El documento describe las lluvias ácidas, definidas como precipitaciones que contienen ácido sulfúrico y ácido nítrico debido a la combinación de dióxido de azufre y óxidos de nitrógeno con la humedad atmosférica. Las lluvias ácidas son causadas principalmente por emisiones industriales y de vehículos, y han aumentado 100 veces desde hace 200 años. Provocan daños ambientales como la muerte de organismos acuáticos y la desaparición del fitoplancton, así como efectos en la sal
Planificacion Anual 2do Grado Educacion Primaria 2024 Ccesa007.pdf
LLUVIAS ÁCIDAS
1. UNIVERSIDAD NACIONAL DE YACAMBU
CARRERA- PROGRAMA PSICOLOGIA
ESTUDIOS AMBIENTALES
Autor:
Juan Carlos Vera Ortiz
C.I.V.- 18639459
Cabudare, marzo de 2017
2. LLUVIAS ÁCIDAS
El ser humano es a quien le ha correspondido por millones de años ser el garante de la
supervivencia de la mayoría de los seres vivos del planeta, de los cuales tiene lo suficiente para vivir digna
y largamente. Sin embargo, al industrializarse no ha menoscabado notablemente todo lo que de balde
recibía, sin tener cuidado ni proyección alguna de la medida de los daños que se ocasionaba a sí mismo,
contradiciendo el principio de mantener su raza dominadora de la naturaleza. Así pues, ha perjudicado
todos los fenómenos naturales, afectando incluso el fin último para el cual estos están destinados, entre
ellos el proceso de precipitaciones, que es el tema en cuestión. Las lluvias cuyo objetivo es recrear los
ecosistemas ha sido sumamente contaminada y en justicia de lo que se ocasiona se está recibiendo lo que
se produce.
Se define la lluvia ácida como el producto de precipitaciones cuando el dióxido de azufre y los
óxidos de nitrógeno se combinan con la humedad en la atmósfera para producir ácido sulfúrico y ácido
nítrico, afectando notablemente el PH regular aceptable que debe tener el agua que cae a la tierra ya sea
por medio de lluvia, nieve, granizo y niebla o la unión de dos de estas mencionadas acá. Cabe mencionar
que el PH es una escala que se usa para medir la acidez del agua, siendo 0 la más ácida y 14 la más alcalina.
Un valor de 7 por ejemplo, es neutro. Así pues, las soluciones con un pH de menos de 7 son ácidas,
mientras aquellas con un pH mayor a 7 son bases. La lluvia “normal” también es ligeramente ácida debido
al equilibrio entre el agua de lluvia y el dióxido de carbono del aire, el cual se disuelve en cantidad
suficiente en las gotas para dar una solución diluida de ácido carbónico. Pero si comparamos la lluvia
“normal” con la lluvia ácida podemos ver claramente las diferencias entre ellas. De acuerdo con el material
facilitado por el docente, en la actualidad, sobre amplias áreas del este de Norteamérica, donde predominan
las fuertes precipitaciones pluviales, la lluvia cae con un pH cercano a 4,0 y, en raras ocasiones, de 3’0.
Estas lluvias pueden provocar importantes daños en el ambiente según se aclara allí.
La lluvia ácida es causada por las actividades industriales, “principalmente por las emisiones de
las centrales térmicas y por las producidas por la combustión de hidrocarburos que llevan S, N y Cl 7.
También son responsables los procesos de desnitrificación de fertilizantes añadidos a los suelos en dosis
3. excesivas, como los procesos naturales similares que se producen en las zonas de manglares, arrozales y
volcanes” (Lacy, 1997) En la actualidad hay datos que dicen que la lluvia es 100 veces más ácida que hace
200 años. En el curso de las actividades productivas, el hombre somete las materias naturales a procesos
mecánicos, físicos, químicos o biológicos, durante las cuales grandes cantidades de diversas sustancias
llegan al aire en forma de gases o vapores que se dispersan de modo combinado en polvo, humo o niebla.
Hemos dicho que la precipitación ácida se forma a través de una serie de reacciones complejas donde el
azufre, nitrógenos, cloruros y fluoruros, principalmente, estos componentes son los que forman ácido
sulfúrico y nítrico, como ácidos fuertes y ácido carbónico y otros ácidos, ácidos débiles cuyo impacto en
el ambiente es menor.
