1. La lógica asociativa de los
sueños y la subversión de la
realidad. Vanguardia y
surrealismo
2. Supongamos que me presentan un
acertijo en figuras:
una casa sobre cuyo tejado puede verse
un bote, después una letra aislada,
después una silueta humana corriendo
cuya cabeza le ha sido cortada, etc.
3.
4.
5. El trabajo de condensación
Durante el análisis del sueño se procede a
despertar una serie de asociaciones entre los
contenidos latentes o pensamientos del sueño y
algo (reprimido) que se encuentra en el
inconsciente del soñador, que ha emergido
en el proceso onírico, en la condensación, y
que, a través del análisis, es posible
desentrañar.
6. EJEMPLO I
Cierta vez un colega me envió un ensayo del que era autor, en que
a mi juicio concedía importancia excesiva a un descubrimiento
fisiológico reciente y, sobre todo, trataba el asunto con expresiones
hiperbólicas; la noche siguiente soñé con una frase que sin duda se
refería a ese tratado: «Es un estilo verdaderamente "norekdal"». La
resolución de ese producto léxico me resultó trabajosa al comienzo;
era indudable que se había creado parodiando superlativos como
«colosal, piramidal»; pero no era fácil señalar su origen. Por fin el
engendro se me separó en los dos nombres de Nora y Ekdal,
tomados de dos conocidos dramas de lbsen. En un periódico había
leído yo antes un ensayo sobre lbsen, del mismo autor cuya última
obra criticaba en el sueño.
7. EJEMPLO IV
En un sueño mío largo y desordenado, cuyo núcleo es
aparentemente un viaje en barco, sucede que la próxima estación
se llama Hearsing, y la que le sigue, Fliess. Este último es el
nombre de mi amigo de Berlín, quien muchas veces ha sido el
objetivo de mis viajes.
Ahora bien, Hearsing se ha combinado a partir de los topónimos de
las estaciones próximas a Viena, que tan a menudo terminan en
«ing»: Hietzing, Liesing, Mödling (Medelitz, meae deliciac, es su
nombre antiguo, o sea, «meine Freud»), y a partir del inglés
Hearsay = Hörensagen {saber algo de oídas}. Este último apunta a
«calumnia» y establece la relación con el excitador -diurno-
indiferente del sueño, una poesía aparecida en Fliegende Blätter
sobre un enano calumniador, llamado «Sagter Hatergesagt» {el
decidor de lo dicho por odio}. Adicionando la sílaba final «ing» al
nombre de Fliess obtenemos «Vlissingen», que es de hecho la
estación marítima en que mi hermano recala cuando viene a
visitarnos desde Inglaterra.
El nombre inglés de Vlissingen suena Flushing, que en lengua
inglesa significa «sonrojo» y alude a una paciente con eritrofobia
que yo traté, y también a una publicación reciente de Bechterew
sobre esta neurosis y que me provocó sentimientos de desagrado.
8.
9.
10. El trabajo de desplazamiento {descentramiento}
En la formación de los sueños ocurre una trasferencia y
un desplazamiento de las intensidades psíquicas de los
elementos singulares, de lo cual deriva la diferencia de
texto entre contenido y pensamientos oníricos. El
proceso que con esto suponemos es lisa y llanamente la
pieza esencial del trabajo onírico: merece el nombre de
desplazamiento onírico. El desplazamiento y la
condensación oníricos son los dos maestros artesanos a
cuya actividad podemos atribuir principalmente la
configuración del sueño.
11. ¿Cuáles son los medios de que puede
valerse el trabajo del sueño para
figurar las relaciones del material
onírico?