Aprendiendo a aprender

Resumen elaborado por Felipe Esmaragdo Machuca Zeferino
Aprendiendo a aprender: Poderosas
herramientas mentales con las que podrás
dominar temas difíciles
INTRODUCCIÓN AL CURSO
Nuestro cerebro tiene capacidades sorprendentes, pero no viene con un manual de instrucciones. Quizá el
mayor regalo que nuestro cerebro nos da es la capacidad de aprender cosas nuevas todos los días. Este
curso busca ayudarte a transformar la manera como piensas sobre el proceso de aprendizaje, para
ayudarte a aprender más profunda y eficazmente y con menos frustración. Estas percepciones se basan
en investigaciones sólidas en el área de la neurociencia y de la psicología cognitiva y también en la
experiencia de docenas de instructores y profesionales líderes en temas difíciles de aprender. Te puedes
beneficiar de estas ideas tanto si estás batallando en la secundaria como si estás enfrentando problemas
en matemáticas y ciencia a nivel universitario.
Encontrar una manera para compartir contigo estas ideas, simple y eficazmente, ha sido un gran desafío,
pero sentimos que ha valido la pena. Verás que muchas de estas ideas, aunque simples, son
increíblemente poderosas. Podrás ver cómo sueles engañarte a ti mismo creyendo que realmente
“conoces” el material cuando a veces no es así. Descubrirás formas nuevas de mantener la concentración
e incrustar el material más profunda y poderosamente en tu mente. Aprenderás a condensar ideas clave
sobre las que estés aprendiendo, para que puedas tenerlas a la mano más fácilmente… Este curso está
hecho para enriquecer tanto tu aprendizaje como tu vida. Así que, bienvenido al curso y un feliz
aprendizaje.
EL APRENDIZAJE CAMBIA EL CEREBRO
El cerebro pesa tres libras, pero consume diez veces más energía por peso que el resto del cuerpo. Es el
dispositivo más complejo que existe en el universo conocido.
Los cerebros evolucionaron para ayudarnos a navegar en ambientes complejos y la mayor parte del
trabajo pesado se realiza por debajo de nuestro nivel de conciencia.
Los psicólogos que estudian la mente inconsciente han hallado que entre las cosas que ejercer influencia
están los procesos de pensamiento, memoria, emociones y motivación.
Con las nuevas técnicas ópticas para obtener imágenes de las conexiones que hay entre las neuronas,
llamadas sinapsis, podemos ver como hay una rotación constante de sinapsis a medida que nuevas se
forman y otras desaparecen. De esta manera, el aprendizaje cambia la estructura del cerebro.
Esta es una imagen de una rama dendrítica de una neurona, la cual recibe contribuciones de otras neuronas. Las sinapsis son los
bultos espinosos que salen de la dendrita. La imagen de la parte superior de la dendrita se obtuvo antes del aprendizaje. La misma
dendrita se muestra abajo después del aprendizaje y después del sueño. Las múltiples sinapsis que se han formado
juntas recientemente en la misma dendrita están señaladas con las flechas blancas.

Esto ilustra que, curiosamente, después de haber dormido toda la noche, no eres la misma persona que
eras antes, ni siquiera después de una siesta. Es decir, nos acostamos con un cerebro y nos levantamos
con uno actualizado.
INTRODUCCIÓN A LOS MODOS ENFOCADO Y DIFUSO
Resulta que si entiendes solo un poco acerca de la información más básica de cómo funciona tu
cerebro, podrás aprender más fácilmente y con menos frustración. Los investigadores han descubierto que
tenemos dos modos de pensamiento fundamentalmente diferentes.
 Modo Enfocado: Es cuando nos concentramos intencionalmente en algo específico que
intentamos aprender o entender.
 Modo Difuso: Este estilo más relajado de pensamiento está relacionado con un conjunto de
estados de descanso neural. En este modo difuso de pensamiento, puedes ver las cosas más
ampliamente, desde un punto de vista mucho más amplio. Puedes hacer nuevas conexiones
neuronales que recorren nuevos caminos.
Utilizaremos una analogía del juego conocido como pinball para entender estos dos modos de
pensamiento (por cierto, las metáforas y las analogías son realmente útiles cuando intentamos aprender
algo nuevo). Entonces, aquí está el cerebro, aquí las orejas y los ojos mirando hacia arriba. Y podemos
ubicar la máquina de pinball allí dentro.
A la izquierda está la analogía para el modo enfocado. Los cojines azules de goma se encuentran muy
cerca entre sí. Lanzas un pensamiento y boom, rebota fácilmente. Vean como ese pensamiento rojo se
mueve fluidamente por toda la difusa vía neural anaranjada que está por debajo. Es como si estuviera
recorriendo una carretera familiar, bien pavimentada. Y después, mientras rebota contra los cojines azules,
logras resolver el problema que estás intentando solucionar o el concepto que estás intentando entender,
que está relacionado con algo que te es bastante familiar.
¿Y si el problema en el que estás trabajando necesita nuevas ideas o enfoques (patrón verde de la
imagen)? Conceptos en los que no has pensado antes ¿cómo vas a desarrollar un nuevo patrón de
pensamiento inicialmente? No sólo no sabes dónde está el patrón ni cómo luce, sino que tampoco puedes
explorar fácilmente con tantos cojines azules que están bloqueando tu acceso en cualquier dirección en la
que decidas moverte. Para llegar a un nuevo patrón de pensamiento, necesitas una nueva forma de
pensar, que está representada aquí por el modo difuso (parte derecha de la imagen).
Observa cuán separadas están los cojines de goma. El pensamiento rojo arranca, miren cómo se mueve y
rebota por todas partes. Puede viajar un largo trecho antes de que se interrumpa al golpear un cojín. En
este modo de pensamiento no puedes concentrarte tan fijamente como en el modo enfocado pero puedes
llegar al sitio en donde se va a consolidar el pensamiento y formar una nueva conexión neuronal (patrón
verde de la imagen izquierda). Además, en este modo difuso de pensamiento, puedes ver las cosas más
ampliamente, desde un punto de vista mucho más amplio.

Tal como lo entienden hoy en día los neurocientíficos, parece que no puedes estar en ambos modos de
pensamiento al mismo tiempo. El estar en uno de los modos parece que limita tu acceso al otro modo
de pensamiento.
LO QUE PRACTICAS SE VUELVE PERMANENTE
Las neuronas se van uniendo a través del uso repetido. Mientras más abstracto es algo, más importante
es practicar para convertir esas ideas en realidad para ti. Aunque las ideas que estés manejando sean
abstractas, los patrones neuronales de pensamiento que estás creando son reales y concretos. Al menos
lo son si los construyes y fortaleces mediante la práctica.
Cuando estas aprendiendo, lo que tienes que hacer es estudiar algo, estudiar duro concentrándote con
intención (modo enfocado). Después, haces una pausa, o al menos cambias tu foco hacia algo diferente
por un rato. Durante este rato de aparente relax, el modo difuso de tu cerebro tiene la oportunidad de
trabajar en el fondo y ayudarte a comprender conceptualmente. De cierto modo, a tu cemento neural le da
chance de secarse. Si no haces esto, sino que aprendes abarrotándote, tu base de conocimiento tendrá
apariencia desordenada y con una base confusa y pobre.

