2. La Península era esa bella tierra desconocida a la que
todos pretendían llegar. Los rumores hablaban de ella
como una tierra fértil y de incalculables tesoros. Los
cartaginenses fueron los primeros que la pusieron en el
punto de mira, intentando conquistarla. Los romanos se
fijaron en ella, y como no, también desearon poseerla, y
estos le pusieron el nombre de Hispania.
3. Como no podía ser de otro modo, nuestra Hispania fue la
causa de una guerra, la Segunda Guerra Púnica, el
conflicto mundial del momento, lo que sería el nacimiento
de Europa.
Veamos como empezó nuestra Historia:
4. Roma llega a Hispania para luchar contra Cartago.
Cartago disponía de una mayor experiencia naval pero los
romanos tenían mejores tropas de construcción, por lo que
añadían elementos estratégicas en los barcos para poder
inmovilizar a los cartagineses y confiarse la victoria.
5. Cartago, en un momento dado, pone su atención en la
Península Ibérica, donde posteriormente se asientan y se
disponen a controlar el mayor número posible de recursos.
6. Para mantener la paz entre los romanos y los cartagineses
pactan un acuerdo que establece el Ebro como frontera,
pero por el afán de querer ser mejores, los cartagineses
conquistan otra ciudad (Sagunto)
7. Los romanos, recelosos de los avances de los
cartagineses toman Sagunto como lugar para declarar la
guerra, y así comienza la segunda Guerra Púnica.
8. Durante esta guerra, los romanos logran conquistar gran
parte de la Península Ibérica.
9. Las duras condiciones impuestas por Roma provocaron la
pérdida de todas las posesiones de Cartago y la
prohibición de declarar nuevas guerras sin el permiso del
pueblo romano.
Cartago aceptó las condiciones, a fin de que los romanos
le dejaran en paz mientras reconstruían su imperio y
poderíos perdidos en esta Guerra.