Los metales y no metales tienen propiedades distintivas. Los metales son buenos conductores del calor y la electricidad, son brillantes y pueden ser golpeados en láminas delgadas. Los no metales no conducen bien el calor y la electricidad, no son brillantes y no pueden ser golpeados en láminas delgadas. Algunos ejemplos de metales son el oro, plata y cobre; ejemplos de no metales son el azufre, fósforo y carbono.