MEMORIA
Memoria de trabajo:
La memoria de trabajo es la parte de la memoria que tiene que ver con lo que estamos procesando
inmediata y conscientemente en nuestra mente. Nuestra memoria de trabajo está centrada en la corteza
prefrontal, aunque existen también conexiones a otras partes de nuestro cerebro, de modo que podamos
tener acceso a los recuerdos a largo plazo.
Muchas veces es necesario seguir repitiendo lo que estamos intentando aprender para que se quede en
nuestra memoria de trabajo. La repetición es necesaria para que los vampiros metabólicos, es decir, los
procesos disipadores naturales, no hagan desaparecer esos recuerdos. Entonces, sabemos que la
memoria a corto plazo (memoria de trabajo) es algo así como un pizarrón mental ineficiente.
Memoria de largo plazo:
La otra forma de memoria, la de largo plazo, es como un almacén de depósito. Y tal como un almacén, se
distribuye en una gran área. Los diferentes tipos de recuerdos a largo plazo se almacenan en diferentes
regiones del cerebro.
MEMORIA
Memoriade trabajo Memoriade largo plazo

La capacidad de almacenaje de la memoria a largo plazo es inmensa. Tiene espacio para billones de
asuntos. De hecho, pueda haber tantos asuntos que se pueden enterrar unos a los otros, haciendo difícil
que encuentres la información que necesites a menos de que la practiques y la repitas al menos algunas
veces. La memoria a largo plazo es importante porque allí almacenas los conceptos y técnicas
fundamentales que frecuentemente están involucradas en lo que sea que estés aprendiendo.
Cuando nos encontramos con algo nuevo, a menudo utilizamos nuestra memoria de trabajo para
manejarlo. Si deseamos mover esa información a nuestra memoria a largo plazo, a menudo hace falta
invertir tiempo y práctica. La investigación ha demostrado que para intentar convertir un recuerdo de corto
plazo en uno a largo plazo, necesitamos volver a visitar al menos varias veces para aumentar las
probabilidades de que lo podamos encontrar después cuando lo necesitemos. Para ayudar a éste proceso,
usa la técnica llamada repetición espaciada. Esta técnica involucra repetir lo que estas intentando
retener –una palabra nueva de vocabulario o una técnica para resolver problemas—, pero lo que hay que
hacer es espaciar esas repeticiones durante varios días… Extender su práctica durante varios días hace
una gran diferencia.
La investigación ha demostrado que si intentamos pegar cosas a nuestra memoria repitiendo algo 20
veces en una noche, por ejemplo, no se pegará tan bien como si practicamos la misma cantidad de veces
a lo largo de varios días.
LA IMPORTANCIA DEL SUEÑO EN EL APRENDIZAJE
Puede sorprender enterarse de que sólo estar despierto genera productos tóxicos en nuestro cerebro.
¿Cómo se deshace el cerebro de estos venenos? Resulta que cuando dormimos, nuestras células
cerebrales se encogen. Esto provoca un aumento en el espacio que hay en nuestras células cerebrales,
de esta forma los fluidos pueden fluir entre las células y llevarse las toxinas. El sueño es la forma en que
nuestro cerebro se mantiene a sí mismo limpio y saludable.
Pero el sueño hace mucho más que sólo permitir que nuestro cerebro elimine las toxinas. De hecho, es
parte importante del proceso de la memoria y del aprendizaje. Parece que durante el sueño, nuestro
cerebro pone en orden las ideas y conceptos que aprendemos y en los que pensamos. Borra las partes
menos importantes de los recuerdos y al mismo tiempo fortalece las áreas que necesitamos o deseamos
recordar.
También se ha demostrado que el sueño hace una gran diferencia en nuestra capacidad para resolver
problemas y para entender lo que estamos intentando aprender. Por supuesto, debemos también plantar
la semilla de nuestro modo difuso trabajando primero en el modo concentrado o enfocado.
Si repites lo que estás aprendiendo justo antes de tomar una siesta o de dormir por la noche, tienes una
mayor probabilidad de soñar con eso. Si vas más allá y mantienes en mente que quieres soñar con el
material, pareciera que aumentas aún más tus probabilidades de soñar con eso. Soñar con lo que estás
estudiando puede mejorar sustancialmente tu capacidad para entenderlo. De alguna manera consolida tus
recuerdos en fragmentos más fáciles de captar.

NOTA:
ESTE DOCUMENTO ES UN RESUMEN DEL MOOC
(Massive Open Online Course [curso online masivo abierto])
“LEARNING HOW TO LEARN: POWERFUL MENTAL TOOLS
TO HELP YOU MASTER TOUGH SUBJECTS”
(Aprender a aprender: poderosas herramientas mentales
para ayudarle a dominar temas difíciles).
HA SIDO ELABORADO POR FELIPE ESMARAGDO
MACHUCA ZEFERINO.
SI ALGUN TEMA NO LE RESULTA COMPRENSIBLE EN
ESTE RESUMEN PUEDE IR A LA FUENTE ORIGINAL A
CONSULTARLO:
https://www.coursera.org/learn/learning-how-to-learn

FRAGMENTANDO (Chunking)
Los fragmentos (chunks en ingles) son paquetes de información que se relaciona a través del significado o
uso. De esta manera, fragmentar es el proceso mental que te ayuda a unir pedazos de información a
través del significado.
Esa nueva unidad lógica hace que la información sea más fácil de recordar y también hace más fácil que
pase a formar parte de la imagen más grande de lo que estas aprendiendo.
Sólo memorizar un hecho sin comprensión o contexto no te ayuda a entender lo que realmente está
sucediendo ni cómo el concepto se ajusta a otros que estés aprendiendo.
Podemos tomar las letras PPO y vincularlas en un fragmento conceptual fácil de recordar, la palabra POP.
Es como convertir un pesado archivo de computadora en un archivo ZIP.
Por debajo de ese POP hay una sinfonía de neuronas que se han vinculado y han aprendido a cantar a
tono una con la otra. Los fragmentos son simplificadores de pensamiento; pueden ser acrónimos, ideas o
conceptos; son la base de gran parte de la ciencia, la literatura y el arte.
Básicamente un fragmento significa una red de neuronas que suelen dispararse juntas –que se han
relacionado— para que puedas tener un pensamiento o realizar una tarea suave y eficazmente.
“Fragmento”
(información relacionada o vinculada)
Información que tiene relación en
cuanto a significado pero aun suelta
Inf ormación no relacionada
(sin sentido)
Inf ormación relacionada
(con sentido)

Una vez que haces un fragmento, de una idea, un concepto o una acción, ya no necesitas recordar todos
los pequeños detalles subyacentes; tienes la idea principal –el fragmento—y eso es suficiente. Es como
vestirte por la mañana; sólo tienes un sencillo pensamiento: “me voy a vestir”, pero es sorprendente el
complejo espiral de actividades subyacentes que se llevan a cabo a partir de ese fragmento simple de
pensamiento. Los mejores fragmentos son los que están tan bien incrustados que ni siquiera tienes que
pensar conscientemente en conectar y unir el patrón neural.
CÓMO FORMAR UN FRAGMENTO (Chunk)
El primer paso para hacer fragmentos es simplemente concentrar TODA tu atención en la información que
quieres fragmentar o convertir en fragmento. Sí tienes la televisión haciendo ruido en el fondo, o sí revisas
cada pocos minutos tu teléfono o tus mensajes de computadora, se te va a hacer muy difícil hacer
fragmentos, porque tú cerebro en realidad no se está concentrando en fragmentar el nuevo material.
Cuando empiezas a aprender algo, estas haciendo nuevos patrones neurales y conectándolos con
patrones preexistentes que están desperdigados por muchas áreas del cerebro. Los nuevos patrones
neuronales no se pueden conectar bien a los preexistentes si alguna de las limitadas ranuras de tu
memoria de trabajo está ocupada en otros pensamientos.
El segundo paso para fragmentar es entender la idea básica que estás intentando fragmentar.
Los estudiantes a menudo pueden sintetizar la esencia, es decir, descifrar la idea o las ideas principales,
bastante naturalmente.
¿Puedes crear un fragmento si no entiendes? Sí, pero muchas veces es un fragmento inútil que no se
ajustará ni se relacionará con otros materiales que estés estudiando. No confundas un progreso en la
comprensión con experiencia solida: puedes entender una idea cuando la profesora la explica en clase,
pero si no la repasas bastante cerca del momento en que la aprendiste, puede parecerte incomprensible
cuando llegue el momento de prepararte para un examen. Sólo porque lo ves o incluso porque lo

