México tiene la segunda economía más grande de América Latina y la tercera en tamaño de toda América. Desde la crisis de 1994, los gobiernos mexicanos han mejorado la estabilidad macroeconómica. Eventos como el gobierno de Porfirio Díaz y la Revolución Mexicana transformaron la estructura política, económica y social de México, mientras que la nacionalización del petróleo y la Segunda Guerra Mundial favorecieron la expansión industrial en el siglo XX.