Nuevamente enfocamos nuestra atención a los accidentes de tránsito
1. Nuevamente enfocamos nuestra atención a los accidentes de tránsito. Cómo prevenirlos? Qué
controles tomar? Consúltenos en Evaluar.
El choque de los colectivos de la líneas 152 y 100 dejó 28 heridos, uno de ellos muy grave, y
también expuso un negligente hábito de muchos conductores en la Argentina: no esperar la luz
verde del semáforo para empezar el cruce.
Según consignó la Policía Metropolitana, los testigos del accidente dijeron que ambos transportes
cruzaron la intersección en amarillo. Si esto es así, el conductor que estaba detenido con semáforo
rojo inició el cruce cuando apenas observó que se ponían en amarillo el de la arteria transversal y
el suyo, sin esperar la correspondiente luz verde, lo que lo haría responsable del accidente, porque
no tenía derecho de paso.
Por el contrario, el conductor que venía por la avenida con luz verde e inició el cruce en amarillo
estaba en su derecho de hacerlo, porque la luz amarilla significa pase con precaución, pero no
prohíbe el paso, como sí lo hace el semáforo rojo.
La conducta de iniciar el cruce con luz amarilla es, además, premeditada e irresponsable. El
conductor que realiza este tipo de maniobras no tiene motivos, salvo su apuro o ansiedad, para no
esperar la luz verde. Esta infracción, precisamente por su carácter intencional, es grave. Por lo
tanto, debería ser multada y sancionada con severidad. Y claro está, también es sabido que
muchas veces las empresas de transporte pagan apenas un mínimo porcentaje de las multas que
les labran.
La luz verde tampoco autoriza libremente el paso. Antes, el conductor debe verificar que la vía de
circulación esté efectivamente libre. Por ejemplo, que no haya peatones cruzando la arteria, o
ciclistas, que conforman, más allá de no respetar en ese momento las normas, el eslabón más
débil de la cadena del tránsito urbano.
Por otra parte, debería revisarse cómo funcionan los semáforos en Buenos Aires.
No tiene sentido que un semáforo pase de rojo (detención) a amarillo (pase con precaución) y
luego a verde. Debe pasar directamente a verde cuando el de la transversal ya esté en rojo,
porque la luz amarilla, en este caso, no otorga derecho de paso.
En muchos países el verde titila varias veces antes de ponerse en amarillo y esta luz tiene un
tiempo prudencial para permitir el paso sin dificultades. Esto da a los conductores una mejor
lectura sobre si deben frenar o pueden continuar.
Aquí, muchas veces el conductor se encuentra con semáforos que le dejan escasas décimas para
tomar la decisión de frenar o seguir. Los que manejan no tienen idéntica capacidad de reacción y
2. destreza. Tampoco, lamentablemente, el sentido de responsabilidad y concentración en el manejo
que se necesitan en un tránsito caótico como el nuestro..