El documento describe quiénes son los 144,000 mencionados en el Apocalipsis. Los 144,000 son los fieles de la Iglesia Adventista del Séptimo Día que vivirán durante los últimos días y enfrentarán una terrible persecución por parte de poderes religiosos y civiles unidos. A pesar de la gran tribulación, los 144,000 permanecerán victoriosos en su fe y serán salvados por Dios.
1. ¿QUIÉNES SON LOS 144,000?
Dr. Merling Alomía
Universidad Peruana Unión
El tema de los 144 000 es un asunto que ha interesado grandemente a los fieles de
todas las épocas y que últimamente la disidencia lo ha tornado controversial. Está vincula-
do directamente con el motivo del remanente pues es el número de los fieles que al final
de los siglos serán salvos y llevados a las mansiones celestiales. Su mención es hecha en un
contexto de lucha, victoria, alegría, adoración y salvación eterna. Los 144 000 son los fieles
de la Iglesia de Dios (IASD) que vivirán los días finales del mundo en medio de una
persecución y angustia espantosa y terrible nunca antes vista en toda la historia de nuestro
planeta (Dan 12:1; Apo 7:14).
Los 144 000 son los fieles de la Iglesia de Dios (IASD) que vivirán los días finales
del mundo en medio de una persecución y angustia espantosa y terrible nunca antes vista
en toda la historia de nuestro planeta (Dan 12:1; Apo 7:14). Al hablar de los 144 000 necesa-
riamente hay que mencionar los acontecimientos escatológicos que precederán el fin del
mundo y los que seguirán después de eso. Es decir, el trasfondo escatológico de ellos.
Privilegio profético:
Los profetas tuvieron el gran privilegio de ver el gran conflicto cósmico en toda su
dimensión: su inicio, desarrollo, confinamiento en la tierra, enfrentamiento, final, aniqui-
lamiento, y restauración. Lo vieron en un doble escenario paralelo. El terrenal y el cósmico
y todo el desarrollo de él centrado y relacionado con el Santuario. Vieron a Satanás empe-
ñado en destruir a la humanidad y a Jesús en salvarla.
¿Por qué en el Santuario?
Porque allí está el Mesías victorioso obrando a favor de los redimidos.
Porque allí se inició la rebelión y controversia satánica.
Porque es el cuartel general de la salvación.
Porque es el centro del juicio donde se determina quiénes se salvarán y quiénes se
perderán.
Porque allí Jesús salva a quienes quieren salvarse (a los que aceptaron la salvación) y
también les da la perdición a los que decidieron perderse.
Vayamos a los dos escenarios:
El terrenal (es el mundo) con todo lo que Sata-nás y sus demonios (ángeles y humanos)
hicieron y harán por destruir al remanente.
2. El cósmico (el celestial) con todo lo que Dios hicieron y harán por salvar al remanente (a su
iglesia).
El centro de operaciones es el Santuario.
Dios en todo tiempo y en todas las edades siempre cuidó de su remanente, de su iglesia.
El primer remanente fue el que él salvó en el arca. Noé y los suyos constituyeron el
remanente de los días del diluvio. Ellos fueron objeto de su cuidado en el juicio y
destrucción del mundo antiguo. En el arca entró el remanente de Dios y el remanente del
mundo; sólo los que oyeron y aceptaron el mensaje salvador de Dios, se salvaron. Por más
que buscaron refugio ya era demasiado tarde. Las aguas del diluvio fueron la tumba de
todos los que despreciaron la seguridad del arca. En el arca estaban seguros sólo el
remanente de Dios. Había solamente un arca. En los días del Diluvio, Dios intervino
drásticamente para salvar al remanente. Prácticamente hizo una nueva creación.
• En los días de Abraham, Dios lo sacó de Ur para continuar con la verdad y las
promesas.
• En los días de Moisés, Dios rescató a su remanente de la esclavitud de Egipto.
• En los días de los reyes de Judá Dios salvó a su remanente de Babilonia con un 2do.
Éxodo.
• En los días de Jesús de Nazaret, suscitó su iglesia para formar su nuevo pueblo de
salvos.
• Y en el tiempo del fin suscitó (levantó) a la IASD como su remanente y arca de
salvación.
