3. ¿Por qué debo confesar
mis pecados a un
sacerdote?
Porque después de su resurrección,
Jesús dijo a Sus apóstoles: “Reciban el
Espíritu Santo: a quienes perdonen
los pecados, les quedan perdonados,
y a quienes se los retengan, les serán
retenidos” (Juan 20:22-23) Así
dándole el poder a la iglesia de
perdonar los pecados.
4. Hay pecados que no pueden ser perdonados
Sin embargo, hay una palabra enigmática en el Evangelio:
Jesús dice que hay un pecado que no será perdonado, el
pecado contra el Espíritu.
6. ¿Con qué frecuencia
debo acudir a la
confesión?
Para una persona que lucha por la santidad y
tiene un horario regular de oración mental, la
frecuencia ideal sería una vez a la semana.
8. ¿Qué sucede si no he cometido pecados graves?
El pecado mortal destruye la caridad en el corazón
del hombre por una infracción grave de la ley de
Dios; aparta al hombre de Dios, que es su fin último
y su bienaventuranza, prefiriendo un bien inferior.
El pecado venial deja subsistir la caridad, aunque la
ofende y la hiere.
9. LA FORMA DEL SACRAMENTO
“Yo te absuelvo de tus
pecados, en el nombre del
Padre, del Hijo y del
Espíritu Santo”
10. EL MINISTRO DEL SACRAMENTO
Cristo confió el ministerio de la
reconciliación a los Apóstoles, a
los obispos, sucesores de los
Apóstoles, y a los presbíteros,
colaboradores de los obispos.
11. EXAMEN DE CONCIENCIA
- Comience con una oración pidiendo la asistencia de Dios.
- Revise su vida con la ayuda de algunas preguntas, que están
basadas en los 10 mandamientos.
- Dígale a Dios cuánto siente realmente haber pecado.
- Haga una firme resolución de no pecar otra vez.
12. ¿Cuál es la materia del
sacramento de la reconciliación?
Los actos del penitente.
La contrición, la confesión y la satisfacción.