Este documento resume los 30 capítulos de un libro sobre el juicio final de Dios. Describe cómo Dios juzga a los vivos y a los muertos, con los justos recibiendo vida eterna en el cielo y los malos siendo condenados al fuego eterno. También habla sobre la resurrección de los cuerpos, el reinado de mil años de Cristo y los santos sobre la tierra, y la llegada y derrota final del anticristo y Satanás. El documento cita numerosos pasajes bíblicos del Antiguo y Nuevo
1. JUICIO FINAL
Aunque Dios en todos tiempos juzga, en este libro
señaladamente se trata de su último juicio.
Habiendo de tratar del último día del juicio de Dios, con los
eficaces auxilios del
Señor, y de confirmarlo y defenderlo contra los impíos e
incrédulos, debemos
primeramente sentar, como fundamento sólido de tan elevado
edificio, los testimonio divinos.
2. Capitulo I
La iglesia confiesa y aprueba al verdadero Dios como: Cristo ha de descender de los cielos a
juzgar a los vivos y a los muertos, éste será el último día del divino juicio, es decir, el último
tiempo.
Dios, juzga al presente, y desde el principio de la creación del hombre juzgó, desterrando al
Paraíso y privando el fruto que producía el árbol de la vida a los primeros hombres, por la
enorme culpa que cometieron.
Juzga también, no sólo al linaje de los demonios y de los hombres, condenándolos a que sean
infelices, por el mérito de los primeros pecadores, si no las obras propias que cada uno hace
mediante el libre albedrío de su voluntad.
Capitulo II
- Ignoramos por el juicio de Dios el que es bueno es pobre, y el que es malo es rico.
- Hace una diferencia de los malos y los buenos, los malos que tengan suerte mientras que los
buenos no la tengan, él se refiere principalmente a todo lo contrario.
-nos da saludables documentos para que no estimemos los bienes o los males que vemos, para
que busquemos los bienes que son propios de los buenos y huyamos de aquellos que son malos.
3. Capitulo III
Salomón (rey de Israel) dijo que en el libro del «Eclesiastés» las cosas que son comunes en esta
vida.
Este libro es uno de los que tienen los judíos comprendidos en el Canon de los libros sagrados:
“Vanidad de vanidades, y todo vanidad”; se queja, en cierto modo, de que «haciendo tanta ventaja
la sabiduría a la ignorancia cuanta la hace la luz a las tinieblas y siendo el sabio perspicaz y
prudente y el necio e ignorante ande a oscuras a ciegas con todo, todos corran una misma fortuna
en esta vida que se pasa debajo del sol».
El fin es que deseemos aquella vida que no tiene vanidad debajo del sol, sino que tiene y
manifiesta la verdad debajo de aquel que crió este sol. “Teme aDios y guarda sus mandamientos,
porque esto es ser un hombre cabal y perfecto, pues todo lo que pasa en la tierra, bueno o malo, lo
pondrá Dios en tela de juicio, aun lo más despreciado”.
Capitulo IV
Para tratar el juicio final de Dios se agregaran, primero los testimonios del Testamento Nuevo, y
después, los del viejo entre éstos se numeran la ley y los profetas.
San Pablo dice: “que por la ley se nos manifestó el conocimiento del pecado; pero que ahora sin la
ley se nos ha demostrado la justicia de Dios”.
4. Capitulo V
En este capitulo hay dos cosas que nos enseña : “Vendrá el día del juicio, y este vendrá con la
resurrección de los muertos”.
Habla con los discípulos y dice: “El que siembra la buena semilla es el hijo del hombre, y el campo en
este mundo. La buena semilla son los hijos del reino, y la cizaña es el demonio; la cosecha es la
consumación y fin del siglo, y los segadores los ángeles; así, pues, como se coge la cizaña y la queman con
el fuego, así sucederá en el fin del siglo.
Capitulo VI
En este capitulo habla de la resurrección y dice que los muertos oirán la voz del Hijo de Dios, y los que la
oyeren vivirán, la primera resurrección habla de que: “Ha venido la hora, y es ésta en
que estamos», la cual no es la de los cuerpos, sino la de las almas, puesto que igualmente las almas
tienen su muerte en la impiedad y en los pecados.
Existen dos resurrecciones la cual la primera hace referencia a la misericordia, mientras que la otra
hace referencia al juicio.
