Una dieta poco saludable puede causar fatiga, alteraciones intestinales, ausencia de bacterias benéficas y cambios de estado de ánimo. Siguiendo una pirámide alimentaria saludable que enfatice vegetales, frutas, granos enteros y legumbres se pueden prevenir trastornos intestinales y mantener un buen estado de salud.
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1. Echemos un vistazo a los síntomas asociados a una dieta poco saludable
Fatiga
Sensación permanente de cansancio, incluso después de una noche con suficiente sueño.
Alteraciones intestinales
La falta de nutrientes día tras día empezará a tener efectos en el intestino, con alta probabilidad de provocar trastornos
crónicos como el síndrome de intestino perezoso, la disbiosis o la desvitaminosis.
Ausencia de bacterias benéficas
Los alimentos saludables proporcionan los nutrientes necesarios para que las colonias de bacterias benéficas prosperen
en nuestro cuerpo. La flora intestinal (microbiota) es una de las primeras en ser afectadas cuando ocurre un déficit
nutricional; esto provoca problemas como la diarrea, los espasmos y la hinchazón abdominal.
Cambios del estado de ánimo
Una alimentación deficiente afecta la capacidad del cuerpo para regular la insulina y promueve un estado inflamatorio del
cerebro. El resultado de esto es un deterioro del estado anímico, el cual puede influir amplificando condiciones
preexistentes como la depresión.
A continuación, aspectos clave que debe tener en cuenta :
La alimentación desempeña un papel indirecto pero importante en el funcionamiento normal de nuestro cuerpo.
Nos ayuda a mantener una temperatura corporal constante y obtener energía para llevar a cabo todas las acciones de
nuestro día a día, incluso el dormir. Estas funciones se cumplen gracias a las grasas, los azúcares y, en menor medida, a
las proteínas.
La comida nos permite reparar los tejidos dañados y a construir tejidos nuevos (por ejemplo, durante la gestación y el
crecimiento). Las proteínas son mayormente las encargadas de estas funciones.
La comida nos permite mantener un sistema de defensas capaz de enfrentar ataques de agentes externos e internos (por
ejemplo, las infecciones). Esta función protectora es llevada a cabo principalmente por proteínas, vitaminas y minerales.
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La comida nos ayuda a producir reacciones bioquímicas esenciales para la vida, como respirar, alimentarnos, digerir el
alimento, movernos, etc. Esta función reguladora es guiada por proteínas, vitaminas, carbohidratos, sales minerales y
agua. (10)
Una alimentación poco saludable suele ser uno de los detonantes en personas jóvenes
Cada vez más personas jóvenes se acostumbran a una dieta no balanceada, escasa en nutrientes esenciales. Esto se debe
a múltiples razones, entre las que están:
La adopción de malos hábitos alimenticios desde la infancia
Rebeldía típica de la edad que lleva a preferir exclusivamente comida “chatarra”
Aspectos psicológicos y emocionales en los que la alimentación puede tener un papel fundamental, especialmente en las
niñas
Malos hábitos alimenticios, como el omitir comidas por socializar
Consultar una sencilla pirámide alimentaria le puede ayudar a prevenir trastornos intestinales.
2. La pirámide alimentaria constituye una herramienta útil para ayudarnos a tomar mejores decisiones en cuanto a nuestra
nutrición diaria. Se le reconoce universalmente como una estructura básica para mantener una dieta adecuada, de la cual
los usuarios pueden obtener una interpretación individual. La pirámide es un medio efectivo de comunicación de los
papeles, la calidad y la cantidad de los alimentos a los que se debe dar preferencia si se busca lograr una mejor salud y
mayor calidad de vida. A continuación, le explicamos lo que debe saber:
La pirámide alimentaria refleja el modelo de la dieta mediterránea, un estilo de dieta extensamente estudiado y cuyos
efectos en la salud son ampliamente reconocidos.
Este estilo de alimentación implica el consumo de alimentos con bajo contenido calórico, como vegetales, frutas, granos
enteros y leguminosas. El pescado y el pollo también son aceptables en moderación.
Esta dieta garantiza un suministro adecuado de fibras que protegen contra la inflamación, especialmente la que ocurre al
interior del intestino.