Este documento discute los desórdenes alimenticios comunes entre los jóvenes, señalando que la obsesión con el peso afecta a millones de adolescentes y que una de cada siete mujeres lucha contra un trastorno alimenticio. Describe la anorexia nerviosa y la bulimia nerviosa como trastornos psicológicos que implican comportamientos alimenticios extremos como negarse a mantener un peso corporal normal o comer compulsivamente seguido de vómitos o uso de laxantes.