entiendes, no quiere decir realmente que lo puedes hacer. Sólo hacerlo tú mismo te ayuda a crear los
patrones neurales que están por debajo de la verdadera maestría.
El tercer paso es entender el contexto, de modo que veas no sólo como, sino también cuando usar ese
fragmento. Contexto quiere decir ir más allá del problema inicial y ver con más amplitud, repetir y practicar
con problemas relacionados y no relacionados, de modo que puedas ver no sólo cuando usar el fragmento
sino también cuando no usarlo. En otras palabras, puede que tengas una herramienta nueva, pero si no
sabes cuándo usar esa herramienta, no te va a servir de mucho.
Darle un vistazo de dos minutos a un capítulo de un libro antes de empezar a estudiarlo, viendo las
imágenes y los títulos de las secciones, te puede permitir que tengas una idea del panorama general.
Una vez que hayas hecho esto, llena los detalles.
Aún si faltan algunas de las piezas de rompecabezas cuando termines de estudiar, podrás ver la imagen
grande o general. Este tipo de actividades te puede ayudar a saber dónde colocar los fragmentos que
estás construyendo, cómo se relacionan los fragmentos unos con otros.
Practicar y repetir te puede ayudar a construir y fortalecer cada fragmento, de modo que puedas acceder a
él siempre que lo necesites.
Para resumir, los fragmentos se construyen mejor: 1. con la atención concentrada, 2. entendiendo la idea
básica, y 3. practicando para que domines el tema y tengas una idea del contexto y del panorama general.
Lo mismo sucede si oyes una conferencia muy bien organizada.

IDEAS ESENCIALES PARA LOGRAR ORGANIZAR EL APRENDIZAJE
Recordar
Después que has leído el material, simplemente mira hacia otro lado, y verifica qué puedes recordar del
material que acabas de leer.
La investigación de Karpicke, publicada en el Journal Science, presenta evidencias sólidas en esa línea.
Los resultados fueron que en la misma cantidad de tiempo, con sólo practicar y recordar el material, los
estudiantes aprendieron más y a un nivel más profundo que con todos los demás métodos ; incluyendo
volver a leer el texto varias veces, así como dibujar mapas conceptuales, que enriquecen las relaciones de
los materiales estudiados. El proceso de recordar, en sí mismo, realza el aprendizaje profundo y nos
ayuda a comenzar a formar fragmentos.
Usar el recuerdo, el recordar mentalmente las ideas clave, en vez de volver a leer pasivamente hará que
todo tu tiempo de estudio sea más enfocado y efectivo. Parece que la relectura solo es efectiva si dejas
que pase algún tiempo entre lectura y lectura, de modo que se convierta como en un ejercicio de
repetición espaciada.
Ilusiones de competencia
Veamos, estás estudiando el manual de soluciones que algún autor escribió. Sí sólo ves la solución y
piensas, por ejemplo: si, ya sé cómo resolvieron esto. Entonces, la solución no es realmente tuya. Casi no
has hecho nada para anexar esos conceptos en tu propio circuito neuronal mediante la práctica.
Simplemente darle un vistazo a una solución y pensar que realmente lo sabes tú mismo, es una de las
ilusiones de competencia más comunes que hay en el aprendizaje.
Ahora puedes entender por qué es clave que seas tú mismo el que resuelva el problema o domine el
concepto.

Mini exámenes
Una manera muy útil para asegurarte de que estás aprendiendo y no engañándote con ilusiones de
competencia, es ponerte a prueba a ti mismo con respecto a lo que estés estudiando. De algún modo, es
lo que haces al recordar: permitirte ver si en realidad captaste o no una idea.
Si cometes un error mientras lo haces en realidad es algo muy positivo porque te permite hacer
reparaciones, y al corregir tus errores poco a poco corriges tu pensamiento, lo que te ayuda a aprender
cada vez mejor.
Hay otro consejo útil
Refrescar el material fuera de tu lugar usual de estudio también puede ayudar a fortalecer tu aprendizaje.
No te das cuenta pero cuando estas aprendiendo algo nuevo a menudo tomas pistas subliminales de la
habitación dónde estabas y del espacio que te rodeaba en el momento en que estabas aprendiendo
originalmente el material. Esto te puede desorientar cuando presentas un examen, porque generalmente lo
presentas en una habitación diferente de la habitación en la que estudiaste.
Al recordar y pensar en el material cuando estás en diversos ambientes físicos, te independizas de las
pistas que te da un lugar específico. Eso te ayuda a evitar el problema de que te desorientes al intentar
recordar el material porque la habitación no sea la misma en la que originalmente lo aprendiste.
Otro consejo más
Puedes pensar que hay tantos problemas y conceptos en una sección o capítulo de lo que estés
estudiando, que no hay manera de aprendértelos todos. Es común. Sólo concéntrate en la sección que
estés estudiando; encontrarás que una vez que aprendes el primer concepto o problema, no importa cuál
sea, el segundo concepto entrara un poquito más fácil, y el tercero más fácilmente todavía. Y así
sucesivamente.
SOBREAPRENDER
Al aprender una nueva idea, a veces tiendes a practicarlo una y otra vez durante la misma sesión de
estudio. Un poco de esto es útil y necesario, pero seguir estudiando o practicando después de haber
dominado aquello que puedes en una sesión, es llamado sobreaprender. Las investigaciones han
demostrado que eso puede ser un desperdicio de tiempo de aprendizaje.

La realidad es que una vez captada la idea básica durante una sesión, seguir martillándola durante la
misma sesión no fortalece las conexiones de memoria a largo plazo que deseas fortalecer. Mejor usa una
sesión subsiguiente de estudio para repetir lo que estás intentando aprender.
Nota: si te agobias en los exámenes o al hablar en público, el sobreaprendizaje puede ser valioso.
¿Sabías que los oradores públicos expertos practican cerca de 70 horas para una charla TED típica de 20
minutos?
EINSTELLUNG
La palabra alemana “einstellung” quiere decir mentalidad. En este fenómeno, un simple pensamiento
inicial, una idea que ya tienes en mente o un patrón neural que ya has desarrollado y fortalecido, puede
impedir que encuentres una mejor idea o solución. Básicamente, puedes recordar al einstellung como la
instalación de un bloqueo de carretera, debido a la manera en la que estabas mirando algo inicialmente.
Este tipo de enfoque equivocado es especialmente fácil de hacer en deportes y en ciencia, porque a veces
tu intuición inicial acerca de lo que está sucediendo o acerca de lo que tienes que hacer es engañosa.
Tienes que desaprender tus ideas o enfoques previos equivocados, incluso mientras estás aprendiendo
otras nuevas.
INTERCALAR
Intercalar es extraordinariamente importante. Aunque practicar y repetir es importante para ayudar a
construir patrones neurales sólidos a los que puedas recurrir, es la intercalación lo que ayuda a comenzar
a construir flexibilidad y creatividad. La mejor manera de construir eso, es practicando el ir saltando entre
problemas o situaciones que requieran de diferentes técnicas o estrategias.
Desarrollar experticia en diversos campos quiere decir que puedes traer ideas nuevas de un campo a otro.
Pero también quiere decir que tu experticia en un campo o en el otro no es tan profunda como la de una
persona que se especialice sólo en una disciplina. Por otra parte, si sólo desarrollas experticia en una
disciplina puede que la conozcas muy profundamente, pero puedes quedar atrincherado también muy
profundamente en tu manera de pensar, y no seas capaz de manejar ideas nuevas.

