Introducción:Los objetivos de Desarrollo Sostenible
Joahan
1.
2.
3. El racismo se entiende como la
exacerbación o defensa del sentido racial de
un grupo étnico, especialmente cuando
convive con otro u otros, así como designa
la doctrina antropológica o política basada
en este sentimiento.
4. La discriminación racial es un concepto que suele
identificarse con el de racismo y que lo abarca, aunque se
trata de conceptos que no coinciden exactamente.
Mientras que el racismo es una ideología basada en la
superioridad de unas razas o etnias sobre otras, la
discriminación racial es un acto que, aunque suele estar
fundado en una ideología racista, no siempre lo está. En
este sentido hay que tener en cuenta que la
discriminación racial positiva (cuando se establecen
discriminaciones con el fin de garantizar la igualdad de las
personas afectadas), constituye una forma de
discriminación destinada a combatir el racismo.
5. El racismo suele estar estrechamente relacionado y ser
confundido con la xenofobia, es decir el "odio,
repugnancia u hostilidad hacia los extranjeros”. Sin
embargo existen algunas diferencias entre ambos
conceptos, ya que el racismo es una ideología de
superioridad, mientras que la xenofobia es un
sentimiento de rechazo; por otra parte la xenofobia está
dirigida sólo contra los extranjeros, a diferencia del
racismo. El racismo también está relacionado con otros
conceptos con los que a veces suele ser confundido,
como el etnocentrismo, los sistemas de castas, el
clasismo, el colonialismo, el machismo e incluso la
homofobia.
6. Las actitudes, valores y
sistemas racistas
establecen, abiertamente,
un orden jerárquico entre
los grupos étnicos o
raciales, utilizado para
justificar los privilegios o
ventajas de las que goza
el grupo dominante.
7. Para combatir el racismo, la Organización de
Naciones Unidas adoptó en 1965 la
Convención internacional sobre la
eliminación de todas las formas de
discriminación racial y estableció el día 21
de marzo como Día Internacional de la
Eliminación de la Discriminación Racial.
8.
9. El 65% de los ecuatorianos admite que en el país existen
prácticas racistas y discriminatorias, pero solo el 10% se
declara abiertamente racista. De este grupo, el 14% es blanco y
el 5% es afroecuatoriano.
Es la primera vez que se revelan estas cifras a través de la
Encuesta Nacional sobre Racismo y Discriminación Racial en el
Ecuador, realizada por la Secretaría Técnica del Frente Social y
el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC).
Para lograr un diagnóstico más real, se diseñó el Índice de
Prejuicio Racial Indirecto. Alcanzó el 76%, significa que de cada
siete ecuatorianos, cinco poseen algún grado de prejuicio frente
a los negros.
10. El 82% de los consultados se considera blanco y el
80% de los indígenas se muestra más prejuicioso
(frases ofensivas, actitudes sociales, estereotipos).
Y regionalmente, el mayor prejuicio está en la
Sierra (80%) que en la Costa (72%). También se
calculó el Índice de Cultura sobre el Racismo, a
partir de indagar conocimientos generales sobre
aspectos discriminatorios en los instrumentos
jurídicos, derechos colectivos y el Plan de Acción
de NNUU contra el Racismo. Resultado: 47%. Los
afros y los blancos son los que mayores
conocimientos poseen.
11. La encuesta también determinó dos
responsables: el Estado (55%) y la ciudadanía
(37%). Además, el 67% de los consultados está
de acuerdo en que el Gobierno priorice una
política de enseñanza de la diversidad étnica y
cultural; el 13% propone crear oficinas para
atender casos de exclusión; el 12%, campañas
masivas en los medios; y apenas el 8% plantea
leyes que penalicen el racismo.
12. Para combatir esta mentalidad hay que
tener una educación basada en:
Ignorar diferencias y actitudes del tipo “lo
nuestro es mejor”.
Alcanzar gracias al contacto intercultural, a
la comunicación y a la observación “los
demás tienen formas de actuar diferentes”.
Convivir en un estado de tolerancia que
respeta el hecho de que los demás son
diferentes sin aplicar perjuicios de valores.
Aceptar, valorizar y utilizar positivamente la
diferencia: “trabajemos juntos, de forma
común y enriquecedora”.