Consejos para aprovechar la información que nos dan las facturas eléctricas para reducir los costes energéticos de nuestro negocio.

1. 5 mitos sobre la auditoría de contratos
Llega la factura energética, como cada mes. Una mirada rápida a la cifra que ya han descontado
en el banco y al archivo. ¿Os reconocéis en esta escena?
La aparición de nuevas comercializadoras eléctricas en el mercado y la divulgación de los beneficios de
la gestión energética han despertado en muchas personas el interés por la auditoría y optimización de
contratos en su negocio.
Se trata de utilizar información que ya tenemos: con las últimas facturas energéticas podemos evaluar el
consumo de un período y valorar las ofertas de las distintas comercializadoras. La información está
disponible en la lista de comercializadoras que porporciona la Comisión Nacional de los Mercados y la
Competencia.
Esta es la primera actuación que se suele llevar a cabo en un proyecto de eficiencia energética y,
prácticamente en todos los casos, se obtienen ahorros significativos que se mantienen en el tiempo.
Pero como pasa con la mayoría de novedades, se han generado una serie de creencias que nos pueden
conducir a tomar decisiones equivocadas: desde continuar ignorando nuestra situación contractual hasta
emprender acciones mal fundamentadas.
Mito #1
“El gestor energético de mi compañía suministradora me ayudará a ahorrar”
Algo puede que sí. Pero en el mejor de los casos, las recomendaciones del gestor de la compañía
energética irán siempre orientadas a aconsejar las mejores opciones dentro de la oferta de la compañía
para la cual trabaja. Si queremos obtener el máximo ahorro, será mejor buscar una opinión más
idependiente.
Mito #2
“Para ahorrar, hay que cambiar de compañía eléctrica”
Como hemos dicho al principio, antes hay que valorar la oferta más actual en el mercado y estar al
corriente de las mejores condiciones disponibles, ya sea consultando los datos oficiales o pidiendo
asesoramiento a nuestro gestor energético.

2. Mito #3
“El secreto está en bajar la potencia contractada”
Las tarifas del tipo 3.0 ó 6.0 muestran la potencia contratada en la factura. En otros casos, esta
información no es visible en la factura y hay que monitorizar la instalación para verificar hasta qué
punto es razonable reducir la potencia.
Si nuestra tarifa es del tipo 3.0 o 6.0 y reducimos excesivamente la potencia, podemos recibir
importantes penalizaciones por exceso de potencia.
En tarifas reducidas no existe penalización económica, ya que en el momento en que se supera la
potencia contratada, salta el interruptor. En este caso, si se reduce excesivamente la potencia, se
producen cortes frecuentes que pueden afectar los equipos y las instalaciones, sin contar con la
disminución de efectividad y confort.
Mito #4
“No sirve de nada optimizar contratos: gran parte de la factura son
impuestos”
Nuestra experiencia es que vale mucho la pena incidir en la parte que permite ajustes. Los ahorros de
entre el 10 y el 15% en el total de la factura no son infrecuentes. En alguna ocasión, la auditoría de
facturas ha sacado a la luz defectos de facturación a favor del cliente que hemos gestionado con la
compañía, obteniendo el retorno de las cantidades facturadas indebidamente.
Mito #5
“Al principio sí que se ahorra, pero al cabo del tiempo se puede acabar
pagando más que al principio”
Esta creencia tiene su origen en el cercano sector de las telecomunicaciones, que sigue políticas de
precios más agresivas. Por el momento, este no es el caso del sector energético, aunque sí que es
conveniente hacer un seguimiento continuado de los precios y del mercado.
La recomendación del experto
Christian Verge ha llevado a cabo muchos de los proyectos de auditoría y
optimización de contratos en JustaEnergia. Para obtener una idea correcta del
consumo energético de nuestro negocio, su recomendación es evaluar como
mínimo las últimas 12 facturas, aunque lo óptimo sería tener las de los dos últimos
años completos.
De este modo podemos tener una imagen precisa de las necesidades de consumo
en todas las estaciones del año y en cada momento del negocio.
Puede obtener información de la situación del contrato energético de su negocio
respecto a su sector y un análisis individualizado enviando sus últimas facturas a
través de la herramienta Energy Grader.