PROCRASTINACIÓN Y MEMORIA
PROCRASTINACIÓN
Cuando hay algo que tienes que hacer pero en realidad prefieres no hacer, parece que activas las áreas
de tu cerebro que se asocian con el dolor. Tú cerebro, de manera natural, busca la forma de detener ese
estímulo negativo cambiando tu atención hacia algo diferente, retrasando así aquello que tienes que
hacer.
La razón por la que aprender a evitar la procrastinación es tan importante es que el buen aprendizaje es
una actividad paulatina. Te conviene evitar el abarrotamiento, que no construye estructuras neurales
solidas. Dedicándole la misma cantidad de tiempo al aprendizaje, pero espaciando ese aprendiz aje
comenzado con suficiente tiempo, podrás aprender mejor.
PROCESO VS PRODUCTO
Primero, en lo que se refiere al aprendizaje en general, debes darte cuenta de que es perfectamente
normal comenzar con algunos sentimientos negativos al inicio de una sesión de aprendizaje, incluso
cuando es un tema que normalmente te gusta. Lo que importa es como manejas esos sentimientos.
Una de las mejores formas de aprender efectivamente es emplear herramientas y trucos mentales que te
inspiren y te motiven. Los investigadores han encontrado que los no procrastinadores apartan sus
pensamientos negativos diciéndose a sí mismos cosas como: “deja de perder el tiempo y pon manos a la
obra, una vez que comiences te sentirás mejor al respecto”. O también puedes evitar la procrastinación
adoptando el hábito de enfocarte en el proceso, no en el producto.
Pensar en el producto (la tarea) es lo que desencadena el dolor que te hace procrastinar. Por el contrario,
debes fijar tu atención en los procesos de construcción: procesos relacionados con hábitos simples,
hábitos que coincidentemente te permitan hacer las tareas no placenteras (productos) que hay que hacer.
El proceso son los pequeños fragmentos de tiempo que tienes que dedicar a lo largo de varios días o
semanas para terminar el producto. No importa si terminas el producto en una sola sesión o en muchas
sesiones, lo que importa es que hagas calmadamente tu mejor esfuerzo durante un periodo corto.

Una de las formas más fáciles de enfocarse en el proceso es enfocarse en hacer un pomodoro (una
sesión de trabajo cronometrada de 25 minutos), no en completar la tarea.
La idea esencial aquí es que a tu cerebro le gustan los procesos que pueden marchar sin pensar. Es
mucho más fácil engancharse en el hábito amigable de ayudar con un proceso, que el de ayudar con un
producto.
HÁBITOS
El hábito es un ahorrador de energía para nosotros. Una vez que una actividad se vuelve un hábito se
gasta menos energía en realizarla. De eso se tratan los hábitos, no hay que pensar de modo enfocado en
lo que estás haciendo mientras que estás ejecutando el hábito. Los hábitos pueden ser buenos o malos.
TÉCNICA POMODORO
Todo lo que hay que hacer es poner el cronometro o la alarma en 25 minutos, apagar
todas las interrupciones y enfocarse.
Por último,date a ti mismo una pequeña recompensa cuando termines, permitiendo
que tu cerebro cambie gentilmente su foco durante un tiempo (que se relaje).
Es como hacer ejercicio intensamente durante 25 minutos en un gimnasio mental,
seguido por un poco de relajación mental.
TIP
Una muy buena idea para no procrastinar es organizarte todo lo que puedas (espacio
ordenado,notificaciones de redes sociales apagadas,etc) para que las distracciones
sean mínimas.
Para muchos estudiantes es muy útil estudiar en un espacio silencioso; o usar
tapones para los oídos o audífonos con cancelación de ruido –si se pueden dar ese
lujo— cuando están realmente intentando concentrarse.
Proceso VS Producto

Las respuestas rutinarias y habituales del cerebro son respuestas a estímulos específicos. Podemos tener
diferentes respuestas a un mismo estímulo; pero estas respuestas rutinarias a menudo se enfocan en
mejorar el aquí y el ahora (darnos placer), adoptamos este modo habitual mucho más a menudo de lo que
se pueden imaginar.
Se puede considerar que los hábitos tienen cuatro partes:
 La primera es el estímulo: es el disparador que desencadena la rutina. El estímulo puede ser algo
tan simple como leer la primera cosa de tu lista de cosas por hacer ¡Es hora de trabajar!, o ver un
mensaje de texto de un amigo ¡es hora de dejar de trabajar!
 Número dos, la rutina: la respuesta usual de rutina que tu cerebro está habituado a dar cuando
recibe el estímulo. Puedes ser útil, inofensiva o a veces dañina.
 Número tres, la recompensa: todo hábito se desarrolla y continúa debido a que nos recompensa;
nos da una pequeña sensación inmediata de placer. La procrastinación es un hábito fácil de
desarrollar porque la recompensa, que es cambiar el foco de tu mente hacia algo más placentero,
sucede muy rápida y fácilmente. Pero los buenos hábitos también se pueden recompensar.
Encontrar formas para recompensar los buenos hábitos de estudio es importante para escapar de
la procrastinación.
 Número cuatro, creer: los hábitos tienen poder debido a que crees en ellos. Para cambiar un
hábito, necesitarás cambiar tu creencia subyacente.

CAMBIAR HÁBITOS
¿Buscas algo en específico en la web, pero después navegas en otras cosas que no estaban planeadas?
¿Si recibes un mensaje de texto, interrumpes tu estudio por algunos minutos hasta que logras recuperar la
concentración, incluso cuando estás intentando no distraerte?
Si quieres cambiar un hábito no tienes que hacer un cambio total, sólo tienes que anular una parte de él.
El truco para anular un hábito es buscar cambiar tu reacción al estímulo (si es que no puedes eliminar el
estímulo). Sólo tienes que usar la fuerza de voluntad para cambiar tu reacción al estímulo.
Cómo cambiar hábitos
Lo primero es el estímulo, identifica qué te lleva a procrastinar –por ejemplo—. Los estímulos
usualmente caen en una de las cuatro siguientes categorías: ubicación, hora, cómo te sientes, y
reacciones (sea a otras personas o a cosas que acaban de suceder).
Número dos, la rutina. El cerebro quiere ir hacia su rutina cuando recibe el estímulo. Entonces, es en la
reacción al estímulo donde debes enfocarte activamente a reprogramar tu viejo hábito. La clave
para reprogramar es tener un plan. Desarrollar un nuevo ritual puede ser útil.
Tres, la recompensa. Esto a veces exige un poco investigación. ¿Por qué estás procrastinando?, por
ejemplo.
Puede ser útil agregar una nueva recompensa si quieres superar tus antojos previos. Sólo cuando tú
cerebro comience a esperar la recompensa, se crearán las conexiones que te permitirán crear nuevos
hábitos.
El número cuatro es creer. La parte más importante de cambiar el hábito de procrastinar –por ejemplo—
es creer que lo puedes lograr. Te puede suceder que cuando las cosas se vuelvan estresantes, te

