El documento habla sobre los sacramentos de curación en la Iglesia Católica: la Reconciliación y la Unción de los enfermos. La Reconciliación, también llamada Confesión o Penitencia, perdona los pecados y concede la gracia. La Unción de los enfermos, antes llamada Extremaunción, une al enfermo con la Pasión de Cristo y ofrece consuelo espiritual. Ambos sacramentos pueden perdonar pecados si el receptor está arrepentido.
2. Los Sacramentos son siete y nos
acompañan a lo largo de toda nuestra vida.
Para comprender mejor su acción en
nosotros, el Catecismo los clasifica en tres
grupos: Sacramentos de Iniciación, de
Curación y Servicio. Cada uno de ellos se
"viven" durante toda la vida cristiana, pero
se reciben en momentos adecuados.
INTRODUCCIÓN
4. A los Sacramentos de la Reconciliación y
Unción de los enfermos se les conoce
como Sacramentos de Curación porque
producen una acción
terapéutica en el alma
de la persona que los
recibe. Sana nuestra
alma de los dolores y
además la reconforta
para continuar.
6. También llamado Penitencia. Queda
instituido cuando Jesús le dice a Pedro
«lo que perdones en la tierra quedará
perdonado en el cielo».
Ver; Jn. 20, 22-23; Mt. 18, 18
¿Qué efectos produce la Reconciliación?
Nos perdona los pecados veniales y mortales.
Nos concede la gracia santificante.
Fortalece nuestra alma para realizar el bien.
Nos concede paz y consuelo espiritual.
Reconciliación
7. Es el sacramento instituido por
Cristo Nuestro Señor, para
perdonar los pecados cometidos
después del Bautismo, y conferir la
gracia sacramental que ayuda a
evitar las ofensas a Dios en lo
sucesivo, y a luchar eficazmente
por llegar a la santidad.
8. NOMBRES QUE RECIBE Este
SACRAMENTO
Reconciliación
Confesión
Penitencia
Sacramento de conversión
Sacramento del perdón
El Catecismo de la Iglesia Católica menciona diversos nombres
que toma este sacramento. Entre ellos están los siguientes:
11. Cinco cosas son
necesarias para
poder hacer una
buena confesión.
Lo haremos desde
la parábola del hijo
pródigo que nos
narra San Lucas
en el capítulo 15
de su Evangelio.
12.
13. PASOS para una buena Confesión
(Desde la parábola del HIJO PRÓDIGO)
1° El hijo pródigo su conciencia.
2° Se .
3° Hace el de volver al padre.
4° Vuelve y .
5° obras sus pecados.
Es decir, reflexiona, se arrepiente, se corrige, se acusa y así limpia su alma
14. 1. Examen de Conciencia
Esfuerzo sincero en recordar todos y cada uno de los pecados.
2. Dolor de corazon
Reconocer que se ha ofendido a Dios que nos ama tanto.
3. Proposito de no volver a Pecar
La sincera determinación de no volver a pecar por amor a Dios.
4. Decir los Pecados al Sacerdote
De una manera concisa, concreta, clara y completa.
5. Cumplir la Penitencia
Cumplirla con humildad en reparación por haber ofendido a Dios.
15. El sacerdote, con la facultad de poder absolver los pecados, después de
escuchar los pecados, haber indicado la penitencia y haber dado consejos
apropiados, da la absolución con la siguiente fórmula:
«Dios, Padre misericordioso, que reconcilió consigo al
mundo por la muerte y la resurrección de su Hijo y
derramó el Espíritu Santo para la remisión de los
pecados, te conceda, por el misterio de la Iglesia, el
perdón y la paz. Y yo te absuelvo de tus pecados en el
nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo».
Catecismo de la Iglesia Católica N° 1449
19. Antes era llamado «extremaunción»
otorga el perdón de los pecados si el
enfermo no ha podido hacerlo a través
del sacramento de la penitencia.
(Ver Sant. 5, 14 – 15)
¿Qué efectos produce la Santa Unción?
Une al enfermo a la Pasión de Cristo.
Consuelo, paz y ánimo para soportar el dolor.
El Perdón de los pecados si hay dolor de corazón.
Se restablece la salud corporal si es conveniente
Santa Unción
20. De otro lado, la iglesia , en virtud de la comunión de los santos,
intercede por el bien del enfermo y a su vez éste contribuye a la
santificación de la iglesia y al bien de todos los hombres
uniéndose libremente a la pasión y muerte de Cristo.
Inicialmente la Unción de los enfermos
era exclusiva para aquellas personas que
estaban a punto de morir. Hoy se
considera oportuno que lo reciba todo
fiel que está en peligro por enfermedad o
vejez. Es una gracia de consuelo, de paz
y de ánimo para este momento de
enfermedad donde el Espíritu Santo
renueva la confianza y la fe en Dios.
21. En el Antiguo Testamento, el hombre
experimenta en la enfermedad su propia
limitación y, al mismo tiempo, percibe que
ésta se halla misteriosamente vinculada al
pecado. Los profetas intuyeron que la
enfermedad podía tener también un valor
redentor de los pecados propios y ajenos.
Así, la enfermedad se vivía ante Dios, de
quien el hombre imploraba la curación.
(Ver números 313, 1499-1502)
22. El sacramento de la Unción de
enfermos fue instituido por Cristo,
aunque lo promulgó el apóstol
Santiago, que muestra la tradición
de la Iglesia cuando dice: "¿Alguno
de vosotros está enfermo? Que
haga llamar a los presbíteros de la
Iglesia y oren sobre él, ungiéndole
con óleo en el nombre del Señor; y
la oración de la fe salvará al
enfermo, y el Señor le aliviará; y si
tiene pecados, éstos le serán
perdonados" (Santiago 5,14-15).
BLOCH, Carl Heinrich (1834-1890) Cristo curando
23. aceite el sacerdote puede bendecirlo al momento
mismo de la administración de este sacramento.
El elemento material de
la Unción de los
enfermos es el óleo o
aceite que, según una
antigua tradición, ha
de estar bendecido por
el obispo. Y en caso
de no disponer de este