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Colegio tecnico agropecuario cotogchoa bullying 1
1.
2. El acoso escolar (también conocido como hostigamiento
escolar, matonaje escolar, matoneo escolar o por su
término en inglés bullying) es cualquier forma
de maltrato psicológico, verbal o físico producido
entre escolares de forma reiterada a lo largo de un tiempo
determinado tanto en el aula, como a través de las redes
sociales, con el nombre específico de cibercicoso.
Estadísticamente, el tipo de violencia dominante es
el emocional y se da mayoritariamente en el aula y patio de
los centros escolares. Los protagonistas de los casos de
acoso escolar suelen ser niños y niñas en proceso de
entrada en la adolescencia a, siendo ligeramente mayor el
porcentaje de niñas en el perfil de víctimas.
3. El Bullying es el maltrato físico y/o psicológico
deliberado y constante que recibe un niño por parte de
otro u otros, que se comportan con él cruelmente con
el objetivo de someterlo y asustarlo. El bullying implica
una repetición continuada de las burlas o las
agresiones y puede provocar la exclusión social de la
víctima.
4. Físico: Empujones, patadas, agresiones con objetos,
etc. • Verbal: Insultos y apodos, menosprecios en
público, resaltar defectos físicos, etc.
Es el más habitual. • Psicológico: Minan la autoestima
del individuo y fomentan su sensación de temor. •
Social: Pretende aislar al joven del resto del grupo y
compañeros.
5. Los padres deben estar atentos a los siguientes aspectos, que pueden ser
indicios de que su hijo está siendo víctima del acoso escolar:
Cambios en el comportamiento del niño. Cambios de humor.
Tristeza, llantos o irritabilidad.
Pesadillas, cambios en el sueño y/o apetito.
Dolores somáticos, dolores de cabeza, de estómago, vómitos...
Pierde o se deterioran de forma frecuente sus pertenencias escolares o
personales, como gafas, mochilas, etc.
Aparece con golpes, hematomas o rasguños y dice que se ha caído.
No quiere salir ni se relaciona con sus compañeros.
No acude a excursiones, visitas, etc. del colegio.
Quiere ir acompañado a la entrada y la salida.
Se niega o protesta a la hora de ir al colegio.
6. La relación de los alumnos/as en los pasillos y en el patio. Los peores
momentos se sufren cuando los profesores no están presentes.
Las "pintadas" en las puertas de baños y paredes (qué nombres aparecen
habitualmente).
La no participación habitual en salidas de grupo.
Las risas o abucheos repetidos en clase contra determinados alumnos o
alumnas.
Las faltas constantes a clase, ya que pueden indicar que no quieren acudir
a clase por miedo.
Estar atentos a los alumnos que sean diferentes, por su forma de ser o
aspecto físico.
Se queja de forma insistente de ser insultado, agredido, burlado...
7. En la familia
La familia es la principal fuente de amor y educación de los
niños; a partir de ella el niño aprende a socializarse basado
en lo valores, normas y comportamientos enseñados en
casa; evitemos que nuestro hogar se convierta en un
escenario hostil o por el contrario demasiado permisivo,
tenga por seguro que esto siempre llevará a que los niños
adquieran conductas agresivas.
Estos cursos le dan atención especial a la inteligencia
emocional, es decir enseñan a los padres como ayudarle a
sus hijos a controlar sus emociones y comportamientos
hacia los demás de tal manera que puedan convivir
sanamente.
8. La disciplina que se mantenga en el salón y la escuela en
general es fundamental para la construcción de una buena
conducta.
Es importante la supervisión de los alumnos dentro y fuera
de los salones, en los patios, baños, comedores, etc.
Establecer claramente las reglas de la escuela y las acciones
que se tomarán en conductas como el bullying.
Actuar rápido, directa y contundentemente en el caso de
que se presente alguna sospecha de acoso escolar.
Realizar cursos o conferencias para padres y maestros
donde se puedas tratar temas como el bullying.
Adicionar o reforzar el tema de educación en los valores en
el curso de los estudiantes.
9. Los niños son muy dados a ver programas
de acción y violencia y aunque no lo
creamos éstos influyen demasiado en su
comportamiento. Los medios masivos de
comunicación deben ser más concientes de
ello y controlar más los contenidos que
emiten o publican.
La sociedad en general también puede
ayudar a prevenir y atacar el acoso entre los
niños, vigilando y no dejando pasar este
tipo de suituaciones porque pensamos se
trata de una simple broma.
Cuando un niño se burla, amenaza o pega a
otro niño, se debe intervenir para que eso
no se repita.