apetezca regresar a los viejos hábitos que te resultan más cómodos. Creer que tu nuevo sistema funciona
es lo que va a hacer que lo logres.
No te sientas mal si al principio no logras que el proceso fluya. Recuerda que en la medida en que vayas
mejorando en una tarea, esa tarea se va haciendo más agradable.
MALABARES CON LA VIDA Y EL APRENDIZAJE
Para muchas personas, aprender incluye el equilibro de muchos tareas diferentes. Una manera para que
puedas mantener la perspectiva sobre lo que estás intentando aprender y lograr, es escribir una vez a la
semana una breve lista de tareas clave en un diario de planificación; y escribir cada día, en otra página del
mismo diario, una lista de las cosas en las que razonablemente puedes trabajar o lograr en ese día.
Intenta escribir esta lista diaria de tareas la noche anterior. Hay investigaciones que han demostrado que
esto ayuda a tu subconsciente a aferrarse a las tareas que están en la lista de modo que puedas
resolverlas y lograrlas.
Una y otra vez, personas comprometidas con reservar sano tiempo libre junto con su trabajo duro, superan
a los que trabajan tenazmente sin cesar. Por supuesto, puede que tu vida no se pueda ajustar a horarios
que incluyan recesos y tiempo libre. Pero independientemente de cómo sea tu vida, intenta encontrar un
poco de tiempo libre.
Una cosa más. Tal como le recomienda la profesora de escritura Daphne Graygrant a sus clientes:
“cómase sus ranas temprano por la mañana”. Al despertarte, intenta trabajar primero en una tarea
importante y que no te guste; al menos un pomodoro justo. Esto es increíblemente efectivo.
EJEMPLO
Te mostrare como estructuro mis listas de tarea diarias:
+Algunas tareas están orientadas a procesos; entonces, le dedico un
tiempo enfocado casi todos los días a completarlos.
+Algunas tareas están orientadas a productos, pero sólo porque se
pueden hacer en un periodo limitado de tiempo.
+A veces añado algunas tareas que involucran movimientos físicos en
mi lista, aunque sólo sea limpiar algo. Es to, lo admito, no es
normalmente una de mis actividades favoritas. Pero de algún modo,
como las estoyusando como recesos de modo difuso,a menudo deseo
hacerlas. Mezclar otras tareas con tu aprendizaje parece lograr que
todo sea más agradable,y no permite que pases largos ratos sentado.
+Nota mis recordatorios: “Focus, fun!” (quiero mantener mi
concentración en cada tarea cuando estoy trabajando en ella, y me
quiero divertir).
+Toma notas en tu diario acerca de lo que funciona y lo que no
funciona.
+Planificar una hora para terminar es tan importante como planificar las
horas de trabajo.

Mantén el ojo en la meta de aprendizaje, e intenta no dejar que te descoloquen los obstáculos
ocasionales.
VIENDO CON MÁS PROFUNDIDAD A LA MEMORIA
Nuestros ancestros nunca necesitaron una extensa memoria para recordar nombres ni números, pero sí
necesitaban recordar cómo regresar a casa después de cazar venados por tres días, o dónde estaban
esos jugosos arándanos en las colinas rocosas del sur del campo. Estas necesidades evolutivas ayudaron
a consolidar un sistema de memoria superior para recordar dónde están las cosas y cómo lucen.
Puede que te sorprenda que tengamos extraordinarios sistemas de memoria visual espacial que pueden
formar parte de nuestra memoria a largo plazo. Puedes realzar tu capacidad para recordar si aprovechas
estas capacidades de memorización visual espacial naturalmente inmensas.
Para empezar a aprovechar ese sistema de memoria visual, intenta crear una imagen visual muy
memorable que represente un aspecto clave que deseas recordar. Parte de la razón por la que una
imagen es tan importante para la memoria es que las imágenes se conectan directamente con los centros
espaciales de la parte derecha del cerebro. La imagen te ayuda a encapsular un concepto aparentemente
monótono y difícil de recordar aprovechando las áreas visuales con capacidades realzadas de memoria.
Mientras más divertidas y evocativas sean las imágenes, mejor.
Mientras más ganchos neurales puedas construir evocando los sentidos, más fácil será que recuerdes el
concepto y lo que significa. Las fichas suelen ser muy útiles: escribir y decir lo que estás intentando
aprender ayuda a realzar la retención. Escribir a mano te ayuda a codificar más profundamente.
Para llevar algo de tu memoria temporal de trabajo a tu memoria a largo plazo, deben suceder dos cosas:
1. La idea debe ser memorable; de lo contrario los vampiros metabólicos pueden succionar los
patrones neurales relativos a ese recuerdo antes de que se puedan fortalecer y multiplicar.
Mientras más logres convertir lo que estas intentando recordar en algo memorable, más fácil será
que lo recuerdes.

2. La repetición es importante. Incluso si haces algo memorable, la repetición ayuda a que esa
imagen memorable se aloje firmemente a la memoria a largo plazo. Recuerda repetir, no un
montón de veces en un solo día, sino esporádicamente a lo largo de varios días, aunque sea unos
pocos minutos cada día o cada noche. Al aumentar el espacio a medida que vas dominando el
material, se irá consolidando más firmemente. Es interesante que una de las mejores maneras de
recordar los nombres de las personas es sencillamente intentar recordar esos nombres a
intervalos cada vez más largos después de aprender cada nombre por primera vez. Hay
excelentes sistemas de tarjetas flash como Anki, que tienen incorporados algoritmos que repiten
escalas que van de días a meses.
LO QUE ES MEMORIA A LARGO PLAZO
Hay múltiples sistemas de memoria para diferentes tipos de aprendizaje. El hipocampo es una parte
importante del sistema cerebral para aprender y recordar hechos y eventos. Sin el hipocampo y sus
aportes no es posible guardar nuevos recuerdos en la corteza, en un proceso llamado consolidación de
memoria que puede tomar muchos años. Siempre que recuerdas un recuerdo, éste cambia, en un proceso
llamado reconsolidación.
Tanto la consolidación como la reconsolidación ocurren cuando dormimos. Por esto, es más efectivo
espaciar el aprendizaje que aprender todo al mismo tiempo porque así darás más oportunidad a tu cerebro
de que consolide la información que quieres aprender al tenerlo presente varios días cuando duermes . Si
quieres estudiar algo durante una hora, lo retendrás por más tiempo si estudias 10 minutos cada mes del
semestre que si estudias la hora en un solo día. En contraste, si esperas hasta el día antes del examen
para atiborrarte el material, podrás recordarlo al día siguiente para el examen, pero pronto lo olvidaras.
Los recuerdos son partes vivas del cerebro, que respiran y están cambiando todo el tiempo. Nuestros
recuerdos están entrelazados entre sí. A medida que aprendemos cosas nuevas, nuestros recuerdos
viejos cambian. Incluso es posible implantar recuerdos falsos, que no se pueden diferenciar de los reales,
Imagen memorable
Vampiros metabólicos succionando
los recuerdos poco memorables

