Informe Estudio de Opinión en Zapopan Jalisco - ABRIL
Popol Vuh ensayo sobre creación hombre y mundo
1.
2. La creación del hombre: Tepeu y Gucumatz decidieron que lo que debía entrar en la carnde del hombre era el barro, pero éste se humedecía y destruía en cuanto había lluvia y se endurecían cuando hacía sol, por lo que decidieron crear al hombre de otro material, el cual era la madera, pero había un problema, los nuevos hombres de madera eran frívolos y vanidosos, no tenían alma ni entendimiento, no se acordaban de su Creador ni de su Fundador, andaban a gatas y sin rumbo, su cara era enjunta, sus pies y sus manos no tenían consistencia, ni sangre, por esta razón fueron aniquilados con una gran diluvio que no dejó huella de ninguno de ellos. Al ver su intento fallido, decidieron intentar con hombres hechos de paja, pero éstos no pensaban, no se comunicaban entre ellos ni con sus dioses. Los dioses decidieron hacer un último intento por crear al hombre, esta vez decidieron hacerlo de maíz amarillo y de maíz blanco, de eso estaba formada su carne; de masa de maíz se hicieron los brazos y las piernas del hombre; fueron molidas mazorcas blancas y amarillas, de las que hicieron 9 bebidas y hemos aquí de donde nació la fuerza, la gordura, los músculos y el vigor del hombre. Según el Popol Vuh, de Paxil y de Cayalá, vinieron las mazorcas amarillas y las mazorcas blancas.
3. La creación del mundo: según el Popol Vuh, al principio todo estaba suspenso, todo en calma y en silencio, todo inmóvil y callado y vacía la extensión del cielo y el mar en calma, no había vida, no había animales, ni hombres, ni árboles. Sólo los Progenitores, Tepeu y Gucumatz, quienes una noche unieron sus pensamientos y decidieron que a la mañana siguiente deberían formar al hombre, por lo que antes debían generar vida en la Tierra y fue entonces que se manifestó la claridad y la creación y el crecimiento de los árboles y la firmeza del suelo; según los indios quichés esta fue la manera en que se formó la Tierra, sólo dijeron “Tierra” y al instante se creó; crecieron montañas y valles y arroyos y ríos. Después crearon a los animales, a los que debían habitar las selvas y las montañas, los que debían nadar en los ríos y los mares y a todos les fueron dichas sus funciones. Fue así como se creó el mundo, los animales y las formas que tiene la Tierra.
4. Las aventuras de los semidioses Hunahpú e Ixbalanqué: estos jóvenes semidioses engendrados por Hun-Hunahpú y Ixquic, vivían en la Tierra y hacían de las suyas, muchas veces quisieron derrotarlos pero ellos siempre vencían a sus oponentes. Los dioses y guardianes del mismísimo Xibalbá (lugar habitado por hombres perversos enemigos de la humanidad, comparado con el infierno) quisieron matarlos como hicieron con sus padres pero tampoco pudieron. Estas historias concluyen con el castigo de los malvados y la humillación de los soberbios.POPOL VUH (RESPUESTAS DE LAS PREGUNTAS SOBRE EL ENSAYO) El propósito del autor recae sobre muchas palabras, creo que una de las frases principales del libro que traen consigo la esencia pura del mismo, es la que dice: “de Paxil, de Cayalá, así llamados, vinieron las mazorcas amarillas y las mazorcas blancas”, referente a otra que dice: “… y de maíz amarillo y de maíz blanco se hizo su carne, de masa de maíz se hicieron los brazos y las piernas del hombre”, estas frases relacionan la existencia del hombre actual, como el perfecto, el único que adoró a los Creadores, a los Fundadores, a los Progenitores y que a la vez pudieron poblar la Tierra con armonía con la naturaleza. Indiscutiblemente el Popol Vuh tuvo éxito con su propósito, expresar la ideología de los antiguos indios quichés conforme a la creación del mundo y del hombre mismo. Por otra parte, el libro no podría llamarse “coherente” pues es demasiado fantasioso (los animales hablan, hay gigantes, el juego de la