1. La iniciación cristiana se realiza mediante el
conjunto de tres sacramentos: el Bautismo,
que es el comienzo de la vida nueva; la
Confirmación que es su afianzamiento; y la
Eucaristía que alimenta al discípulo con el
Cuerpo y la Sangre de Cristo para ser
transformado en El.
2. El Bautismo constituye el nacimiento a la vida nueva
en Cristo. Según la voluntad del Señor, es necesario
para la salvación, como lo es la Iglesia misma, a la
que introduce el Bautismo.
El rito esencial del Bautismo consiste en sumergir en
el agua al candidato o derramar agua sobre su
cabeza, pronunciando la invocación de la Santísima
Trinidad, es decir, del Padre, del Hijo y del Espíritu
Santo.
3. El Evangelio de san Mateo, en el capítulo 3, versículos 13 a 17, nos narra el episodio del
Bautismo de Jesús, momento en el que Él se manifiesta como enviado del Padre y
comienza su vida pública:
En aquel tiempo, fue Jesús de Galilea al Jordán y se presentó a Juan para que lo
bautizara. Pero Juan intentaba disuadirlo, diciéndole: -Soy yo el que necesito que tú me
bautices, ¿y tú acudes a mí-?
Jesús le contestó: -Déjalo ahora. Está bien que cumplamos así todo lo que Dios quiere.-
Entonces Juan se lo permitió. Apenas se bautizó Jesús, salió del agua; se abrió el cielo y
vio que el Espíritu de Dios bajaba como una paloma y se posaba sobre él. Y vino una voz
del cielo que decía: -Éste es mi Hijo, el amado, mi predilecto.-
Jesús se encuentra en el río Jordán, en Galilea, con Juan el Bautista y comienzan a
hablar. Jesús le pide que lo bautice, pero Juan se resiste: -¿y tú acudes a mí?-... No Jesús
-pensaría Juan- soy yo el que necesita ser bautizado por Ti, soy yo el necesitado de tu
perdón, el pecador.
4. 1. La fiesta de hoy, con la que concluye el tiempo navideño, nos brinda
la oportunidad de ir, como peregrinos en espíritu, a las orillas del
Jordán, para participar en un acontecimiento misterioso: el bautismo de
Jesús por parte de Juan Bautista.
2. También este año tengo la alegría de administrar, en una
circunstancia tan significativa, el sacramento del bautismo a algunos
recién nacidos. Saludo a los padres, a los padrinos y madrinas, así
como a todos los parientes que los han acompañado aquí.
3. El bautismo cristiano, corroborado por el sacramento de la
confirmación, hace a todos los creyentes, cada uno según su vocación
específica, corresponsables de la gran misión de la Iglesia.