simplemente mediante sugerencias e imaginación –especialmente en el caso de los niños, que tienen
imaginaciones vividas—.
CREACIÓN DE GRUPOS SIGNIFICATIVOS Y LA TÉCNICA DEL PALACIO DE MEMORIA
Otra clave para memorizar es crear grupos significativos que simplifiquen el material. Muchas disciplinas
usan frases memorables para ayudar a los estudiantes a memorizar conceptos. En medicina, por ejemplo,
se usan muchos recursos mnemotécnicos memorables. Entre los más conocidos está la frase en inglés:
some lovers try positions that they can´t handle, para memorizar los nombres de los huesos carpianos de
la mano, debido a que la inicial de cada palabra de la frase es también la inicial de cada palabra de la lista
de huesos que hay que memorizar.
La técnica del palacio de memoria es una manera particularmente poderosa de agrupar cosas que quieras
recordar. Se trata de traer a la memoria un lugar familiar que conozcas muy bien, como la distribución de
tu propia casa (ese lugar será tu palacio), y usarlo como una libreta virtual de notas donde puedes
depositar en determinados puntos del palacio las imágenes de los conceptos que quieres recordar. En
otras palabras imagínate a ti mismo caminando por un lugar que conozcas bien, junto con imágenes
sorprendentemente memorables de lo que quieres recordar.
La técnica del palacio de memoria es útil para recordar cosas que se relacionan entre sí, como una lista de
compra de víveres, por ejemplo.
Los trucos de memoria permiten a las personas acceder fácilmente a la memoria a largo plazo. Y mientras
más ejercitas este tipo de músculo de memoria, por llamarlo así, más fácilmente podrás recordar. También
te darás cuenta de que a medida que interiorizas aspectos clave del material, tomándote un poco de
tiempo para memorizar los puntos más importantes, lo entenderás mucho más profundamente. Es más, el
¿SABÍAS QUE?
Además de neuronas, los cerebros tienen diferentes tipos de células de soporte, llamadas células gliales.
El astrocito es la célula glial más abundante que hay en el cerebro humano. Los astrocitos le suministran
nutrientes a las neuronas, mantienen el equilibro iónico extracelular, y participan en las reparaciones
después de lesiones.
Experimentos recientes sugieren que estos astrocitos pueden también ejercer un importante rol en el
aprendizaje. Cuando se implanta astrocitos humanos en cerebros de ratones, éstos aprender más rápido.
Es interesante que cuando se estudió el cerebro de Einstein buscando qué lo hacía tan increíblemente
creativo, la única diferencia que se encontró fue que tenía más astrocitos que el humano promedio.
¿Serán los astrocitos la clave para entender la inteligencia humana? Mientras más aprendemos sobre el
cerebro, más tenemos que repensar el aprendizaje.

proceso de memoria en sí mismo se convierte en un ejercicio de creatividad. Mientras más memorizas
usando estas innovadoras técnicas, te vas volviendo más creativo.
APRENDIZAJE DEL RENACIMIENTO Y DESBLOQUEO DE TU POTENCIAL
CÓMO SER UN MEJOR ALUMNO
Consejo número uno: El mejor regalo que le podemos dar al cerebro es el ejercicio físico.
Antes se pensaba que todas las neuronas estaban presentes en el momento del nacimiento, pero ahora
sabemos que hay lugares donde todos los días nacen neuronas –uno de estos lugares es el hipocampo,
un área del cerebro que es muy importante para aprender cosas nuevas—. Estas nuevas neuronas te
ayudarán a aprender cosas nuevas, pero morirán si no las usas. Tener nuevas experiencias las
rescatarán. Es interesante el hecho de que hacer ejercicio también ayuda a que las nuevas neuronas
sobrevivan.
El ejercicio es, con mucho, más efectivo que cualquier droga que hay en el mercado para ayudarnos a
aprender mejor. Beneficia a todos los órganos vitales, no sólo al cerebro. Es desafortunado que las
escuelas estén eliminando la gimnasia y el recreo para abrir más espacio a la instrucción. La gimnasia y el
recreo son por mucho las partes más importantes del currículo.
¿SABÍAS QUE?
El aprendizaje no progresa linealmente, es decir, no va agregando cada día un ordenado paquete
adicional a nuestra cobertura de conocimiento. A veces, te topas con una pared cuando estas
construyendo tu entendimiento: las cosas que tenían sentido antes pueden repentinamente parecer
confusas. Este tipo de colapso del conocimiento parece ocurrir cuando tu mente está reestructurando tu
entendimiento, construyendo una base más sólida.
Este es un fenómeno natural que significa que tu mente está luchando profundamente con el material.
Encontrarás que cuando emerges de estos períodos de frustración temporal, tu base de conocimiento
dará un paso sorprendente hacia adelante.
¿Lo habías notado?

CREAR UNA METAFORA O UNA ANALOGÍA ANIMADA VISUAL
Una de las mejores cosas que puedes hacer no sólo para recordar sino para entender conceptos, es crear
para ellos metáforas o analogías; en general, mientras más visuales mejor.
Una metáfora o analogía no es más que darse cuenta de que una cosa se parece de algún modo a otra. A
medida que vas subiendo a comprensiones más sofisticadas de cualquier tópico en el que te estés
concentrando, puedes revisar tus metáforas, desecharlas y crear otras más significativas.
Las metáforas y la visualización –ser capaz de ver algo con el ojo de la mente—, han sido muy útiles no
sólo en el arte y la literatura sino también en el mundo de la ciencia y la ingeniería.
Con frecuencia, te puede ser útil imaginarte que eres el concepto que estás intentando entender. Las
metáforas y los modelos son de vital importancia para dar un entendimiento físico de la idea central que
está detrás del proceso o concepto que estás intentando entender.
Es interesante que las metáforas y las analogías sirven para sacar a la gente de Einstellung, es decir, que
se bloqueen pensando en un problema del modo equivocado.
Las metáforas también ayudan a que las ideas se peguen en tu mente, porque se conectan a estructuras
neurales que ya están allí. Es como trazar un patrón usando papel de calcar. Las metáforas te permiten
que al menos tengas una idea de lo que está sucediendo. Los cuentos, incluso si se usan sólo como
tontos trucos para memorizar, también te pueden permitir que retengas más fácilmente lo que estás
intentando aprender.