Dios mismo se encargará de juntar y sellar su remanente asegurándolo en su redil que él
ha establecido con ese propósito,.
Los 144 000 son el remanente final de la iglesia de Dios que él protegerá y los salvará vivos
de todo el ataque final que Satanás desplegará contra la iglesia de Jesús.
Ellos se unirán al remanente de todas las edades cuando resuciten para formar una
multitud incontable de salvos.
Los 144 000 son el remanente de Dios que el dragón y la gran Ramera romana han buscado
y siempre buscarán destruir al final del tiempo del fin.
Hace ya tiempo que el dragón, la bestia y la gran ramera dirigen sus acciones y sus huestes
desde Roma.
Apo 17:3-6, 9, 15, 18
‘‘Y tenía en su mano un cáliz de oro lleno de abominaciones . . .’’. Cada día en cada misa
3. Roma disemina las abominaciones de la copa que ella ha llenado para embriagar al mundo
entero con sus mentiras y blasfemias.
En cambio el remanente es dirigido, sellado y protegido por Cristo desde su Santuario.
Los libros de Daniel, Apocalipsis y “El conflicto de los siglos” despliegan el cuadro real del
conflicto del cual sale ileso, indemne y salvo el pueblo de Dios, la iglesia, y el remanente
final o los 144 000.
Ellos son:
Salidos de todos los linajes, pueblos, tribus, lenguas, credos, religiones e iglesias a la IASD,
que es el redil o arca de Dios en el tiempo del fin.
Qué se nos revela de ellos:
Dan 12:1 – General, triunfo final.
Apo 12:17 – General y específico.
Daniel los llama: “Pueblo de Dios, “los santos del Altísimo”, “enlistados en los registros
celestiales (registros, o libro de la vida) de Dios”.
Juan los llama: “Remanente de la iglesia de los siglos”, “guardadores (obedientes) a los
mandamien- tos de Dios”, “poseedores del espíritu de profecía”, “144 000” y
específicamente, “los sellados para la salvación”. Son los que han obtenido la victoria final
en los días finales incluyendo los días de la gran tribulación o la angustia de Jacob y el
decreto de muerte.
El rasgo del pueblo de Dios, de la iglesia de Cristo, del remanente, de los 144 000 es la
victoria; son victoriosos.
Han vencido al diablo y sus poderes a lo largo de los siglos.
Ese cuadro victorioso lo presenta Daniel en forma resumida y general, en Dan 12:1-3: Es el
pueblo de Dios, los santos del Altísimo, el pueblo del pacto.
Juan presenta el mismo cuadro en forma más detallada:
Lo hace primero bajo el símbolo desplegado de las iglesias: Enfocando la historia de la
iglesia en 7 etapas (de Éfeso a Laodicea).
En cada una de las etapas, la característica VENCEDORA del remanente es destacada.
En cada época o etapa, el remanente es vencedor.
Juan presenta el mismo cuadro en forma más detallada:
4. Lo hace primero bajo el símbolo desplegado de las iglesias: Enfocando la historia de la
iglesia en 7 etapas (de Éfeso a Laodicea).
En cada una de las etapas, la característica VENCEDORA del remanente es destacada.
En cada época o etapa, el remanente es vencedor.
Éfeso – Apo 2:7 – “el que venciere”
Esmirna – Apo 2:11 – “el que venciere”
Pérgamo – Apo 2:17 – “al que venciere”
Tiatira – Apo 2:26 – “al que venciere”
Sardis – Apo 3:5 – “el que venciere”
Filadelfia – Apo 3:12 – “el que venciere”
Laodicea – Apo 3:21 – “Al que venciere”
Culmina con la adoración del remanente ante el trono, como victoriosos y salvos – Cap 4
Luego se repite la misma secuencia con un nuevo simbolismo, esta vez sellos:
Siete sellos o períodos – Cap. 6
En el capitulo 7 aparece el remanente con el nombre de sellados en un número simbólico,
144 mil de la totalidad de sellados.
Junto con ellos se describe una multitud innumerable de redimidos de todo el mundo, “de
todas las naciones y tribus y lenguas y pueblos”. Ellos están ante el trono – ante el
Cordero. Vestidos de blanco – con palmas (victoria).