Capitulo VII
De los mil años de que se habla en el Apocalipsis de San Juan, dice que estas dos resurrecciones hablan
de tal manera en el libro de su Apocalipsis el evangelista San Juan, muchos las han llegado a convertir
en fábulas ridículas.
Los otros muertos no volverán a la vida hasta que sean cumplidos dos mil años; ésta es la primera
resurrección; la segunda muerte no tiene poder en ellos, y ellos serán sacerdotes de Dios y de Jesucristo,
con quien reinarán mil años.
El mismo Jesucristo, dice: «Ninguno puede entrar en casa del fuerte y saquearle su hacienda, sino
atando primeramente al fuerte.
5. Capitulo VIII
Sobre, atar y soltar al demonio “Después de éstos, le soltarán, dice, por un breve tiempo”. Si
el estar amarrado y encerrado es, no poder engañar a la Iglesia, el soltarle, tampoco lo será
ya que no la engañara.
El demonio, suelto, vendrá por todas las gentes que han engañado a la Iglesia.
El propósito de este capitulo es que el demonio nunca lograra engañar a la iglesia por nada
del mundo.
Capitulo IX
El reino consiste en que reinarán los santos con Cristo por mil años, ya que está
amarrado el demonio por mil años, los santos de Dios reinarán junto con Cristo.
Reinaran con el Señor los que están conformes en su reino.
En la ecritura existe la potestad de jugar que dice: “Lo que ligaréis en la tierra será también atado
en el cielo, y lo que desatareis en la tierra será también desatado en el cielo”.
Capitulo X
La resurrección sólo pertenece a los cuerpos y no a las almas.
Si la resurrección es de los que caen, y caen también las almas, sin duda debemos ceder las almas
que resucitan.
La muerte no tiene poder.
6. Capitulo XI
De Gog y de Magog, dicen que en mil años, soltarán a Satanás de su cárcel y saldrá a engañar a
las gentes que habitan en los cuatro extremos de la tierra.
Satanás saldrá de los, ocultos escondrijos, de los odios y rencores saldrá en público á
perseguir la Iglesia siendo ésta la última persecución por acercarse ya el último y final
juicio.
Capitulo XII
“Descendió fuego del cielo y los consumió”, éste no es el último castigo.
Si a este castigo, llama fuego que desciende del cielo, y que los consume”, esto es lo
ultimo que han de padecer después de la resurrección de los cuerpos.
Capitulo XIII
Los santos con su Rey reinarán durante la persecución, venciendo y superando
males y calamidades cuando el demonio no este atado.
Los sacerdotes de Dios y de Cristo reinarán con el Señor mil años.
Cumplidos los mil años soltarán a Satanás de su cárcel.
Capitulo XIV
Condenación del demonio con los suyos.
Se dice que se abrieron libros, y que en este libro se muestra la vida de cada uno; los
libros que puso en primer lugar deben entenderse como los sagrados, así los del Viejo
como los del Nuevo Testamento, para que en ellos se registren los mandamientos y
preceptores que Dios mandó guardar.
A la virtud divina la llamaron: Libro.
7. Capitulo XV
Los muertos acá, su vida está escondida con Cristo en Dios.
Dejen a los muertos que entierren sus muertos, quienes pueden ser llamados también muertos, porque
traen cuerpos mortales.
El cuerpo está muerto por el pecado, pero el alma vive por la justificación.
Capitulo XVI
Los malos irán a los tormentos eternos; mientras que los justos Irán a la vida eterna.
Condeno a los que no se hallaron escritos en el libro de la vida y los echo al fuego eterno.
Capitulo XVII
De la glorificación, de la Iglesia sin fin después de la muerte.
Si decimos que no tenemos pecado, nos engañamos a nosotros mismos, y por lo tanto no está la
verdad en nosotros.
Capitulo XVIII
El apóstol San Pedro dice, sabed que en los últimos tiempos vendrán impostores que seguirán
sus propias pasiones.
El dia del señor vendrá como un ladrón, los cielos pasarán con grande ímpetus, los elementos
se disolverán por el calor del fuego.
existirá la perdición de los hombres por el trastorno tan singular y terrible que
experimentarán.
8. Capitulo XIX
Manifestación del anticristo.
El Señor quitará la vida con el aliento de su boca, deshará con el resplandor de su presencia
a aquel que venga con el poder de Satanás.
Han existido muchos herejes a los que han llamado anticristo y sin serlo.