NO HAY NECESIDAD DE ENVIDIAR A LOS GENIOS
Los maestros de ajedrez, médicos de terapia intensiva, pilotos de combate y muchos otros expertos,
tienen que tomar con frecuencia muchas decisiones rápidamente. Ellos bloquean su sistema consciente y
en su lugar confían en su bien entrenada intuición, recurriendo a su bien engranado repertorio de
fragmentos.
Pero esperen, ¿no son los maestros de ajedrez y las personas que pueden multiplicar seis dígitos en sus
cabezas personas con dones excepcionales? No necesariamente, se los digo de una vez.
Es la práctica particularmente deliberada de los aspectos más difíciles de un material, lo que puede elevar
a los cerebros comunes y corrientes hasta el nivel de los que tienen dones más innatos; porque del mismo
modo que cuando levantas pesas te van creciendo los músculos que estuvieron en acción, también
puedes practicar ciertos patrones mentales que se profundizan y agrandan en tu mente.
Ser más inteligente con frecuencia equivale a tener una memoria de trabajo más grande; una memoria con
turbo puede ser capaz de guardar nueve cosas en la mente, en vez de cuatro, lo que te hará más fácil
aprender. Pero ¿sabes una cosa? Eso también te hace más difícil ser creativo. ¿Qué te parece? Es
nuestro viejo amigo y enemigo, el Einstellung. La idea que tienes en la mente puede bloquear los nuevos
pensamientos frescos. Una excelente memoria de trabajo puede guardar sus pensamientos tan
herméticamente que los nuevos pensamientos no puedan ni asomarse.
Si eres una de esas personas que no puede mantener mucho en la mente al mismo tiempo, que pierde la
concentración y comienza a soñar despierto durante las conferencias, y que se tiene que ir a un lugar
tranquilo para concentrarse y para que su memoria de trabajo funcione al máximo, bien, ¡bienvenido al
clan de los creativos!
Tener una memoria de trabajo un poco más pequeña quiere decir que puedes generalizar más fácilmente
tu aprendizaje en combinaciones nuevas, más creativas. Porque tu memoria de trabajo, que crece de las
capacidades de concentración de la corteza prefrontal, no encierra todo tan herméticamente. Puedes
agregar información de otras partes del cerebro más fácilmente.

¿SABÍAS QUE?
Si usas un mismo procedimiento muchas veces, haciendo diferentes tipos de problemas, encontrarás que
entiendes el por qué y el cómo del procedimiento mucho mejor que después de que un profesor o un libro
te lo explique.
Esa mayor comprensión es el resultado del hecho de que tu mente construyó los patrones del significado,
en lugar de simplemente aceptar lo que otra persona te ha dicho. Recuerda, las personas aprenden
intentando que la información que perciben tenga sentido; rara vez aprenden algo complejo simplemente
porque alguien se los dijo.
¿TE HA PASADO?
Piensas que saliste bien de casualidad en un examen, y que en el
siguiente, con seguridad, tus familiares y tus amigos se van a dar cuenta
por fin de lo incompetente que eres en realidad. Esta sensación es tan
extraordinariamente común que hasta tiene un nombre: el síndrome del
impostor.
Si sufres de este tipo de sensación de insuficiencia, sólo tienes que
estar consciente de que muchos otros la comparten en secreto. Todas
las personas tienen dones diferentes, y como dice el viejo dicho, cuando
se cierra una puerta, se abre otra.
Mantén la cabeza en alto y mantén la vista en la puerta que está abierta.

CAMBIA TUS PENSAMIENTOS, CAMBIA TU VIDA.
Hay evidencia de que las vainas de mielina, el aislante graso que ayuda a que las señales se muevan más
rápidamente a través de las neuronas, no se terminan de desarrollar en algunas personas hasta que
tienen alrededor de 20 años. Esto podría explicar por qué a los adolescentes a menudo se les hace difícil
controlar su conducta impulsiva. Las conexiones entre las áreas de intención y control del cerebro no
están totalmente formadas.
Sin embargo, cuando usas los circuitos de neuronas, parece que ayudas a construir esas vainas de
mielina que tienen por encima, sin mencionar que suceden muchos otros cambios microscópicos. Parece
que la práctica fortalece y refuerza las conexiones entre las diferentes regiones del cerebro, creando
autopistas entre los centros de control del cerebro y los centros que guardan el conocimiento.
Pareciera que la gente puede realzar el desarrollo de sus circuitos neurales al practicar los pensamientos
que utilizan esas neuronas. Todavía estamos en la infancia del entendimiento del desarrollo neural. Una
cosa está quedando clara: que podemos modificar significativamente nuestro cerebro cambiando cómo
pensamos.
Santiago Ramón y Cajal señalo en su autobiografía que aunque las personas brillantes pueden hacer
trabajos excepcionales, pueden ser indolentes y parcializados, como todo el mundo. Cajal sentía que la
clave de su éxito era su perseverancia, lo que él llamaba la virtud de los menos brillantes, junto con su
capacidad para ser flexible y ser capaz de cambiar su mente y admitir sus errores. Cualquiera, decía Cajal,
incluso alguien con una inteligencia promedio, puede cambiar su propio cerebro; de modo que incluso los
menos dotados pueden producir abundantes cosechas.
¿SABÍAS QUE?
Aproximarte al material con el objetivo de aprenderlo por ti mismo te puede llevar a recorrer un sendero
único de dominio. Muchas veces, independientemente de lo bueno que sea tu profesor o libro, sólo
cuando te escapas y ves otros libros o videos comienzas a ver que lo que aprendes de un solo profesor, o
un solo libro, es una versión parcial de la realidad completa y tridimensional del tema, que se enlaza con
muchos otros tópicos fascinantes que tú puedes elegir. Asumir la responsabilidad de tu propio aprendizaje
es una de las cosas más importantes que puedes hacer.

EL VALOR DEL TRABAJO EN EQUIPO
Tal como lo ha señalado el eminente neurocientífico Vilayanur S. Ramachandran, el hemisferio derecho
sirve como una especie de abogado del diablo que cuestiona el status quo y busca inconsistencias
globales, ya que muchas investigaciones sugieren que nos ayuda a dar un paso atrás y a poner nuestro
trabajo en perspectiva, por lo cual es vitalmente importante para ir por el carril correcto y para actuar de
manera realista; mientras que el hemisferio izquierdo, por el contrario, intenta aferrarse a como estaban
las cosas.
Cuando trabajas en el modo enfocado, es fácil cometer errores menores en tus suposiciones o cálculos. Si
te sales del camino correcto muy temprano, no importa si el resto de tu trabajo está correcto, tu respuesta
seguirá estando equivocada. Pero estos resultados sin sentido no te importan, porque el modo más
enfocado de hemisferio izquierdo tiene asociado un deseo de aferrarse a lo que has hecho. Ese es el
problema de la concentración, a veces el modo de análisis del hemisferio izquierdo proporciona un
enfoque analítico y optimista, pero abundantes evidencias sugieren que también hay un potencial para que
haya rigidez, dogmatismo y egocentrismo.
De algún modo, cuando haces muy rápidamente una tarea o un examen y no te detienes a revisar tu
trabajo, estás actuando un poco como alguien que se niega a utilizar partes de su cerebro. Sólo el dejar de
usar ligeramente algunas de nuestras habilidades puede tener un impacto sorprendentemente negativo en
nuestro trabajo. Cuando das un paso atrás y revisas tu trabajo, estas permitiendo que haya más
interacción entre ambos hemisferios, aprovechando así las perspectivas y destrezas especiales de cada
hemisferio.
Una de las mejores maneras de descubrir tus puntos ciegos y tus errores es discutir y trabajar con otros
que también se están concentrando inteligentemente en el tema. A veces simplemente no es suficiente
usar toda tu propia fuerza neural, ambos modos y hemisferios para analizar tu trabajo; después de todo,
todos tienen puntos ciegos. Si te aseguras de hacer parte de tus horas de estudio con amigos, puedes
descubrir más fácilmente si te has descarriado en alguna parte. Además, explicarle a tus amigos ayuda a
que tú mismo entiendas mejor.
La importancia de trabajar con otros no se relaciona sólo con el aprendizaje, también es importante en la
creación de tu carrera. Un pequeño consejo de un compañero puede hacer una diferencia extraordinaria
en cómo se desenvuelve tu vida.

