2. CAUSAS COMUNES DE LA DISFUNCIÓN ERÉCTIL
Entre las múltiples causas que pueden producirla, se pueden encontrar varios tipos.
Normalmente las causas físicas tienden a ser más comunes en los hombres de
mayor edad y las psicológicas en hombres más jóvenes.
De tipo psicológico: la presión a la que muchas veces los hombres se sienten
sometidos y el miedo a no lograr una erección lo suficientemente firme, les puede
llevar a padecer estrés, ansiedad o depresión.
Estos problemas u otros de tipo laboral, social o familiar pueden afectar al acto
sexual ya que implican que no se centre la atención en el propio acto y causan una
lesión en los nervios que deteriora el flujo de sangre al pene y puede causar
disfunción eréctil. Por lo tanto, los fracasos y los sentimientos negativos afectan de
manera muy directa. Algunos estudios realizados han determinado que también
puede asociarse a un deseo sexual hiperactivo o falta completa de deseo sexual.
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3. De tipo físico: Algunas enfermedades cardiacas y de la tiroides, tener hipertensión
arterial, sobrepeso, variaciones en los niveles de colesterol o diabetes pueden
llevar a este problema debido a que interfiere en la acumulación de sangre
necesaria en el pene para que se produzca la erección. Estas causas físicas hacen
que la sangre que llega al pene sea insuficiente.
Dentro de esta categoría también afectan las causas neurológicas que interfieren
en las señales nerviosas que producen la erección. Esto suele ocurrir con la
esclerosis múltiple, lesiones de la médula espinal o intervenciones quirúrgicas en la
pelvis.
La falta de hormonas sexuales masculinas es algo poco frecuente pero que también
puede causar la DE.
Los hábitos nocivos como fumar, el consumo de alcohol o cocaína son las causas
más conocidas y más comunes. Otros como la falta de ejercicio, la inapetencia o el
insomnio también provocan DE.
De tipo farmacéutico: es una de las causas más desconocidas. Existen muchos
medicamentos para tratar la depresión, antihistamínicos, antihipertensivos,
analgésicos, diuréticos o tranquilizantes entre otros, cuyos efectos secundarios
inducen las alteraciones sexuales.
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