pelota se juega en el infierno…) pero no obstante, está lleno de cultura. En mi opinión, el libro no expresa partes irrelevantes, pues todo es importante ya que si pierdes el hilo de la historia, te perderás en lo demás y no podrás continuar sin antes no haber entendido bien (incluso yo tuve que releer algunos párrafos). En cuanto a otros medios alternativos para poder llegar a la misma conclusión, presupongo que no existen otros medios, pues es un libro –podría llamarse- histórico o de leyendas cuyas líneas no podrían modificarse y mucho menos cambiar el desarrollo para llegar a la misma conclusión. El movimiento de sus ideas es difícil de seguir, difícil de captar, pero pude hacerlo pues me gusta estudiar la historia de nuestros ancestros y tener así bien arraigada mi cultura y origen, aunque no niego que el texto me confundió más de 2 veces y también me tomaban por sorpresas algunas expresiones descritas en la obra. Las ideas principales están íntimamente relacionadas con las secundarias, sin éstas, y sobre todo en este libro, no podrían entenderse las principales. El material de apoyo del libro es estupendo, te lleva de la mano con el texto, está correctamente arreglado. Mis propias ideas influyeron sobre el escrito de manera constante, pues ya había leído antes sobre esta maravillosa cultura; en cuanto a la creación del hombre y del mundo, quizá no influyeron de la misma manera, pues cada persona tiene su propia ideología y forma de pensar y la mía no está de acuerdo a la creación de la vida según este manuscrito. Puedo llegar a imaginar que un público distinto, pueden llegar a ver este libro de manera diferente, cosa que explicaré en las reflexiones dentro del diario de lectura. No puedo decir que cambió mi forma de pensar, pero sí puedo decir que ahora estoy más interesado en saber qué fue lo que pasó con una de las más grandes civilizaciones, la maya. Ahora, puede sonar cómico, pero veo al maíz como un alimento bendito por los dioses, si el imperio maya e incluso podríamos hablar del azteca, nunca hubieran sido derrocados, tendríamos quizá una forma de pensar diferentes y seguiríamos adorando (no por completo porque es ilógico pensar que Américo nunca fuera descubierto) a los antiguos dioses, si una vez lo hicimos, ¿por qué no mostrar respeto ante tales creencias? La conclusión a la que llegué es que, la civilización maya ha aportado innumerables datos sobre astronomía, física, matemáticas, ciencia e historia, que como buenos mexicanos estamos obligados a defender, conservar y transmitir. DIARIO DE LECTURA (REFLEXIONES SOBRE EL LIBRO) La primera reflexión que hago sobre el libro es la que con anterioridad mencioné, sobre la frase: “de Paxil, de Cayalá, así llamados, vinieron las mazorcas amarillas y las mazorcas blancas”, según el libro, estos legendarios lugares pertenecen a la región te Tabasco, según Brasseur de Bourbourg (único autor en tratar de situar geográficamente a Paxil), Paxil significa separación, extensión de las aguas, inundación. Cayalá, derivad de cay, podrido, se puede interpretar como podredumbre de agua. Según Brasseur, se encuentran en la región de Tabasco, donde el río Usumacinta, se divide en varios brazos e inunda la comarca en la época de su mayor creciente. Otro investigador llamado Bancroft, opinaba que Paxil y Cayalá, se encontraban en la región de Palenque y el Usumacinta. Lo cierto es que ninguna de las 2 opiniones antes mencionadas tienen los fundamentos necesarios para localizar estos lugares mitológicos. El punto de mi reflexión es que, en el municipio de Misantla, Veracruz, o como también se le es llamada “La ciudad de los venados” se encuentra un poblado a unos escasos 20 minutos de una ranchería llamada Morelos, dentro de la cual existen un viejo asentamiento (supuestamente totonaca pero podría ser maya) llamado “Paxil”, el cual es un centro arqueológico poco reconocido