Sin embargo, te daré una breve advertencia: los grupos de estudio pueden ser poderosos y efectivos para
el aprendizaje, pero sí se convierten en eventos sociales, se acaban las apuestas. Si te das cuenta de que
las reuniones de tu grupo comienzan de 5 a 15 minutos tarde, los miembros no se leyeron el material y la
conversación constantemente se desvía a otros temas, es mejor que te busques otro grupo.
UNA LISTA DE COTEJO
Un examen es en sí mismo una experiencia de aprendizaje extraordinaria y poderosa. Al parecer, los
exámenes son una forma maravillosa de mantener a la mente concentrada.
¿Cómo debería prepararme para el examen? Como dice el Doctor Richard Felder, legendario educador, la
respuesta a esa pregunta es hacer todo lo que haga falta para poder contestar sí a las preguntas de la
siguiente lista:
 ¿Realizaste un esfuerzo serio para entender el texto? Sólo buscar ejemplos relevantes que ya
estén resueltos no cuenta.
 ¿Trabajaste con tus compañeros de clase en los problemas de la tarea o al menos
verificaste tus soluciones con otros?
 ¿Repasaste la guía de estudio y los problemas con tus compañeros de clase y se hicieron
preguntas mutuamente?
 ¿Participaste activamente en discusiones grupales sobre la tarea contribuyendo con ideas
y realizando preguntas?
 ¿Entendiste todas las soluciones de los problemas de tu tarea cuando fueron entregados?
 ¿Pediste en clase que te explicaran las soluciones de los problemas de tarea que no tenías
claros?
 ¿Dormiste suficiente antes del examen? Si tu respuesta a esta pregunta es no, puede que tus
respuestas a todas las preguntas previas no importen.
Revisar tu propia lista de cotejo para prepararte para un examen puede mejorar muchísimo tus
probabilidades de éxito.
LA TÉCNICA DE INICIA DIFÍCIL - BRINCA A FÁCIL
La manera clásica como se les enseña a los estudiantes que se aproximen a un examen es que
respondan primero los problemas más fáciles y al último los difíciles. Los problemas difíciles pueden exigir
que usemos los poderes creativos del modo difuso, pero para acceder al modo difuso es necesario que no
te enfoques tanto en lo que tan desesperadamente quieres resolver. Lo mejor es comenzar con los
problemas difíciles, y saltar rápidamente a los fáciles.
Esto es lo que quiero decir: en el momento en que te entreguen el examen, primero dale un vistazo rápido
a todo para tener una idea de lo que tienes que resolver (esto lo tienes que hacer en todo caso); después,
cuando empieces a resolver los problemas, empieza con el que parezca ser el problema más difícil. Pero
retírate uno o dos minutos después sí te bloqueas o sí te da la sensación de que no vas por el camino
correcto, y pasa a los problemas fáciles.

Así lograrás algo excepcionalmente útil: comenzar con el problema difícil hará que lo cargues en tu mente,
y cuando dejes de prestarle atención por irte a resolver los problemas fáciles, permitirás que el modo
difuso haga su trabajo subconsciente de ordenar esas ideas difíciles; así cuando regreses al problema
difícil, a menudo te parecerá agradable el hecho de que el siguiente paso te resultará más obvio.
De algún modo, con este sistema para presentar exámenes, serás un poco como un chef eficiente:
mientras esperas que se cocine el bistec, puedes rebanar fácilmente el tomate, voltearte para sazonar la
sopa y revolver las cebollas.
Tal vez es por esto que algunas personas, cuando están presentando un examen, sienten que la
respuesta les salta a la cabeza justo cuando están saliendo por la puerta una vez que dejaron el examen.
Cuando renuncian, cambian el foco de su atención, dándole al modo difuso el poquito de tracción que
necesitaba para encontrar la solución.
ÚLTIMAS SUGERENCIAS ÚTILES PARA LAS PRUEBAS
Excelentes profesores de todo el mundo me han dado muy buenos consejos para presentar exámenes, y
aquí están algunos de los mejores:
Susan Sajna-Hebert, profesora de psicología de la Lakehead University, les aconseja a sus clientes que
tapen las respuestas de las preguntas de selección múltiple e intenten recordar la información, de modo
que respondan las preguntas por su cuenta primero.
Bob Bradwhaw, profesor de matemáticas del Ohlone College, les habla a sus estudiantes de la
preocupación buena y la preocupación mala. La preocupación buena te ayuda proporcionándote
motivación y concentración, mientras que la mala simplemente desperdicia tu energía.
Si te estresas durante los exámenes, toma en cuenta que el cuerpo segrega químicos como la cortisona
cuando está bajo estrés. Esto puede hacer que te suden las palmas de las manos, que sientas un nudo en
el estómago. Pero es interesante que las investigaciones demuestran que cómo intérpretes estos
síntomas, cómo expliques porque estás estresado, hace una gran diferencia. Si envés de pensar “este
examen me da mucho miedo”, piensas “este examen me emociona y quiero obtener un excelente
resultado”, realmente puedes mejorar tu desempeño.
Otro buen consejo si entras en pánico durante los exámenes es que le prestes atención por un momento a
tu respiración. Esto te calmará. Pero no comiences a practicar este tipo de respiración (respiración
consciente) el mismo día del examen. Si practicas esta técnica de respiración durante las semanas
anteriores, te deslizaras más fácilmente hacía ese patrón de respiración durante el examen. Recuerda, la
práctica logra fijar los conocimientos.
Tracy Magrann, profesora de ciencias biológicas en el Saddleback College dice: estudia duro hasta el día
del examen, y después relájate. No te sientas culpable si no logras trabajar muy duro el día antes del
examen. Si te preparas bien, esto parece ser una reacción natural, casi como si estuvieras retrocediendo
inconscientemente para conservar energía mental. El día antes de presentar un examen dale sólo un
último vistazo al material para pulirlo. Necesitarás tanto tus músculos del modo enfocado como los del
modo difuso, por ponerlos así, para el día siguiente. Por eso, no conviene que presiones demasiado a tu
cerebro. Si lo presionas, sería igual que correr una carrera de 10 millas el día antes de correr un maratón.
Cuando estés presentando un examen, recuerda cómo tu mente te puede engañar haciendo que pienses
que lo que hiciste está correcto, aunque no lo esté. Esto quiere decir que –siempre que puedas— debes
parar, cambiar tu atención y después –usando una perspectiva amplia— revisar dos veces tus respuestas,
preguntándote a ti mismo si lo que respondiste realmente tiene sentido.
Cuando estés revisando tu trabajo, si lo haces yendo desde el final hacia el principio, puede que le des a
tu cerebro una perspectiva más fresca que te permita descubrir los errores más fácilmente.

A menudo, hay más de una manera de responder una pregunta, y revisar tus respuestas desde diferentes
perspectivas te da una oportunidad de oro para verificar lo que has hecho.
NOTA:
ESTE DOCUMENTO ES UN RESUMEN DEL MOOC
(Massive Open Online Course [curso online masivo abierto])
“LEARNING HOW TO LEARN: POWERFUL MENTAL TOOLS
TO HELP YOU MASTER TOUGH SUBJECTS”
(Aprender a aprender: poderosas herramientas mentales
para ayudarle a dominar temas difíciles).
HA SIDO ELABORADO POR FELIPE ESMARAGDO
MACHUCA ZEFERINO.
SI ALGUN TEMA NO LE RESULTA COMPRENSIBLE EN
ESTE RESUMEN PUEDE IR A LA FUENTE ORIGINAL A
CONSULTARLO:
https://www.coursera.org/learn/learning-how-to-learn

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