1. LA EXPLICACIÓN DE LA FORMACIÓN BÁSICA Y EVALUACIÓN POR
COMPETENCIA COMO INSTRUMENTOS FACILITADORES DEL
DESARROLLO HUMANO
"Estoy convencido de que hay
solamente un camino para eliminar
estos graves males, el establecimiento de una
economía socialista, acompañado por un sistema
educativo orientado hacia metas sociales."
Albert Einstein
Al hablar de formación básica y evaluación por competencia como indicadores del
desarrollo humano debemos darle importancia, en primer lugar a la educación como
factor que genera capital social y humano, pues es un indicador fundamental para
determinar el índice de progreso de una nación, la generación de nuevas ideas y
conocimientos generan industrias, y estas empleos dándonos un progreso colectivo
gracias al conocimiento producido, en otras palabras como dijo una vez Simón Bolívar
“Las naciones marchan hacia su grandeza al mismo paso que avanza su educación”.
Seguidamente, las universidades como generadoras de conocimiento son formadoras de
mano de obra calificada en la que intentan vincular una formación con sentido social y
humano que contribuya con su entorno social y cultural, lo cual según Josep M. Bricall
esto se puede traducir en que “la universidad puede desempeñar un papel importante a
la solución de algunos problemas, ello significa que ésta no se adapta pasivamente a la
evolución de nuestras sociedades sino que, en dialogo con los demás grupos sociales es
capaz de iniciar un proceso de cambio en relación con su entorno. Los caminos de esta
acción descansan en el estudio de problemas y en la sugerencia de propuestas, en el
intercambio de información, en su contribución a la movilización social y en el
compromiso de realizar cometidos específicos”, pero en una sociedad capitalista prima
en las universidades la formación de mano de obra calificada respondiendo así con los
parámetros que este tipo de sociedad trae, olvidando un componente muy importe que
es el inculcar una formación rica en valores y sentido social en las personas; sin
embargo tenemos que recalcar que en éste ultimo componente también interviene la
formación personal del egresado, y es él quien toma una decisión, si quiere ser una
simple mano de obra calificada o ser más que eso cuando se enfrenta a un mundo
laboral, un mundo competente donde los más preparados son los más apetecidos por las
industrias esclavizadoras que reinan en esta sociedad corrompida, las cuales sin tantos
2. rodeos acapara la atención de los egresados de las universidades atrapándolos en su
telaraña de ofertas, reduciendo al ser humano a convertirse en un ser hedonista amante
del placer y de los vicios que ha traído este modernismo, pero si intentamos entrar en
dialogo con la universidades para estudiar los problemas y sugerir propuestas puede de
que no se inicie un proceso de cambio en relación con nuestro entorno debido a que este
intercambio de información en su contribución al cambio social está limitado por fines
específicos que no perjudiquen a los inversionistas que ven en las universidades la
caldera de sus industrias, generando así en ciertos grupos estudiantiles pensamientos de
fracaso sobre el dialogo, desencadenando los disturbios y actos vandálicos muy
comunes en las universidades públicas.
Estamos acostumbrados a pensar en el desarrollo de una manera ideológica, y la
prosperidad y la calidad humana van ligadas con las palabras esfuerzo y dedicación. El
desarrollo de cada persona o de nuestro país debe partir de una realidad que trate de
mejorar las condiciones de vida de una población.