3. La vida está en el aire
El bosque mesofilo es reconocido por su gran diversidad de fauna y flora, dos cosas tan vitales para el
bosque como para nosotros. En estos bosques se capta la mayor cantidad de agua por hectárea para uso
humano y económico, además evitan la erosión de suelo para poder cultivarlo. Son ecosistemas
drásticamente amenazados en México, aún sabiendo que albergan especies endémicas de nuestro país.
Todo gracias a la tala ilegal y al cambio de uso de suelo. ¿Te puedes imaginar un mundo sin estos
ecosistemas?
Foto: San Joaquín, Querétaro, México, 2018
4.
5. Siempre es mejor el horizonte
Peña de Bernal se encuentra a 2510 metros sobre el nivel del mar y aún así no se libra de la
irresponsabilidad de los humanos al tirar basura en su entorno. Es muy triste ver cómo la
gente no sabe valorar la naturaleza que tenemos y cómo no le dan importancia al daño que, al
fin y al cabo, nos estamos haciendo nosotros mismos.
Foto: Peña de Bernal, Querétaro, México, 2018
6.
7. La naturaleza siempre gana
Todos los seres vivos estan en constante evolución y esto permite su adaptación al medio ambiente. Al pasar
los años, el humano ha invadido la gran mayoría del planeta verde; a tal punto que ahora, en vez de que
nosotros nos adaptamos a la naturaleza, la naturaleza se adapta a nosotros. Esta foto es un claro ejemplo: el
humano coloca un alabre para así no dejar pasar a las personas; el humano, tratando de cuidar la naturaleza,
la dañó y ésta se curó cubriendo el alambre. Si el humano se extinguera, la naturaleza seguiría su camino,
pues el humano no es más que una especie como de muchas para este planeta, lo único que nos distingue es
que nosotros no le traemos ningún beneficio.
Foto: San Joaquín, Querétaro, México, 2018
8. ¿Por qué esperanza?
Porque aunque nosotros seamos la especie más dañina del planeta, sigue
habiendo unos pocos que quieren salvarlo, que tienen la esperanza de salvar
bosques tan frágiles y buscan que sea posible ver el horizonte; pues al final lo
último que muere es la esperanza.