En nuestras comunidades una de las fuentes más importantes de contaminación del aire ha sido la
quema de combustible y la descarga en la atmósfera de óxidos de azufre, monóxido de carbono, óxidos
de nitrógeno e hidrocarburos, como fue el caso de la comunidad de Brisas del Huete en Cagua, estado
Aragua hace más de 3 años, además de esto otro proceso causante son la erosión del suelo. Según Herrera,
“fue en 1983, muchas naciones industrializadas reconocieron la terrible amenaza y acordaron restringir la
contaminación por dióxido de azufre, aunque hoy es superada por los óxidos de nitrógeno (NOx),
provenientes de los escapes de los vehículos automotores, fuentes domésticas e industriales” (Colombia,
1999) La lluvia ácida sólo fue descubierta a partir de los desastres ecológicos que causó en algunos países
de Europa, lo que inquietó a los científicos de esta zona del mundo y generó grandes investigaciones.
Tratada por primera vez en la Conferencia de Estocolmo en 1972, donde se habló por vez primera del
tema, debido a que al inicio de la década de los 70, ya se tenían cifras alarmantes de la contaminación de
ríos y bosques de los países industrializados por esta causa.
Entre los efectos se mencionan muerte de crustáceos, insectos acuáticos y moluscos y la
desaparición del fitoplancton, causando con el tiempo la imposibilidad de sobrevivencia del resto de la
fauna por falta de alimento; al penetrar en la tierra y afectar las raíces, a las hojas las vuelve amarillentas,
generando un envenenamiento de la flora que termina con la muerte de las plantas y árboles. En relación
a las edificaciones, la lluvia ácida las ha puesto en un serio compromiso, al volver porosa la construcción
y causar la pérdida de resistencia de los materiales, por lo que deben ser continuamente restaurados. A los
seres humanos se les ha detectado, pérdida de pelo y desgaste prematuro de mandíbulas junto con el
4. incremento de las afecciones respiratorias (asma, bronquitis crónica, entre otras) y un aumento de los
casos de cáncer. En relación a todos los seres vivos se puede decir, que estas precipitaciones con una
acidez elevada producen la disminución de las defensas y una mayor propensión a contraer enfermedades.
En el año de 1997 se celebra el conocido protocolo de Kioto que confirma la preocupación de la
comunidad mundial. En dicho protocolo se establecen objetivos para que los países industrializados
reduzcan las emisiones de los gases de efecto invernadero. De origen las industrias tendrán que optimizar
aún más sus procesos para disminuir la contaminación, aplicar tecnologías limpias y desarrollar nuevos
combustibles, además de apoyar la investigación de nuevas tecnologías (FAO 1998). Según el Protocolo
de Kioto establece esta opción transacciones de derechos de emisión sólo entre países que firmaron el
convenio. Este sistema se asemeja al modelo teórico clásico de Dales (1968) y al Sistema de Derechos
Negociables para Control de Lluvia Ácida desarrollado en Estados Unidos (1990), por esta razón este
mecanismo probablemente tendrá características de un mercado fluido, sencillo y eficiente para el
intercambio de derechos oferentes y demandantes.
Ya para concluir, nos corresponde a todos y cada uno, con el fin de reducir los efectos causados
por las lluvias ácidas están, evitar las exposiciones al aire libre, evitar el consumo de agua que hay sido
contaminada por este tipo de deposición y en caso de resfriados, problemas bronquiales o reacciones
alérgicas de la piel buscar el tratamiento médico adecuado para reducir los riesgos por una
automedicación. Aunado a esto, promover en nuestras comunidades la reducción de deforestaciones, tala
y quema, peor aún si estos conllevan la quema de productos químicos.
5. REFERENCIAS
FAO 1998. El protocolo de Kioto: nuevas oportunidades para financiar el desarrollo forestal
sostenible. Nota informativa, Abril 1998 LACFC/98/1. Citado por Rodríguez, A. y Sánchez, C.
en Lluvia Ácida y sus efectos disponibles en
file:///C:/Users/Usuario/Documents/UNY/Ambiental/Lluvia-ácida.pdf
HERRERA L, María Ugia. Lluvia ácida, aspectos fisicoquímicos y ambientales. Instituto de
Estudios Ambientales, Palmira, Colombia 1999. P129 citada por Garcés, L. La lluvia ácida: un
fenómeno fisicoquímico de ocurrencia local disponible en:
file:///C:/Users/Usuario/Documents/UNY/Ambiental/69510211.pdf
Definición de lluvia ácida disponible en:
http://www.laanunciataikerketa.com/trabajos/lluviaacplantas/lluvia.pdf