La situación del Perú después de su independencia era crítica debido a una gran crisis económica causada por la guerra, una disminución del comercio y el trueque en lugar de monedas, y el control del comercio internacional por Inglaterra. Los militares eran los únicos capaces de liderar el país dado que los civiles y los intelectuales no estaban unidos, y esta época se conoce como el Primer Militarismo porque todos los gobernantes fueron militares que resolvían conflictos con violencia y tenían ideas conservadoras.