TUTORIA II - CIRCULO DORADO UNIVERSIDAD CESAR VALLEJO
Enfrentando la vida
1. ENFRENTANDO LA VIDA
(Extractado de
www.RenuevoDePlenitud.com)
Fuimos hechos para conquistar el
ambiente, resolver problemas, alcanzar
metas y no hallamos real satisfacción o
felicidad en la vida sin obstáculos que
vencer o metas que alcanzar. -Maxwell
Maltz en Psico-Cibernética (1960).
Siempre he enfrentado la vida de frente porque no he tenido otra
opción. Recibí un temprano empujón cuando, a la edad de ocho
años, perdí a mi padre. Desde entonces, mi vida ha sido una
lucha. Fui criado por mi madre, una viuda que no tenía ni
educación ni recursos financieros, pero sí un gran corazón. Mi
madre es una mujer maravillosa. Me beneficié grandemente por el
pozo sin fondo de su sabiduría. Mamá inspiró en mí sólidos
valores morales y espirituales y la virtud del trabajo duro.
Mi madre es la influencia más duradera y profunda en mi vida.
Ella vendió sus propiedades para enviarnos a mí y a mi hermano a
la escuela. Sus metas eran sencillas; quería que yo llegase a ser
alguien, que llegase a lugares que ella nunca se atrevió a soñar,
por lo que, cuando dejé la escuela secundaria le prometí que haría
de mi vida un milagro, venciendo toda adversidad. Aquella
promesa ha sido mi motivación.
A los 10 años ya había adquirido el deseo de superarme
vendiendo agua helada y galletas en las calles de Lagos para
mantener a mi madre. Lo mejor que me ocurrió fue crecer, como
dicen, "del otro lado de los rieles", sin el privilegio de padres
pudientes. Todo lo que quise tuve que luchar para obtenerlo. En
vez de freno, esto fue una genuina ventaja para mí.
2. Hoy, le agradezco a Dios que aquellos tiempos sean ya historia.
Pero hubo tiempos en los que, como dice la canción, "estuve tan
abajo que cualquier cosa me parecía arriba". En ningún punto de
mi vida, abajo en el valle o saboreando logros, llegué a pensar que
sería fácil. En vez de esperar que la vida nos conceda un camino
fácil, entremos en el flujo de la vida y tomémosla como se nos
viene, comprendiendo que habrá tiempos difíciles que probarán
nuestra alma y buenos que nos animarán.
En la vida necesitamos fe para enfrentar la vida de frente. En vez
de levantar la bandera blanca de rendición, proyectar nuestra ira o
tomar la ruta de menor resistencia, enfrentemos el desafío de
frente con nuestra fe en Dios.
Marcus Garvey dijo una vez: "Algunos de nosotros parecemos
aceptar la posición fatalista, la actitud fatalista, que el Creador nos
concedió una cierta posición y condición y por lo tanto no hay
necesidad de intentar de vivir de otra manera". Sus palabras
introdujeron un ensayo de los escritores Dennis Kimbro y
Napoleon Hill, quienes escribieron sobre hombres negros que
enfrentaron desafíos en el libro "El Hermano: La Odisea del
Hombre Negro en América - Una Antología".
"En la vida de todos llega un tiempo de desafío -un tiempo
cuando todos nuestros recursos son probados. Un tiempo en que
la vida parece injusta. Un tiempo cuando nuestra fe, nuestros
valores, nuestra paciencia, nuestra compasión y nuestra habilidad
de perseverar son estiradas al límite y más allá. Algunos han
utilizado tales pruebas como una oportunidad para crecer; otros se
han volteado y permitido que estas experiencias destruyan sus
esperanzas".
La vida lanzará tantas cosas en nuestro camino. Son hitos que le
dan sentido a nuestra travesía, eventos que no sólo moldean
nuestra vida sino la manera en que la percibimos.
Hoy, el muchacho que luchaba en las calles de Lagos y que
apresuró el lanzamiento de un álbum al intentar hacerse de un
nombre en el mundo del espectáculo, ha llegado a ser un hombre
3. con los pies bien plantados en su sueño, impulsado por la firme
determinación de una madre y su fe en Dios.
Así que cuando las cosas se pongan difíciles, cuando la situación
se vea incierta, no temamos. Sigamos adelante. Aferrémonos a
nuestra fe con la animadora seguridad divina que todo estará bien.
Nos vemos pronto en la cima.
Dayo Olomu, conferencista motivacional y empresario de medios
residente en Londres
Recordemos que nuestra vida está en las manos de Dios y él
trabaja cada instante y en cada circunstancia que rodea nuestra
vida aunque no lo entendamos en el momento.