1. CUESTIONARIOS Y PRUEBAS PROYECTIVAS
Dentro de los métodos de medición de la personalidad, ocupan un lugar especial los cuestionarios, también llamados inventarios de personalidad, y las pruebas proyectivas, cuyo máximo exponente lo tenemos en el famoso "Test de Rorschach”
A continuación se entrará en detalle en materia de pruebas proyectivas, describiendo las técnicas y se facilitará una información básica sobre cada una de estas técnicas:
20.1 Inventarios de personalidad.
Un método habitual de medición de la personalidad son los inventarios de personalidad, dirigidos a gran diversidad de rasgos. Unos tienen que ver con los intereses (por ejemplo, el cuestionario de interés vocacional); otros con el ajuste emocional, las relaciones sociales, actitudes o valores.
Un inventario consta de gran número de afirmaciones o preguntas, a las que se responde con una o varias categorías especificadas, como "de acuerdo", "no de acuerdo", "me gusta" o "no me gusta". La puntuación en una determinada dimensión no se basa en la respuesta a un solo elemento, sino a varios, que, tomadas en conjunto constituyen la escala destinada a medir el rasgo en cuestión. Un inventario proporciona medidas de una docena o más de rasgos al mismo tiempo.
Hay dos métodos muy diferentes de establecer el sentido en que han de puntuarse las respuestas a los elementos:
• En el método "a priori", el autor del test idea elementos cuyos significados indican claramente, por sí mismos, cómo se han de puntuar.
• En el método empírico, se establece la forma en que se ha de puntuar el elemento probando previamente una gran colección de elementos según dos grupos de criterios que se sabe que son altos y bajos en el rasgo en cuestión. Los elementos en que difieren significativamente las respuestas de los dos grupos, se incluyen en la escala final del inventario.
Los inventarios de personalidad han sido criticados por el hecho de que "posturas de respuesta" influyen substancialmente en sus
2. puntuaciones; por ejemplo, los sujetos tienden a estar de acuerdo con los elementos socialmente deseables, casi con independencia de su contenido.
Se han ideado métodos para corregir estas tendencias y aumentar la validez y, para ello, algunos inventarios de personalidad intentan excluir estos factores al seleccionar sus elementos. Una de las razones de que estas posturas de respuesta tiendan a actuar en las pruebas con inventarios de personalidad, es que el individuo es consciente de que está siendo examinado y, a menudo, conoce el evidente significado diagnóstico de un elemento determinado.
Por esta razón, resulta valioso disponer de medidas menos directas de rasgos de la personalidad, en las que la intención de la prueba sea menos evidente al individuo. Una de estas posibilidades está constituida por las denominadas "técnicas proyectivas".
20.2 Pruebas proyectivas.
Las técnicas proyectivas se utilizan principalmente para llegar a aspectos más profundos y sutiles de la personalidad, La esencia de estas técnicas consiste en la presentación de materiales-estímulo poco estructurados o ambiguos a los que el individuo debe responder.
A este respecto, hay que recordar que la postura mental tiene una influencia mayor sobre la percepción de un estímulo poco estructurado que sobre la de uno bien estructurado. En consecuencia, se admite que:
• los materiales-estímulo poco estructurados o ambiguos fomentan un grado de "proyección" de las tendencias profundas del sujeto mayor que los métodos más directos, y
• al percibir e interpretar los estímulos, el sujeto no se da cuenta de lo que revela.
Entre las pruebas proyectivas más usadas están la de manchas de tinta, de
Rorschach, y la de apercepción temática.
Prueba de Rorschach.
Esta utilizadísima técnica proyectiva, ideada en 1911 por el psiquiatra suizo Rorschach, consiste en la presentación de diez manchas estándar de tinta, unas en blanco y negro y otras en color.
Se pide al sujeto que describa las diversas cosas que ve en las manchas y las respuestas se puntúan en varias categorías relativas:
1º) A la localización en la mancha de la cosa vista.
3. 2º) A la característica del estímulo a la que se da más importancia (por ejemplo forma, color, matiz, textura o movimiento),
3º) Al contenido de lo percibido (por ejemplo animal, ser humano, objeto inanimado, etc.), y
4º) A la originalidad de la respuesta.
Estas diversas puntuaciones se toman como indicadores de tendencias específicas. Por ejemplo, ver la mancha como un todo se considera indicación de tendencias a la abstracción y a la teoría, en tanto que la concentración en muchos detalles de las manchas indica atención compulsiva a cosas triviales. Las respuestas de "color" se consideran relacionadas con la expresión emocional y las de "movimiento humano" con la riqueza de la vida interior.
Las razones entre las distintas puntuaciones se consideran también de gran valor diagnóstico. La razón elevada entre las respuestas de color y las de forma se interpreta como señal de una tendencia al comportamiento emocional desenfrenado. La razón elevada entre las respuestas de movimiento humano y las de color, como indicadora de una
tendencia retraída e introvertida, y así sucesivamente.
Aunque la puntuación del Rorschach es más o menos estándar, la interpretación no lo es. Requiere un examinador muy hábil que interprete la información de todo el conjunto de puntuaciones y que llegue a la concepción de la estructura de la personalidad. Estas concepciones son intuitivas y las mismas puntuaciones son interpretadas de manera muy distinta por los diferentes examinadores.
Además, las respuestas tienen diversa significación para personas de diferentes culturas, por lo que de alguna manera queda en entredicho la validez de la técnica. Sin embargo, aunque los estudios dedicados a esta cuestión muestran resultados contradictorios, la prueba continúa usándose con amplia difusión.
Test de apercepción temática.
Esta técnica es otra prueba proyectiva muy utilizada.
Conocida como "TAT", fue ideada por Morgan y Murray (1935) con el propósito de medir las diversas "necesidades psicológicas" postuladas por la teoría de la personalidad de Murray.
4. Esta teoría sostiene que en toda persona se encuentran, en algún grado, unas veinte "necesidades":
Humillación
Logro
afiliación agresión autonomía oposición
defensa deferencia dominancia
exhibición
evitación del daño evitación de la humillación filantropía
orden
juego repudio sensualidad sexo
socorro y
entendimiento.
Murray supone, además, que las cuantías relativas de las necesidades y la forma en que éstas se organizan durante el desarrollo del individuo, es lo que caracteriza su personalidad.
El TAT consta de una serie estándar de veinte imágenes que representan escenas simples de significado ambiguo, como por ejemplo una vieja mirando por detrás del rostro de una joven, o un hombre con la cabeza inclinada al lado de un lecho, en el que está tendida una mujer a medio vestir, etc.
Se pide al sujeto que invente un relato acerca de cada imagen, indicando lo que sucede, cómo se ha producido y lo que va a pasar después.
Estos relatos son analizados por un perito en TAT, que busca ciertas concordancias y temas recurrentes en la índole de los asuntos, en los tipos de los protagonistas o en el género de los desenlaces. Estas características de los relatos se supone que revelan aspectos importantes de las necesidades, actitudes, conflictos, identificaciones y concepción de sí mismo del individuo.