1. ENSAYO EL PRECIO DEL MAÑANA
Al crearse un nuevo orden mundial, el dinero ya no tiene valor sino el tiempo, se ha cumplido el
deseo de detener el tiempo a los 25 años, pero y ahora qué hacemos con la sobrepoblación que se
va dar como resultado de este nuevo orden. Siempre prevalece el poder económico en una
sociedad y la segregación por lo tanto es visual y objetiva, la brecha entre pobre y ricos solo se
estrecha o se agranda pero nunca desparece, la esferas más altas siempre viven en un mejor
estatus, con mejore servicios rodeados de un hábitat sano y clasificado, mientras que las esferas
bajas se les margina y se le ubica en guetos, barrios marginales, guasmos, favelas y otro tipo de
nominaciones para distinguir esta zonificación entre los asentamientos humanos de nuestro
mundo.
La velocidad de una clase social a otra cambia de ritmo, las elevadas son pasivas y consumistas,
mientras que la bajas son veloces y viven al día, se marco un nuevo ito en la vida que ya no es el
que más dinero tiene, sino el que más tiempo de vida tiene es el que más vale, la relaciones
sociales se correlacionan en base este nuevo elemento preciado y a la vez la segregación se la
realiza en base a la degradación del mismo. Pero siempre la lucha por la vida, hace que la
personas se conviertan en seres creativos e innovadores y a la vez que no pierdan los valores
morales de vida, haciendo de este un principio inquebrantable.
La solidaridad y la generosidad, en las clases sociales bajas es más notoria, la convivencia es más
familiar y la relaciones sociales son más estrechas, al contrario de las altas, en donde predomina el
interés por algo y la conveniencia del porque, al crearse una nueva moneda mundial que en este
caso sería el tiempo, todos los actos están dirigidos hacia la obtención del mimo, se trabaja para
conseguir más tiempo, se corre para ahorrar tiempo, se mata por obtener tiempo, se roba el
tiempo, lo que al final deshumaniza a la gente, convirtiéndonos en maquinas de tiempo.
En la actualidad si bien se maneja el dinero como moneda del mundo, no es menos cierto que
todos los días queremos ganar tiempo al tiempo, queremos ahorrar tiempo, ganar tiempo, matar
el tiempo, comprar tiempo de otros en trabajos que nos convengan a nosotros, hasta robar el
tiempo de otros. Hasta qué punto el ser inmortal es la solución a los problemas del ser humano,
no será al contrario que aumenta los mismos, hasta qué punto el milagro de la muerte hace que la
humanidad se mantenga en equilibrio dentro del planeta.
Todo proyecto tiene su horizonte y su vida útil, nada es eterno en el mundo, todo es pasajero, por
lo que el orden existente algún momento se terminará, vendrá otro que lo reemplace y nos
adaptaremos, caso contrario migraremos o desapareceremos de este mundo. Por lo que
deberemos estar preparados a lo que venga siempre y cuando con una educación y formación
elevada que no nos conviertas es uno más del montón sino en protagonistas del cambio del futuro
ya sea a nivel micro, meso o macro, siempre y cuando estemos dentro de los parámetros de la
moral y la ética.
Autor: César Julio Montoya Mantilla