Hoy día cuatro ángeles poderosos todavía sujetan los cuatro vientos del cielo mientras
otros ángeles sellan al remanente de Dios.
Son sellados en su frente y en sus manos porque ellos decidieron pensar y actuar
obedeciendo a Dios y su santa Ley.
¿Quiénes son? ¿De dónde salieron?
Apo 7:14 – “Salieron de gran tribulación” (Dan 12:1 vivirán durante una terrible
tribulación).
— Ambos dan las mismas características
Apo 12 – El dragón – es el diablo
5. La mujer – es la iglesia
Apo 12 es el Conflicto cósmico en cápsula.
Apo 13 – Cómo persiguió y perseguirá a la iglesia el dragón con sus bestias escatológicas.
Dos bestias o poderes terrenos:
El catolicismo romano (o la bestia) y el protestantismo apóstata (o la mamá ramera y las
hijas rameras como ella)
Tal como logró el diablo crucificar al Mesías por el mismo pueblo de Dios, al final logrará
que el pueblo de Dios sea perseguido por un poder unido que alega ser cristiano. El
remanente será perseguido por el protestantismo y el poder papal romano.
En Apocalipsis 17 los poderes perseguidores aparecen en su doble identidad: El poder
civil (la bestia) y la iglesia romana-protestante (la ramera apóstata).
Las dos bestias de Apo 13 aparecen como una sola y con las características de todas en una
tal como aparece como la bestia perseguidora del remanente.
Igualmente las dos iglesias apóstatas, la romana y la protestante aparecen como una
porque ambas dominarán al poder civil del fin exactamente como lo hizo en el medioevo.
La mujer encarna a la iglesia infiel de medioevo y la del tiempo de fin: Ramera y rameras
que se unen para buscar la aniquilación del remanente.
Su actuación será ejecutada desde la “ciudad de las siete colinas”, Roma, y será secundada
desde Washington, porque al final ambas tendrán el mismo propósito, bajo la dirección de
Satanás, el gran dragón.
Pronto ambos poderes formarán la Imagen de la Bestia de Apo 13. La cabalgata impía y
cruel de las dos Romas unidas, la civil y la eclesiástica.
Apo 13:8 y Dan 12:1 – Vínculo directo de identidad de los perseguidos y victoriosos.
El capítulo 14 es una descripción de nuestros días y lo que está a punto de suceder:
[a] Primero se refiere a los 144 000 especificando quiénes son (14:1-5).
[b] Luego describe el trasfondo de su aparición y su lucha al cumplir su misión evangeliza-
dora (14:8-13).
[c] Luego la lucha final (el desenlace culminante) con las dos siegas, la mies y la vendimia.
La mies es recogida para el alfolí celestial.
Las uvas son holladas en el lagar de la ira de Dios, fuera de la ciudad (Apo 14:14-20).
6. El cuadro se repite en Apo 19 con las dos cenas: la del Gran Dios y la de las Bodas del
Cordero.
Siempre hay una referencia clara acerca del destino que espera a los fieles e infieles,
a los leales y rebeldes.
Y sobre todo del triunfo y la restauración final cuando termine el gran conflicto.
Los 144 000:
• Es un número simbólico de una totalidad que abarca los redimidos del tiempo del
fin.
• Son los sellados de modo especial y en un tiempo especial – Apo 7:1-8
• Cantan su experiencia, experiencia única.
• No transaron ni pactaron con otras iglesias. Su fe se mantuvo pura (virgen) por eso
los que forman el remanente son llamados vírgenes.
• Son inmaculados ante Dios – Limpiados por la sangre del Cordero.
• Son Victoriosos sobre el papado y el protestantismo apóstata – Apo 15:2; Dan 12:1
‘‘Trasladados sin ver la muerte: viven durante las plagas, sin intercesor y en angustia
indecible, bajo el dominio total del mundo por Satanás y sus demonios, perseguidos,
con un decreto de muerte pendiendo sobre ellos’’ – CS 707
7. Trasladados sin ver la muerte:
“Delante del trono, sobre el mar de cristal . . . Se halla reunida la compañía de los
que salieron victoriosos ‘de la bestia, y de su imagen, y de su señal, y del número
de su nombre’. Con el Cordero en el monte de Sión, ‘teniendo las arpas de Dios’,
están en pie los ciento cuarenta y cuatro mil que fueron redimidos de entre los
hombres; se oye una voz, como el estruendo de muchas aguas y como el estruendo
de un gran trueno, una voz de tañedores de arpas que tañían con sus arpas’.
