2. Los hombres de la Prehistoria tal vez descubrieron el fuego por
casualidad. Algún día un rayo prendió las ramas secas de un árbol;
esto probablemente causó gran conmoción a quienes presenciaron
este extraño acontecimiento.
Poco a poco, los hombres primitivos se fueron familiarizando con
el fuego, comprendieron cuales fueron sus ventajas y desventajas
y trataron de conservarlo.
Desde entonces, las mujeres fueron las
encargadas, casi siempre, de mantener encendido
día y noche el fuego que habían conseguido en el
bosque. Muchos miles de años después, se supo
como hacer fuego. Frotando una piedra con otra
hasta producir chispas que prendían ramas seca.
La tarea de cuidar el fuego, a partir de este
momento se volvió innecesaria.
3. Dima, una cría de mamut
peludo, sólo tenía seis meses cuando
murió. Conservada en el
permafrost suelo permanentemente
helado, Dima permaneció congelada
durante 40.000 años y fue
descubierta por buscadores de oro en
1977. Su cadáver todavía conserva un
pelaje rojizo. Fue descubierto con
este nombre por sus descubridores.
Es raro que los paleontólogos encuentren especímenes del
pasado tan perfectos como esta cría de mamut. Se descubrió
congelada en una excavación del noreste de Siberia.