y cuyos misterios de su bellas pirámides están aún sin descifrar. La pregunta es, ¿podría ser éste el lugar mitológico sobre el que hablaban los antiguos indios quichés?, ¿podría ser éste el lugar de donde provienen las mazorcas amarillas y blancas y por ende el indicio del hombre según las antiguas historias del Quiché? Como mencioné con anterioridad, Paxil significa, separación, extención de las aguas y Cayalá, puede interpretarse como podredumbre de aguas. La conclusión a la que llego es que esta región llamada Paxil en el municipio de Misantla, Veracruz, podría ser la que menciona el libro, pues también tiene un río que irriga las tierras aledañas, el cual también se divide en varios brazos (como el Usumacinta). Las aguas podredumbres se pueden interpretar como aguas inmóviles, estancadas, inertes, dicho de manera coloquial “aguas sin movimiento”, que de manera coherente pueden interpretarse como, lagunas, lagos o aguas termales. Como vecino de la ranchería de Morelos (donde se encuentra Paxil), tenemos a la ranchería de Moxillón, que misteriosamente tiene como centro recreativo y eco turístico unas bellas aguas termales. La pregunta relevante sobre todo esto sería, ¿serán Paxil y Moxillón las famosas ciudades mitológicas descritas en el Popol Vuh? La segunda reflexión que tengo, no es respecto al libro, sino respecto a la gente que mal interpreta las ideas de éste. El Popol Vuh tiene una estrecha relación con la antigua civilización maya y su calendario. Últimamente se han expuesto cientos de teorías relacionadas con el calendario maya, el fin del mundo y el Popol Vuh, que traen consigo miedo en la población (una minoría) y abundantes excedentes sobre las utilidades de las empresas que publican las revistas que hablan sobre dicho suceso. Como sabemos, los mayas eran unos excelentes matemáticos, astrónomos, físicos. Los mayas dividían el tiempo en segmentos: los Tzolkin de 260 días, los Haab de 365 días y los Katun de 144 mil días. Para los mayas, el mundo sólo iba a durar 5125 años, o sea, del 13 de agosto de 3114 a.C. al 23 de diciembre del 2012. Para los dioses mayas, el mundo funciona en espiral y cada mundo era destruido (el del hombre de barro, madera y paja) por alguna imperfección de los hombres, sin duda alguna, los hombres de maíz (el en mundo en que vivimos hoy en día) también tiene imperfecciones, lo que trae por consecuencia que los dioses destruyan este mundo según los mayas. La fecha exacta que dieron los mayas fue el 23 de diciembre del 2012, hemos aquí la polémica. La mala interpretación es que, el mundo no se destruirá o enfrentará un cataclismo, sino que sólo habrá un cambio de era, una era hacia un nuevo mundo, un nuevo hombre, donde los dioses buscarán seres más compasivos y religiosos. La profecía nunca hace referencia a una destrucción física y el Popol Vuh tampoco, simplemente la información es manejada a la manera de las masas para vender información falsa contenida en revistas que creemos “seguras”. RESEÑA El Popol Vuh es un libro fascinante que habla sobre la creación del hombre y del mundo según los ideales de estos antiguos indígenas del Quiché. La idea principal del libro es que, los dioses siempre están en busca de la perfección, de la creación de un hombre que sepa adorarlos, invocarlos, dirigirse hacia ellos. El último hombre formado fue el hombre hecho con los granos de maíz blanco y amarillo. Otro punto que maneja el Popol Vuh, es la historia de dos hermanos semidioses que se enfrentan a distintos adversarios y sólo buscan una cosa: la venganza de sus padres asesinados por la gente de Xibalbá. La última parte habla sobre la forma en que vivían los antiguos indígenas quichés, su organización, guerras y reyes. Este libro es para aquellas personas que gusten de una lectura diferente y que sepan valorar la cultura de esta antigua civilización, sus creencias, mitos y leyendas.