La estética se refiere principalmente a la apariencia y lo que captamos con los sentidos, mientras que la ética se centra en lo que nos conviene como especie para nuestra supervivencia. Aunque la estética y la ética a menudo están relacionadas, no son lo mismo, ya que la ética se basa en más que solo la belleza o fealdad de una acción y puede modelizarse con la teoría de juegos.