hacer para poder vivir desde lo mejor de mí, para responder al deseo y las
posibilidades que Dios ha puesto en mí?.
.
.
CONVOCADOS HOY
9. 12
5. “CONVERSIÓN”
por José Ángel Beltrán
Cada año resuena para nosotros ese magnífico inicio del evangelio de Marcos que nos anuncia la buena
noticia que todos estamos esperando: “el tiempo se ha cumplido, el Reino de Dios está cerca. Conviértete
y cree en el evangelio” (Mc 1, 15)
La vocación está íntimamente relacionada con esta triple experiencia a la que se nos invita:
Por un lado el asombro, la expectación, la alegría de algo insospechado que se descubre como anhelo del
corazón y como promesa de Vida (“el tiempo se ha cumplido, El Reino de Dios está cerca”). La vocación
siempre despierta en nosotros esa pasión de la que hablábamos el mes pasado y nos lleva a redescubrir la
novedad de la Vida que se nos propone. Nos pone en “estado de alerta” ante una propuesta que toca
directamente nuestros más íntimos deseos y aspiraciones.
.Por otro lado un imperativo que condiciona nuestra respuesta: “¡Conviértete!”… cambia de vida,
renueva tus sueños, tus opciones, tu manera de mirar y hacer las cosas… transfórmate a semejanza
de Aquel que te convoca. La vocación es una llamada a la plenitud y para vivir así hay que “soltar lastre”
y afianzar las opciones que fundamentan la propia vida. Dedica tiempo a profundizar en ti mismo, hazte
las preguntas importantes: ¿qué sentido tiene mi vida?, ¿para qué o para quién nací?, ¿a quién quiero
entregarme?…y date tiempo y espacio para poder responder con verdad. La vocación necesita “hondura”
personal para poder afianzarse y crecer.
Y finalmente “¡Cree en el evangelio!”… apoya tu vida y tu entrega en la Palabra de Otro que es más
grande que tú y que te convoca… pon tu esperanza más allá de tus propias fuerzas o capacidades y confía
en un Amor que es más fuerte que la muerte… descansa en las manos de un Dios que tiene sobre la
CONVOCADOS HOY
10. 12
humanidad y sobre ti mismo un destino amoroso. La vocación no es un reto para unos pocos héroes sino
una invitación a la humildad, a la sencillez de corazón, a la limpieza en la mirada, a la capacidad de
reconocerse “pequeño” y “dejarse hacer y convocar por un Dios que es grande en el Amor.
Canción Luis Guitarra “En lo profundo”
.hhtthhttp://youtu.be/KQu38Ms2PnYttp:/p://www.youtube.com/watch?
feature=player_embedded&v=KQu38Ms2PnYttp://www.youtube.com/watch?feature=player_embedded.
http://youtu.be/KQu38Ms2PnY2PnY
Palabras:
“En lo profundo no hay nada que no sea sorprendente”… bucea en tu propio interior, descubre la belleza
que te habita, disfruta de la “pequeñez” ante un Dios que es más grande que cualquiera de nuestras
preocupaciones, miedos y dudas… “entra en relación”
.Palabra:
.“Este tesoro lo llevamos en vasijas de barro, para que se vea que esta fuerza procede de Dios y no
de nosotros” 2 Co 4, 7
.Cuestiones para la reflexión:
• ¿Qué significa para mí “convertirme”?
• ¿Qué tengo que cambiar en mi vida para vivir la vocación a la que Dios me llama?
• ¿Dedico cada día tiempo para “profundizar” en mi relación con Dios?
• Analiza tu relación con Dios. ¿soy barro “moldeable” en sus manos, o mi vida presenta
demasiadas “resistencias” a su acción en mí?
.
.
CONVOCADOS HOY
11. 12
6. “ALEGRÍA”
por José Ángel Beltrán
“La alegría del evangelio llena el corazón y la vida entera de los que se encuentran con Jesús”, con estas
palabras comienza el Papa Francisco la “Evangelii gaudium” recordándonos que la alegría está en el
centro del mensaje de Cristo y de la vida cristiana.
Si hablamos de vocación no podemos dejar de hablar de alegría. La alegría constituye y da forma a
la vocación a la que Dios nos llama a todos y a cada uno de nosotros. Dios nos quiere felices, nos
llama a ser felices y a vivir una vida en plenitud (cf. Jn 10,10) en la que sepamos disfrutar de todo lo
recibido y en la que sepamos transmitir la alegría profunda de su “buena noticia”.
Es cierto que en el camino personal de cada uno el conflicto y el sufrimiento jugarán un papel
importante. La vida está llena de sinsabores y desesperanza pero es precisamente el encuentro personal
con Jesús uno de los mayores motivos para la alegría. Este “Dios encarnado” del que ya hemos hablado es
el mismo cuando sufre que cuando celebra. Su gozo, su paz, su mensaje que es capaz de tocar el corazón
y movilizarnos sacando lo mejor que Él ya ha puesto dentro de cada uno, su alegría contagiosa que llena
de dicha a los que le rodean y “se dejan hacer por Él”… todo es fruto de este encuentro personal que
constituye el acontecimiento central de nuestra fe… de nuestra vida.
.La Pascua representa muy bien esta situación al hacernos conscientes de un mensaje que se encarna en la
realidad con todas sus consecuencias pero que es capaz de vencer el pecado y la muerte con la fuerza del
Amor. Sí, Cristo ha resucitado, su Amor por el mundo es más fuerte y más grande que el pecado. Su
CONVOCADOS HOY
12. 12
resurrección nos trae la paz y la alegría no solo como una promesa escatológica sino como una
fuerza capaz de transformar nuestra vida hoy, aquí, ahora.
Tanto si estamos en búsqueda de la vocación a la que Dios nos llama, como si lo que hacemos es
afianzarnos en la vocación recibida, la alegría es una señal segura que indica el camino correcto.
Cuando Dios llama despierta en nosotros el deseo más íntimo, su llamada es fuente de gozo, de tal
manera que no sólo es capaz de suscitar alegría en uno mismo sino que esa alegría se contagia a todos los
que nos rodean.
.Por supuesto que la búsqueda vocacional no está exenta de problemas, tenemos muchas resistencias para
dejarnos hacer por Dios y estamos aferrados a muchas cosas en las que buscamos la felicidad… pero solo
Dios colma el corazón, y cuando nos dejamos vencer por Él descubrimos la dicha que nos tiene ya
preparada como camino personal.
Así que si quieres vivir vocacionalmente… busca, escucha y… ¡ALÉGRATE!
Canción Ain Karem “Alégrate”
http://www.youtube.com/watch?feature=player_embedded&v=0OVec-zxMis
Palabras:
“Alégrate”… ”Todo es posible para Dios”… ”Vidas multiplicadas por el Amor”
..Palabra:
.“Estad siempre alegres en el Señor, os lo repito estad alegres” (Flp 4, 4-5)
Cuestiones para la reflexión:
• ¿Qué motivos tengo yo para la alegría?
• ¿Es mi relación con Dios fuente de alegría para mí?
• ¿La vocación a la que Dios me llama me llena de alegría?
• ¿Cómo transmito a los demás la alegría del evangelio?
CONVOCADOS HOY