El documento presenta un recitado tradicional que la abuela de Jorge utilizaba para entretener a los niños. El recitado consiste en una serie de preguntas y respuestas encadenadas sobre el paradero de diversos objetos y personajes de forma absurda y divertida, creando sorpresas y relaciones delirantes. La abuela lo usaba para mantener entretenidos a los niños mientras su madre realizaba tareas domésticas.

1. 2. Canciones de cuna. El cocón te va a comer.
Que viene el coco
Dórmite niño de cuna, El cocón, el sacamantecas, la
dórmite niño de bien, muerte carraña… personajes fan-
que si no te duermes pronto, tásticos con los que se asustaba a
el cocón te va a comer. los niños. Las mujeres de Cetina,
SOLEDAD MARCO, 23-1-04 cansadas después de mil faenas,
calmaban a sus rorros con melodí-
as de la contradanza o el dance y
Dórmite, niño hermoso, algunas nanas como éstas.
que viene el coco,
y se lleva a los niños
que duermen poco.
CARMEN HORNA, 26-8-04
3. Fórmulas a la mariquita, a los tejedores
y al caracol
Santatona tona, tona, Caracol, col, col,
Saca el manto saca los cuernos al sol,
y veste a Roma. que tu padre y tu madre
Esto es a la santantona. también los sacó.
SOLEDAD MARCO, ANTONIA AGUILERA, CRISTINA
BELTRÁN Y CARMEN BUENO, 23-1-04
Y a las tijeretas también, yo me
acuerdo lo de las tijeretas esas que
están en el río. Coges una, pero
siempre van dos, y las coges así, con
las manos cerradas, y las agitas y
dices: Entre el juego y la magia, con
estos breves sonsonetes se dirigen
Tije, tijerilla, los niños a algunos pequeños ani-
tije, tijerón, males en la creencia de que les
corta una camisilla inducen a una reacción determi-
pa nuestro señor nada: la santantona o mariquita
despliega sus alas y vuela; las tije-
Y sueltas y siempre hay dos, por- retas o tijerillas (tejedores o zapa-
que hay dos y al moverlas se sueltan teros), insectos de largas patas
las dos y entonces salen dos, pero que corren con mucha agilidad
para engañar a los críos dices: por la superficie del agua monta-
–mira, ¿a que saco dos? Y cantabas dos uno sobre otro, se separan; y
la canción y salían dos. el caracol estira sus cuernos.

2. 6
4. ¿Dónde están las cosas? Subí a un cerro
Era un cuento que me contaba mi me se cayó la cenicica, –¿ánde está la misa?
abuela, bueno, a mí y a mis herma- fui a lavala al chorrico la canal, –al cielo arribica se ha subido.
nos y a mis primos y todo, pa entre- no había agua, Si se cae una teja
tenernos pa que mi madre hiciera –¿quién se la ha bebido? te rompe una oreja,
las cosas, y decía pues: -¡Hala, –los bueyecicos si se cae un tejón
entretenga un poco a los chicos! Y –¿ánde están los bueyecicos? te rompe un orejón,
nos decía, dice: –labrando la yubada si se cae un burro
Subí a un cerro, toqué un cencerro, –¿ánde está la yubada? te rompe el culo.
había ladrones comiendo capones, –las gallinicas la han escarbau JORGE BERDÚN, 23-1-04
les pedí una tajadica, no me la qui- –¿ánde están las gallinicas?
La abuela de Jorge lo entretenía
sieron dar, –poniendo los huevos
con este recitado enumerativo y
me eché a llorar, -¿ánde están los huevos?
encadenado, lleno de sorpresas y
vino mi abuela con una tranca –el señor cura se los ha comido
relaciones delirantes, precursoras del
y me hizo callar, –¿ánde está el señor cura?
“orden inconsciente” de los sueños
al cabo me la dieron, –diciendo la misa
surrealistas.
Niños en la escuela de Cetina en 1969