Cantan ‘un cántico nuevo’ delante del trono, un cántico que nadie podía aprender
sino aquellos ciento cuarenta y cuatro mil . . .
“Es el cántico de Moisés y del Cordero, un canto de liberación. Ninguno sino los
ciento cuarenta y cuatro mil pueden aprender aquel cántico, pues es un cántico de
su experiencia –una experiencia que ninguna otra compañía ha conocido jamás.
Son ‘éstos, los que siguen al Cordero por dondequiera que fuere’. Habiendo sido
trasladados de la tierra, de entre los vivos, son contados por ‘primicias para Dios y
para el Cordero’ (Apo 15:2,3; 14:1-5) . . .
“‘Estos son los que han venido de grande tribulación’; han pasado por el tiempo de
angustia cual nunca ha sido desde que ha habido nación; han estado sin intercesor
durante el derrama- miento final de los juicios de Dios. Pero han sido librados,
pues ‘han lavado sus ropas, y las han blanqueado en la sangre del Cordero’. ‘En sus
bocas no ha sido hallado engaño; están sin mácula’ delante de Dios . . .
“‘Por esto están delante del trono de Dios, y le sir- ven de día y de noche en su
templo; y el que está sentado sobre el trono tenderá su pabellón sobre ellos’ (Apo
7:14-15). Han visto la tierra asolada con hambre y pestilencia, al sol que tenía el
poder de quemar a los hombres con intenso calor, y ellos mismos han soportado
padecimientos, hambre y sed. Pero, ‘no tendrán más hambre, ni sed, y el sol no
caerá sobre ellos, ni ningún otro calor. Porque el Cordero que está en medio de
ellos los pastoreará, y los guiará a fuentes vivas de agua: y Dios limpiará toda
lágrima de los ojos de ellos’’’(Apo 7:14-17) – CS 707
• Ellos son las primicias de la cosecha final. Todos los resucitados son el grupo de los
redimidos que gustó la muerte incluyendo el mismo Cordero.
• Los 144 000 son parte de los redimidos de todas las edades, pero no la totalidad de
los redimidos de todos los siglos.
• Son poseedores de la melodía inmortal y eterna, el Cántico de Moisés y del
Cordero (Apo 15:3).
• Son pacientes hasta lo sumo (Apo 14:2).
• Son obedientes a la Ley de Dios (Apo 14:12). Ellos no gustarán la muerte, pues aún
en el peor momento de la tribulación estarán escondidos en los lugares recónditos
8. de la tierra e incluso en las cárceles siendo objeto de la ira, del dragón y de sus dos
bestias finales.
Pero también ocultos en el pabellón de Dios.
De hecho ellos también estarán en pie cuando el Salvador regrese y darán la bienvenida al
Salvador junto con los resucitados de la bienaventurada esperanza.
Son los redimidos del tiempo de fin, creyentes en la “bienaventurada esperanza” y
ellos resucitan antes de la resurrección general de los justos.
Dentro de ésta hay otro grupo especial de redimidos, dado en número simbólico,
que son la escolta especial del Cordero. Son los que pasarán indemnes durante los días
finales de la gran tribulación, cuando las plagas sean derramadas sobre la tierra y en
especial sobre la bestia y su imagen; es decir los 144 000.
• Ellos han hecho del Santuario su refugio y centro de adoración.
• Por la fe siempre han buscado a su intercesor y abogado en el Santuario
celestial.
• Confiadamente se llegaron al trono de la gracia donde siempre encontraron
el oportuno socorro.
Los 144 000 es un asunto profético que está en proceso de cumplimiento total y
hasta que no se haya cumplido a cabalidad siempre habrán aspectos ignotos de
ello.
9. Resta a cada uno de nosotros confiar en lo que se nos ha revelado del asunto y
aguardar con paciencia y fe el cumplimiento de todo.
Nuestro anhelo mayor debe ser formar parte de los redimidos que junto con
ellos alabarán agradecidos al Cordero por la eternidad.