Dios enviara un espíritu erróneo, para que crean a la mentira y a la falsedad.
Los engañados serán juzgados con el último y manifiesto juicio por Jesucristo.
Capitulo XX
Resurrección de los muertos.
Nos enseñan, la resurrección que debe haber de los muertos cuando venga nuestro
Señor Jesucristo a jugar a los vivos y los muertos.
Al final todos resucitaremos; esto no será vivificado con la inmoralidad.
Cristo viene a juzgara a los vivos y a los muertos.
Capitulo XXI
El profeta Isaías dice: “Resucitarán los muertos, y resucitarán los que estaban en las
sepulturas, y se alegrarán todos los que están en la tierra; porque el rocío que
procede de ti les dará la salud, pero la tierra de los impíos caerá”. Esta pertenece a
la resurrección de los bienaventurados.
Resucitarán los que estaban en las sepulturas.
Con fuego ha de juzgar el Señor toda la tierra, y pasará a cuchillo toda la carne, y
será innumerable el número de los que herirá.
Existirá una nueva tierra y un nuevo cielo.
9. Capitulo XXII
Entenderemos la salida de los santos al ver las penas de los malos.
Entender el gozo de nuestro señor.
Dios estará y será todo en todos; Permanecerá, en aquella bienaventuranza la descendencia y
el nombre de los santos.
La descendencia de Juan permanecerá en él.
Isaías le dará un nombre eterno, y tendrán un mes después de otro y un sábado después de
otro sábado.
Se efectuará la división y distinción de los buenos y de los malos.
Capitulo XXIII
En este capitulo Daniel dice que llegara primero el anticristo.
Las cuatro bestias son cuatro reinos que se levantarán en la tierra, los cuales se desharán y
tomarán al fin el Reino los Santos del Altísimo, y lo poseerán para siempre por todos los
siglos.
El reino, la potestad y la grandeza de los reyes que hay debajo de todo el cielo se entregará a
los Santos del Altísimo.
Capitulo XXIV
Entenderemos que el fin del mundo, y el último y final del juicio de Dios se hallan en los
Salmos.
David dice que el Señor, estableció la tierra, y que los cielos son sus manos; también dice que
perecerán, pero él permanecerá, y todos envejecerán como la vestidura.
San Pedro dice que vendrá el día del Señor como un ladrón, y entonces los cielos pasarán con
grande ímpetu, los elementos se disolverán por el calor del fuego, y la tierra, con todo lo que
hay en ella, será abrasada.
10. Capitulo XXV
En este capitulo habla del profeta Malaquías o Malaquí, a quien llamaron Ángel.
El señor vendrá como fuego purificatorio y como la hierba o jabón de los que lavan. Y se sentará
como juez a acrisolar y a purificarlos.
Capitulo XXVI
Los santos ofrecerán sacrificios a Dios.
los judíos prometen el restablecimiento de sus sacrificios pasados conforme a la ley del Viejo
Testamento; ellos no ofrecían los sacrificios en justicia,sino en pecado.
Capitulo XXVII
Existe una diferencia de los premios y de las penas, en la se dividen a los justos de los
pecadores.
Existirá una división entre los malos y los buenos.
Capitulo XXVIII
Cristo, es el Juez que ha de hacer un apartamiento entre los buenos y los malos.
Los malos no serán felices y serán miserables; mientras que los buenos no sentirán miseria y
gozaran de una bienaventuranza eterna.
Capitulo XXIX
Los judíos creerán en el verdadero Cristo.
El corazón del hombre es su prójimo.
Cristo no es Dios ni hijo de Dios.
11. Capitulo XXX
Cuando leemos el viejo testamento, nos damos cuenta de que Dios ha de
venir a juzgarnos.
Cristo es el que ha de hacer el juicio final.
El eevangelista San Juan dice: “Que aun no había Dios dado su espíritu,
porque aun no se había glorificado Jesús”.
El señor ha dicho, procuraré destruir y acabar con todas las gentes que
vienen contra Jerusalén, derramaré sobre la casa de David y sobre los
moradores de Jerusalén el espíritu de gracia y misericordia.
Los hijos no mataron a Cristo ya que fueron los padres.
El padre juzgara por medio de la llegada del hijo del hombre.
Cristo ha de juzgar a todos y el es el que hará el juicio final, ya que el es el
todopoderoso.