El poema critica a los niños bien que pretenden ser de clase alta aunque en realidad provienen de familias de clase baja. Se burla de aquellos que se creen superiores solo por fumar tabaco inglés, usar corbatas carmesíes y peinarse con gomina, cuando en realidad sus padres tienen trabajos humildes como vender fainá. Concluye que a pesar de sus pretensiones, estos niños bien son simples "gil" (tontos).