2. INTRODUCCIÓN:
Justine Ward, centra su metodología
principalmente en la formación vocal, y está
enfocada al canto. Considera tres elementos
a tener en cuenta:
Control de la voz.
Afinación perfecta.
Ritmo preciso.
El desencadenante para crear este método
fue el escuchar en una Iglesia Católica a un
coro de niños cantando gregoriano.
3. CLASIFICACIÓN DE LAS VOCES:
En este método se lleva a cabo una clasificación de
las voces, en función del grado de perfección
adquirido. Ward clasifica las voces en tres tipos:
Óptimos; buena voz y buen sentido del ritmo.
Regulares; buena voz y regular sentido del ritmo
o viceversa.
Los que poseen una mala voz y mal sentido de
ritmo.
4. TRES ETAPAS EN DESARROLLO
DEL NIÑO:
Distingue tres períodos en el desarrollo del
niño:
La imitación pura.
La reflexión.
La ampliación.
5. EL MÉTODO CONSTA DE TRES
PARTES:
LA FORMACIÓN DEL OÍDO Y LA VOZ
LA VOCALIZACIÓN
EL CANTO GREGORIANO
6. CARACTERÍSTICAS:
Notación numérica para representar los
sonidos.
La voz es el elemento más importante.
Fononimia en ejercicios de entonación.
Ejercicios de respiración y vocalización
previos al canto.
(*) Con respecto al ritmo, Ward lo
consideraba como el alma de la composición
musical.
7. La aparición de las lenguas vernáculas
hicieron que el latín pasara a un segundo
plano, lo que influyó negativamente en
este método.
En España fue introducido por Tomás de
Manzárraga.