El documento discute los principios éticos de la prevención en medicina. Por un lado, existe la obligación de realizar actividades preventivas efectivas, pero no todo lo prevenible debe prevenirse. La prevención debe basarse en evidencia científica sólida. Sin embargo, a menudo la información se interpreta sesgadamente y se inclinan hacia actividades preventivas de dudosa utilidad, a veces en detrimento del cuidado de pacientes. Por ello, es importante priorizar la prevención con demostrada efectividad y eficacia, respetando la autonomía

1. ÉTICA DE LA PREVENCIÓN:
¿ES MEJOR PREVENIR QUE CURAR?
P A T R I C I O B A H A M Ó N D E Z
É T I C A P R O F E S I O N A L
I P L O S L A G O S 2 0 1 4

2. FORMA PARTE DE NUESTRO PERFIL
PROFESIONAL
Existe la obligación ética de realizar las actividades preventivas que han
demostrado efectividad,
 Sin embargo, no todo lo que puede hacerse debe hacerse.
La prevención debe sustentarse en el conocimiento científico, al igual que se exige
en medicina curativa y paliativa, pero más aún cuando se dirige a una población
sana o asintomática.
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3. HECHOS A DESTACAR
La información científica abundante y compleja:
 no da respuestas adecuadas a las necesidades de la población
 está sometida a una interpretación sesgada.
Nos estamos inclinando hacia las actividades de prevención… con dudoso
fundamento científico,
 incluso en detrimento del cuidado de la enfermedad.
No disponemos de información sobre el impacto que produce en la salud de su
población la actividad preventiva realizada.
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4. HECHOS A DESTACAR
Una cartera de servicios insuficientemente definida, que genera
 la hiperfrecuentación (múltiples revisiones de niños y adultos sanos), medicalizando
situaciones naturales y respondiendo prioritariamente a exigencias de ciudadanos sanos
que sólo quieren conservar la salud.
Parece existir «competencia» por incorporar cuantas más actividades preventivas
mejor, como si la calidad de la atención pivotara fundamentalmente sobre esta
cuestión
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5. MARCO SOCIAL
Cuanto mayor es la oferta de «salud», más personas sienten que tienen problemas,
necesidades, y enfermedades.
Cuanto más gasta una sociedad en asistencia sanitaria, mayor es la probabilidad de
que sus habitantes se consideren enfermos.
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6. MARCO ÉTICO
Una actividad preventiva debe cumplir requisitos éticos y técnicos
ineludibles para ser recomendada, con garantías de eficacia y
seguridad.
 Prevención Primaria
 Prevención Secundaria
 Prevención Terciaria.
 Prevención cuaternaria: seguridad clínica y prevención de los errores
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7. PRINCIPIOS ÉTICOS
El principio de beneficencia:
 La beneficencia exige que en todos los pasos que constituyen la cadena investigación-
difusión-formación-implemetación-publicidad no se enmascaren los conflictos de
interés.
El principio de no maleficencia: efectos adversos
 Fenómeno del etiquetado; el sobre diagnóstico; Los falsos positivos; la
estigmatización…
 Durante los últimos años ha aumentado enormemente la actividad médica en relación a
los llamados «factores de riesgo», para los que se han propuesto rápidamente
soluciones farmacológicas.
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8. PRINCIPIOS ÉTICOS
El principio de justicia
 Exige eficiencia y se deben valorar otras prioridades en la inversión de los recursos.
 El tiempo es el recurso fundamental de la atención primaria.
Respetar la autonomía en la prevención:
 La mayoría de los conflictos éticos surgen con pacientes a los que se etiqueta de «no
colaboradores», personas que no siguen las recomendaciones sobre modificación de
hábitos.
 Se plantea entonces a los profesionales el dilema de hasta qué punto se puede
«presionar» a estos pacientes, existiendo por otra parte alto riesgo de «culpabilizarles».
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9. EL DILEMA
¿Qué sucede cuando un paciente nos solicita una acción preventiva
que no ha demostrado eficacia o que está contraindicada en su
caso particular?
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10. EL RESUMEN
Se pueden aprovechar las oportunidades de hacer prevención en la consulta
pero,
 Esforzándose en mejorar la educación sanitaria y las condiciones generales de toda la
población,
 …y no centrarse sólo en aquellos pacientes etiquetados de alto riesgo.
Como la prevención supone siempre gestionar el tiempo disponible y la demanda,
 Preciso priorizar a partir de la efectividad de ésta, lo que permitirá también reducir la
presión y la frustración que genera la acumulación de tareas en la consulta.
 El trabajo preventivo en equipo mejora la eficiencia pero requiere organización y
normas que impidan la dilución de la responsabilidad y las desigualdades en el
reparto de tareas.
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Losilla M. Altisent R. Ética de la prevención: ¿es mejor
prevenir que curar? AMF 2010;6(9):498-504

11. PREVENCIÓN VS COMPASIÓN
La actitud preventivista extrema está estrechamente relacionada con otras, como
la fascinación tecnológica, el empecinamiento terapéutico o el utilizar
indiscriminadamente todos los recursos existentes en cualquier circunstancia
para tratar la enfermedad.
Todas ellas tienen en común el planteo de todas las situaciones como problemas
independientes, sin relación mutua ni con las circunstancias vitales y
personales del paciente.
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12. PREVENCIÓN VS COMPASIÓN
La prevención y la compasión no deberían ser incompatibles pero:
 En la práctica, el entramado conceptual y social que promueve la actitud
preventivista extrema y la imagen del ser humano en que se basa pueden hacer
realmente difícil conciliarlas con una actitud realmente compasiva.
En palabras de Iona Heath: “Una dedicación excesiva y poco realista a la
prevención de la enfermedad puede destruir nuestra capacidad de atender a
los ya enfermos”.
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