2. Una noche los soldados alemanes ordenaron a todos los judíos que fueran con un
poco de ropa y de comida a la escuela del pueblo.
A nosotros también nos avisaron
Libro: páginas 14-15
3. Mamá me hizo
un vestido nuevo
Ya era de noche cuando mamá terminó
de coser
Estaba muy contenta. Giré con rapidez sobre la mesa. Mamá grito:
-”Cuidado, te vas a caer”. Pero yo seguí volando como una mariposa
4. Papá entró en casa.
“Debemos salir” dijo. El padre de Marisha me ha dicho que esta noche van
a expulsar a todos los judíos que aún quedan en el pueblo
No había tiempo para preguntas. Dejamos la casa y corrimos en dirección al bosque.
entramos en el corral de una casa y nos escondimos bajo la paja.
A la mañana siguiente vino la polaca dueña de la casa y nos dio de comer.
Era amiga de nuestra vecina y la convenció para que nos escondiese en el corral
a cambio de dinero.
Durante el día nos quedábamos
sentados en un pozo dentro
del corral.
Era el principio del invierno.
Libro: páginas 17-18
5. Prohibido moverse,
no pronunciar palabra,
respirar en silencio…
Libro: párrafo Pág. 18
6. Los alemanes no nos encontraron.
Regresé a mis padres,
al pozo del corral.
¡Quería tanto volar como
una mariposa…!!!
Libro: páginas 20,21,22…
6
7. Estábamos listas para empezar el viaje.
Papá me abrazo fuerte y me susurró: “
Janchke, iré a buscaros al final de la guerra”.
Nos separamos de papá con un llanto amargo.
Viajamos en tren hasta Varsovia.
Libro: página 22
7
8. Papá fue capturado en el bosque y muerto.
Por eso, no vino a buscarnos cuando terminó
la guerra, como había prometido.
9. La familia Skovronek vivía en el sexto piso.
Vivimos con ellos dos años.
Durante dos años no caminamos libremente por
el piso. Durante dos años no nos acercamos
a la ventana. Siempre gateábamos por debajo de ella.
Durante dos años Janka y Basha no trajeron amigas
a casa.
Estaba prohibido contarle a alguien que nosotras
estábamos en la casa.
Era el gran secreto.
Libro: páginas 24, 28-29
10. Por la ventana vi caer una bomba-me sorprendí. La bomba no era redonda
como yo lo imaginaba, tenía forma de una gran botella.
Nos quedamos acostadas hasta que terminó el bombardeo.
La señora Skovronek nos contó que todo el ghetto había sido incendiado y que
en él no quedaba ni un solo judío.
Libro: página 26
11. Fin de la segunda parte
Mª Concepción Feito Montero
Mª Dolores García Olivares